Tanto Sergio Berni como Patricia Bullrich, plantearon el hecho del robo como un justificativo del asesinato policial. ¿Vale más un objeto robado que la vida? De Pedro también fue consultado, pero ni él, ni los intendentes del Frente de Todos con responsabilidad política y territorial en el hecho, se pronunciaron en contra del gatillo fácil policial.
Miércoles 24 de mayo de 2023 21:31
La precandidata a presidenta de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich y el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, volvieron a justificar el asesinato policial.
Los hechos conocidos son que el domingo por la noche, en la localidad de Moreno, un joven de 28 años le robó la moto a un efectivo de la policía local de Ituzaingó, que estaba de civil, y pagó el asalto con su propia vida. Sin identificarse ni dar voz de alto, el sargento Lucas Mallea, de 31 años, le disparó cinco veces por la espalda, acertando cuatro disparos, mientras quien le había robado tenía las manos sobre el manubrio de la moto sustraída. Luego se conoció que el arma que tenía el asaltante era falsa y no podía efectuar disparos, además tampoco hace ademanes de querer disparar al momento en que es acribillado por Mallea. La secuencia del crímen quedó registrada por una cámara de seguridad en primer plano.
El policía fue acusado de "homicidio agravado", aunque está en libertad porque el fiscal Gabriel López consideró que "no existen riesgos procesales de fuga o entorpecimiento de la investigación".
Tanto Sergio Berni como Patricia Bullrich hicieron una defensa cerrada del accionar homicida del policía acusado.
Tanto el ministro de seguridad del Frente de Todos, como la exministra de Seguridad de Juntos por el Cambio, tomaron por cierta la declaración del efectivo de la policía que justificó haber matado al ladrón "en defensa propia".
Patricia Bullrich fue la primera en hablar del caso. Al parecer, vio la oportunidad de hacer campaña electoral, desempolvando su "doctrina Chocobar".
A travéz de la red twitter se quejó de la detención del policía homicida. "El policía actuó infraganti delito. Sin embargo, hoy está detenido. Si hubiera sido al revés, el motochorro estaría libre. La Policía debe tener el respaldo necesario para poder cumplir su rol: cuidar a la ciudadanía".
Horas más tarde festejó: "Liberaron al policía que mató al delincuente que le robó la moto tras atacarlo a él y a su novia, en Moreno. Desde el primer momento estuvimos a su lado, apoyando a quienes nos defienden".
Por su parte, Sergio Berni, mano derecha de Axel Kicillof y máximo responsable político por las policías locales de los municipios y la bonaerense, defendió la postura de "legítima defensa" y argumentó que el policía había sido víctima de "una agresión ilegítima, fue abordado para robar". Y que "hoy la delincuencia se caracteriza por el desprecio de la vida, no solamente de los demás, si no de ellos mismos".
En ambos casos, tanto Berni como Bullrich, pusieron el hecho del robo como justificativo del asesinato. ¿Es que vale más un objeto robado que la vida de una persona?
Bullrich predica directamente la ejecución "in fraganti" y Berni parece plantear que es válido asesinar un ladrón, porque hoy en día los ladrones no valoran la vida, entonces ante la duda mejor disparar. Aunque en este caso, como ocurre cada 24hs, el deprecio por la vida estuvo del lado del policía.
Curiosamente, Eduardo Wado De Pedro, consultado en América TV por el caso, respondió algo similar a esta última declaración de Berni: "Lo que se ve generalmente es que hay un desprecio por la vida, el valor de la vida no es como era antes".
De Pedro no defendió al policía, pero tampoco se posicionó en contra el gatillo fácil policial. Más que nada aprovechó la ocasión para polemizar con Patricia Bullrich y señalar que su discurso manodurista es demagógico: "se usa mediáticamente para hacer campaña y cuando tenemos que gobernar no se hace nada". Pero quien gobierna la provincia de Buenos Aires y el país hoy, es el Frente de Todos.
Tampoco se posicionaron ni pronunciaron: Alberto Descalzo, el intendente de Ituzaingó, localidad a la que presta servicio éste policía); ni Mariel Fernández, la intendenta de Moreno, donde ocurrió el homicidio. Ambos del Frente de Todos.
Una vez más, vemos a Berni y Bullrich, representantes políticos de las dos coaliciones mayoritarias del país, legitimar el asesinato policial, como si fuera lícito aplicar pena de muerte y sin juicio, por robar.
Por su puesto no es la primera vez que hacen una defensa corporativa de los miembros de sus fuerzas. Estos funcionarios han llegado a encubrir el crímen policial, también en casos que nada tenían que ver con robo. Patricia Bullrich encubrió a los gendarme sospechados de la desaparición seguida de muerte de Santiago Maldonado y Berni hizo lo mismo con los policías bonaerenses sospechados por la desaparición seguida de muerte del joven Facundo Astudillo Castro.
Con la campaña electoral en curso, aprovecharán cada ocasión para generar un discurso de mayor impunidad a las fuerzas represivas.
