Paritarias. Ajuste salarial: paro nacional de la docencia universitaria el miércoles 24 y jueves 25

Con una paritaria firmada el pasado jueves a espaldas de los 190.000 docentes universitarios y preuniversitarios por las Federaciones Conadu, Fedun, Fagdut, Ctera y Uda, se consuma un ajuste feroz sobre los salarios, en consonancia con el ajuste fiscal que exige el FMI.

La oferta salarial del gobierno para el segundo tramo de la paritaria (septiembre 2022 a febrero 2023) fue del 21 % en 3 cuotas entre agosto y diciembre. Ese 21 %, sumado al 41 % otorgado en el primer tramo (marzo a agosto 2022) y que ya hemos rechazado también oportunamente, arroja un 62 % anual, quedando muy por detrás de la inflación proyectada arriba del 90 % hacia diciembre. El resultado es un atraso de 27,5 % respecto a los precios, un golpe enorme al bolsillo de los docentes, afectando la educación universitaria pública en su conjunto.

Este acuerdo fue rechazado en las asambleas docentes que se realizaron a lo largo y ancho del país. En el congreso extraordinario de Conadu Histórica se resolvió por amplia mayoría (86 delegados/as sobre 87 presentes), en base a los mandatos de base, rechazar la oferta salarial del Gobierno y convocar a un paro nacional de 48 horas para los días 24 y 25 de agosto, con acciones de difusión y visibilización (clases públicas, radios abiertas, volanteadas, etc.) en la segunda jornada.

En Buenos Aires se convoca a una concentración con clases públicas el jueves 25, de 11 a 13 horas, frente al Ministerio de Educación. En Mendoza, se convoca desde las 07:30 hs en la Explanada del colegio Liceo Agrícola y Enológico (UNCuyo). En Bahía Blanca, a partir de 9:30 hs. en la esquina de Av. Colón y Vieytes (Bahía Blanca) se realizará una manifestación pública en conjunto con el SUTEBA Bahía Blanca; entre otras acciones en distintos puntos del país.

Asimismo, el día jueves 25 sesionará el Plenario de Secretarias Generales para evaluar las acciones realizadas y definir fecha y extensión de las medidas de fuerza de la semana del 29.

El ajuste salarial que se consumaría con este acuerdo acentúa aún más todo lo ya perdido en los últimos años desde el gobierno de Macri. Entre diciembre de 2015 y abril de 2022 la pérdida salarial acumulaba ya 28 puntos frente a la inflación. El cargo testigo (ayudante de primera con dedicación semiexclusiva) apenas llegará a fin de año a un poco más de $ 60.000 de bolsillo, la mitad de la Canasta de Pobreza.

A esto se suman los recortes en Educación de la mano del superministro, amigo de la embajada yanki, Sergio Massa, en $ 50.000 millones. De estos, $ 15.000 millones se quitaron al "Fortalecimiento Edilicio de Jardines Infantiles”, $ 30.000 millones al programa Conectar Igualdad, y otros $ 5.000 millones en Infraestructura y equipamiento, cuando precisamente las y los docentes denunciábamos que no se adecuaron las condiciones para el regreso a la presencialidad a la salida de la pandemia.

Y mientras tanto, el Gobierno pretende que seamos los propios docentes quienes auditemos quiénes deben o no cobrar programas sociales, mientras la pobreza afecta a más del 40 % de la población y se agudiza frente a cada nueva suba de precios de los alimentos.

Desde Docentes e Investigadores de Izquierda en La Marrón participaremos del paro y de las instancias asamblearias que necesitamos para conquistar un plan de lucha en serio, continuado y dispuesto a pelear de manera consecuente con el plan de miseria del gobierno nacional y los rectores y avalado por las burocracias sindicales.

Luchemos por aumento de salarios que recuperen lo perdido frente a la inflación. Ningún docente bajo línea de pobreza. Indexación de nuestros salarios a la escalada inflacionaria que vivimos. Aumento para jubilados y pensionados. Salario para les docentes ad-honorem y ayudantes de segunda. Aplicación del Convenio Colectivo de Trabajo en todas las universidades del país.