La Audiencia Nacional declaró nulos 672 despidos en Atento, empresa de atención al cliente y antigua filial de Telefónica de España. Los despidos habían sido pactados por los sindicatos mayoritarios CCOO y UGT.
Viernes 14 de noviembre de 2014
En todos los medios de prensa y sobre todo en las redes sociales se celebra con entusiasmo la readmisión de los 672 trabajadoras y trabajadores despedidos de Atento. Al tumbar el plan de despidos este miércoles, se ha ordenado también la readmisión de los trabajadores afectados, así como el pago de los salarios desde la fecha de la baja hasta su reincorporación.
Esta empresa es propiedad del fondo de inversión estadounidense Bain Capital desde el año 2012, cuando Telefónica la vendió a este capital privado por 1.051 millones de euros bajo una cláusula que garantizaba a Atento continuar como proveedor de servicios de la compañía española durante nueve años.
El pasado 26 de Julio, los nuevos propietarios habían anunciado un ERE (Ente de Regulación de Empleo) para el 10% de una plantilla que asciende a más de 9.000 trabajadores en España. Esto equivalía a la extinción de contratos de unas 800 personas a aplicarse en 15 centros de trabajo distribuidos en 12 provincias del Estado español.
Por otro lado, según fuentes sindicales, el 70% de la plantilla trabaja en servicios para Movistar. Los sindicatos denuncian que es Telefónica la que presiona estos recortes para obtener beneficios "rentables" en el Estado español.
Una sentencia contra los sindicatos que pactaron los despidos
La sentencia que tumbó los 672 despidos no sólo fue contra la empresa Atento. También fue a favor de las denuncias presentadas por sindicatos alternativos como el Sindicato de Trabajadores de Telecomunicaciones (STC), la Unión Sindical (USO), la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Confederación Intersindical Galega frente a los acuerdos de ésta con los sindicatos oficiales UGT, CCOO y FAGSA, quienes pactaron los despidos.
Según denuncias de CGT, el 31 de Julio pasado la empresa y los sindicatos UGT, CCOO y FASGA firmaron un “acuerdo vinculante” con las condiciones del despido colectivo, que dijeron ratificar bajo un referéndum. En ese proceso, a los sindicatos alternativos no se les entregó el censo de votantes, ni se les informó sobre el sistema de votación y se les impidió participar de la votación y recuento de los votos.
Los jueces cuestionaron también cómo se realizó el referéndum, con la siguiente sentencia: "No se publicitó el censo de afectados, ni la composición pública e imparcial de las mesas electorales, ni se aseguró el voto personal, libre y secreto de los afectados, siendo llamativo que no votaran la totalidad de los 672 trabajadores llamados a la votación, puesto que 131 afectados no votaron, ni se recontó de modo público el resultado". Para la Audiencia nacional, existió “una vulneración frontal de su derecho a la libertad sindical, en su vertiente funcional a la negociación colectiva, puesto que se les impidió influir de modo efectivo en una decisión que afectaba a sus afiliados, así como al resto de trabajadores afectados por el despido colectivo.
Después de meses de lucha y movilización, los trabajadores y trabajadoras de Atento, han logrado imponer un gran triunfo contra la patronal y las maniobras de la burocracia sindical. El fallo declaró nulos los despidos por vulneración "del derecho a la libertad sindical de los demandantes" durante el período de consultas del despido colectivo. Un triunfo celebrado por muchos sectores de trabajadores y trabajadoras que vienen sufriendo recortes, despidos y grandes retrocesos de la clase trabajadora en el Estado español.
