Trabajadores vienen reclamando que se los regularice en su situación laboral, ya que los mantienen en la categoría de administrativos hace años, cuando les corresponde estar en la Carrera Profesional. Actualmente están realizando tareas esenciales con contagiados de Covid-19 pero siguen con salarios más bajos; sin licencias y con jornadas más extensas que sus pares.
Lunes 27 de julio de 2020 15:31
Desde hace años un sector de trabajadores y trabajadoras de la salud de la Ciudad de Buenos Aires vienen exigiendo que se les reconozca su trabajo mientras que el Ejecutivo porteño hace oídos sordos al reclamo. Estos trabajadores están encasillados en el Escalafón General, es decir como administrativos, cuando por su profesión y por las tareas que realizan tendrían que estar en la Carrera Profesional (Ley 6.035).
Esta diferenciación es solo administrativa ya que en la práctica estos trabajadores vienen realizando funciones que corresponden a su profesión, a la par de sus compañeros y compañeras que cobran hasta un 50 % más por encontrarse en la Carrera.
En la actualidad el reclamo toma otra dimensión porque vienen desarrollando tareas esenciales en el marco de la pandemia del virus del Covid-19, haciendo el triage (método de clasificación de pacientes sospechosos de contagio) o realizando diversos tipos de asistencia a personas con positivos del coronavirus. Incluso en algunos casos estas tareas se le suman a las ya habituales. Por lo que aumentó el peligro, la exposición y la carga de tareas para estos trabajadores pero siguen sin reconocerles todos sus derechos.
A igual tarea, igual salario
Actualmente el reclamo lo están llevando profesionales de las licenciaturas de medicina, psicología, fonoaudiología, trabajo social, sociología, nutrición, etc. Todas estas profesiones figuran en la carrera profesional por lo que no hay excusa para que se haga el pase a la carrera.
Esta injusticia se viene arrastrando desde hace 16 años en algunos casos, ya que en el 2004 fue la última vez que se regularizó a cientos de profesionales pasándolos a Carrera, con la Ley. Por ende los trabajadores reclaman junto con el pase el reconocimiento de la antigüedad y retroactivo de todo lo que no les reconocieron. Esta discriminación salarial es directamente anticonstitucional, ya que en el Artículo 14 bis se plantea textualmente que igual remuneración por igual tarea.
La diferencia no es solo salarial, ya que un profesional de carrera cumple jornadas semanales de 24 horas presenciales y 6 horas de capacitación, y los que se encuentran en escalafón general cumplen 35 horas presenciales, sin contar con horas de capacitación.
Siendo la jornada más larga, y con salarios menores, el desgaste es mayor. Sin embargo tampoco cuentan con todas las licencias específicas de los profesionales de la salud. Cabe resaltar que las y los trabajadores de la salud cuentan con licencias especiales por el tipo de tarea que realizan, pero para estos profesionales que se encuentran discriminados, no pueden tomársela, reforzando la precarización que cae en sus espaldas.
Este reclamo lo vienen desarrollando desde los propios trabajadores ya que tampoco cuentan con el apoyo de los gremios del sector, ni siquiera para que se les aplique las paritarias que les corresponden, ya que actualmente también están afectados a las de municipales en general y no a las de salud.
A su vez realizaron varias presentaciones en la Legislatura porteña pero nunca se le dio curso y perdieron estado parlamentario. Actualmente desde el bloque del Frente de Izquierda se presentó un proyecto de ley, y se está esperando que se apruebe en la Legislatura.
Esenciales, pero expuestos y precarizados
Esta discriminación salarial, donde trabajan a la par de sus compañeros y compañeras cobrando a veces la mitad del salario, y laboral porque ejercen jornadas más largas con menos licencias, solo se puede entender dentro de la precarización que abunda en el Gobierno de la Ciudad y en el sector de la salud.
En estos meses se vieron varios reclamos por estar trabajando con contratos de precarización en la primera línea frente a la pandemia. Y muchas veces sin los Elementos de Protección Personal necesarios en el contexto de pandemia por Covid-19.
Actualmente están creciendo exponencialmente los contagios en el AMBA lo que demanda mayor atención en el sistema de salud; pero también crecen los casos muy rápidamente entre el personal de salud. Por ejemplo en el Garrahan denunciaron que hay 122 trabajadores con Covid-19 en un universo de 149 pacientes con este virus. También ya fallecieron algunos trabajadores de hospitales en la Ciudad como el caso de un enfermero del Durand, y hace solo unos días una trabajadora de limpieza del Piñero. Justamente el aumento de contagiados entre los trabajadores es uno de los principales signos del colapso del sistema de salud.
Estos profesionales vienen realizando su trabajo codo a codo junto a sus colegas con todo el riesgo y exposición que esto implica, y el no reconocimiento de sus derechos genera mayor bronca cuando su tarea es esencial, todos los días, pero sobre todo en este contexto.
