En un discurso de más de 2 horas, Jaldo reivindicó su colaboracionismo con el gobierno libertario asegurando que ’rindió sus frutos’, aunque no pudo nombrar ninguno. Agradeció a las conducciones gremiales la ’paz social’ y anunció más beneficios para las grandes patronales.
Sábado 1ro de marzo 13:59
En su discurso de apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura y a lo largo de más de 2 horas, Osvaldo Jaldo, se dedicó a reivindicar los "logros" de su gestión en cada una de las áreas de gobierno reafirmando su predisposición a seguir colaborando con su bloque de diputados a las políticas del gobierno de Milei.
"Desde un principio acompañamos institucionalmente al Gobierno elegido por la mayoría del pueblo argentino, sin importar de qué espacio político fuera, porque queremos lo mejor para nuestro país para Tucumán", manifestó Jaldo en un tramo inicial de su discurso en el que también reivindicó la firma del Pacto de Mayo, esa versión anacrónica del consenso menemista de privatizaciones, ajuste y ataques a los derechos laborales, a la que comparó con la declaración en Tucumán de la Independencia de 1816.
"La posición dialoguista con el gobierno nacional no hay duda que dio sus frutos", aseguró aunque el único "fruto" que pudo mencionar en todo su discurso fue la refinanciación de una deuda provincial y el traspaso algunas obras que la provincia deberá solventar con fondos propios. Y es que las transferencias no automáticas a las provincias que se destinan a obra pública tuvieron un recorte de casi el 90% y Tucumán no fue la excepción. El verdadero saldo de su colaboración con Milei, son la jubilación mínima de miseria (no llega a 300.000 pesos), leyes laborales que profundizan la precarización laboral, el desfinanciamiento de la Salud y la Educación, y la entrega de los bienes comunes naturales a las grandes multinacionales mineras.
En otro tramo de su discurso reivindicó el "equilibrio fiscal" y haber "ordenado las cuentas públicas sin incrementar ninguna alícuota impositiva". No faltaron los agradecimientos para las burocracias sindicales que garantizaron la "paz social en la provincia" cerrando acuerdos paritarios sin conflicto a pesar de los fuertes ajustes salariales. Hoy el salario inicial de un docente está en 600.000 pesos y el acuerdo paritario que firmó ayer con los gremios docentes representa un aumento de apenas 23.000 pesos por cargo.
Si el rigor fiscal se aplica a la hora de ajustar el salario de los trabajadores de la Salud y la Educación, para las grandes patronales de la provincia revindicó "el gasto tributario (que) consiste en exenciones y alícuotas ceros, tanto en actividades primarias como en comercios y servicios. Estas decisiones de exenciones y alícuotas ceros ascienden para este año a la suma de $35.000 millones para el presente período". Esa masa de recursos que el estado provincial evita cobrar equivale a 120.000 jubilaciones mínimas.
En otro tramo de su discurso Jaldo volvió a patear la pelota de la reforma electoral para la eliminación de los acoples asegurando que "hay tiempo, tenemos 2025 y 2026" y sin aclarar si el oficialismo pretende eliminar o apenas limitar el uso de los acoples, aseguró que los cambios en esta materia dependerán de las iniciativas que surjan en la Legislatura.
En el tramo final de su discurso, el gobernador dedicó varios minutos a arremeter contra el abogado Gustavo Morales (quien tiene múltiples causas judiciales contra funcionarios del gobierno provincial y del Poder Judicial, y es acusado de presunto instigamiento a la sedición policial en el marco de un reclamo salarial), para finalmente amenazar contra cualquiera que pretenda alterar el orden público.
Alejandra Arreguez, referente del PTS en el Frente de Izquierda, sostuvo que "Jaldo hizo un discurso patético, reivindicando su colaboración con las leyes más nefastas de Milei, el estafador. Habla de "frutos para el pueblo de Tucumán", pero el saldo es todo pérdida. No solo recortaron casi toda la obra pública, gracias al "peronismo con peluca" la jubilación mínima no llega a $300.000, avanza la precarización laboral y las universidades están desfinanciadas. Los únicos beneficiados son los grandes empresarios y quedó claro cuando habló del equilibrio fiscal, agradeciéndole la "paz social" a los dirigentes gremiales traidores que cerraron paritarias miserables, al mismo tiempo que anunció beneficios fiscales por 35.000 millones de pesos para los grandes empresarios. Si sumamos el desfalco de 17.000 millones que se fumaron con la estafa de los "cheques por ventanilla", ahí esta el sueldo que le recortan a docentes y trabajadores de la Salud. Hay que ganar las calles e imponer una huelga general para terminar con todo el plan de ajuste de Milei y los gobernadores".
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