“Tengo que elegir entre comer y comprar remedios”. “Es un genocidio”. “Tengo que trabajar por hora para comprar medicamentos”. Los testimonios de las y los jubilados se chocan con las ganancias siderales de las familias millonarias dueñas de los grandes laboratorios. Roemmers, Bagó, Selecki, Sigman. Te contamos quiénes hacen negocios con nuestra salud.
Lucho Aguilar @Lucho_Aguilar2
Viernes 6 de septiembre 11:52
Este miércoles las y los jubilados marcharon no solo contra el veto y por sus haberes. Trabajaron toda la vida y no pueden ni calmar sus dolores y enfermedades.
“Tuve que salir a trabajar por hora”, cuenta Selva que tiene 72 y creyó que estos años le tocaba descansar un poco.
Los medicamentos que más consume la tercera edad aumentaron un 189% en lo que va de este gobierno, según CEPA (Centro de Estudios Para la Argentina). A cualquier “abuelo” ya le demandan más del 70% del haber mínimo.
Remedios muy usados como el Daflon 500, contra la insuficiencia venosa que sufren el 70% de los jubilados, pasó de 11.500 a 67.000 peros. El Trastocir, para los problemas vasculares, el dolor en piernas para caminar, pasó de 6.700 a 34.000 pesos. Un robo.
“Es un genocidio que no se ve”, denuncia Eduardo, que estuvo con su cartel este miércoles en la protesta en el Congreso.
Los ganadores
Hace años que no pueden cubrir la “canasta de medicamentos”, pero todo empeoró con la desregulación de precios de Caputo y el recorte de los descuentos del PAMI de Milei.
Con esas ventajas, los grandes laboratorios aumentaron su facturación un 360% en solo un año.
En Argentina la “patria farmacéutica” está concentrada en 20 laboratorios que concentran gran parte de las ventas. Desde los “nacionales” como Roemmers, Bagó, Gador, Casasco, hasta los extranjeros como Bayer o AstraZeneca.
Cómo funciona el negocio: una gran concentración de empresas; tienen la propiedad privada de las patentes medicinales; ponen los PRM (precios de referencia medicinales) a su antojo; pagan salarios de miseria (teléfono para Héctor Daer); tienen negociados con todos los gobiernos.
La casta
En el video informe te contamos quiénes se hacen millonarios con nuestra salud.
Son unos ladrones, hacen fortunas con la salud de quienes laburaron toda su vida y se enferman.
Medicamentos para todos y todas
La izquierda es la única que denuncia a la patria farmecáutica. La que no tiene ningún compromiso con esa casta. La que está siempre en las calles con los jubilados y jubiladas.
Hay que seguir peleando. Contra el veto, por haberes que cubran la canasta de la tercera edad y por medicamentos para todos y todas. Por eso seguiremos debatiendo en el Congreso y marchando cada miércoles y sobre todo este 11 de septiembre.
Tenemos una salida: hay que anular todos los aumentos y nacionalizar a las grandes farmacéuticas que lucran con nuestra vida, que funcionen bajo control de profesionales y trabajadores de la salud, jubilados, y al servicio de las grandes mayorías.
Lucho Aguilar
Nacido en Entre Ríos en 1975. Es periodista. Miembro del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001. Editor general de la sección Mundo Obrero de La Izquierda Diario.