Luego de la muerte de 39 migrantes en Ciudad Juárez, el presidente Andrés Manuel López Obrador visitó la ciudad, pero no ofreció ninguna respuesta.
Lunes 3 de abril de 2023
En el marco de lo sucedido el pasado lunes 27 de marzo, del presente año decenas de inmigrantes de Centroamérica y Venezuela principalmente se manifestaron a las afueras del instituto nacional de migración colocando un altar con distintas Banderas de Venezuela Honduras y Guatemala además de algunas fotos de las víctimas mortales del incendio sucedido al interior de una sala de detención para varones en las instalaciones del instituto nacional de migración.
Y es que según cifras oficiales hay por lo menos 39 fallecidos y un número hasta ahora desconocido de personas internadas en terapia intensiva por quemaduras de tercer grado en el hospital general.
Según declaraciones de los propios inmigrantes que se manifestaron desde el miércoles pasado hasta la fecha en un plantón indefinido el fuego no fue iniciado por los detenidos ya que en su propia experiencia, no hay forma de ocultar ningún tipo de encendedor o cerillos, pues antes de ser ingresados a la celda, son despojados de cualquier posesión e incluso de las cintas o agujetas de sus zapatos Cómo se hace en cualquier cárcel de cualquier ciudad de este país.
El día miércoles 29 varios grupos de activistas convocaron a la solidaridad con el plantón de los migrantes y acompañarlos en su exigencia de justicia ante lo que varios activistas afirmaron durante el mitin es un crimen de estado.
Entre ciudadanos inmigrantes y medios de comunicación se llevó a cabo dicho evento desde las 4 de la tarde hasta las 10 de la noche aproximadamente unos momentos antes de que el evento concluyera un grupo de activistas de Ciudad Juárez convocó a manifestarse el viernes 31 de marzo a las afueras del gimnasio de bachilleres dónde se sabía estaría López Obrador en un evento a puerta cerrada con empleados y partidarios de la 4T para discutir asuntos internos del gobierno y la secretaría de bienestar principalmente.
A dicha convocatoria asistieron varios grupos de manifestantes y también un grupo de por lo menos una veintena de inmigrantes además de medios de comunicación nacionales e internacionales.
Dicha convocatoria tuvo como fin encarar al presidente y buscar ser escuchados ya que días antes López Obrador hizo declaraciones que descontextualizaron lo ocurrido en la celda del INM y terminaban responsabilizando directamente a los propios inmigrantes de su fatídico destino.
Esto desde luego causó molestia en la comunidad local y nacional de los distintos grupos en Solidaridad con la migración pero desde luego causó aún más indignación entre la comunidad migrante.
A la fecha el presidente y sus voceros solo hablan de cinco detenidos entre funcionarios de bajo perfil custodios y también un inmigrante acusado directamente de ser el incendiario.
El evento oficial duró aproximadamente 3 horas mismas que los manifestantes aguardaron con paciencia en la salida del edificio al convoy del presidente.
Lo indignante y decepcionante para los migrantes como para los activistas locales fue la actitud con la que el presidente y su escolta salieron del edificio sin ningún interés por escuchar las demandas de ninguno de los grupos que se concentraban en la salida el presidente se limitó a sonreír y saludar como si se tratara de los eventos públicos en los que se le elogia y se le saluda como está acostumbrado.
Un grupo de manifestantes extranjeros y nacionales decidió detener el paso de la camioneta de López Obrador con la firme intención de que escuchara y declarara para por lo menos ofrecer algún tipo de resolución a las víctimas en términos de justicia, por eso no ocurrió, por el contrario, el presidente dio la indicación a su chofer de que avanzara a una riesgo de atropellar manifestantes y/o reporteros y reporteras de distintos medios de comunicación.
Antes de que la escolta militar del presidente lograra a la fuerza dispersar a los manifestantes que le impedían el paso varios activistas le cuestionaron por qué no se detenía a atender las denuncias y se le cuestionó que a qué le tenía miedo textualmente.
A lo que este respondió: "a provocadores como ustedes".
Unos segundos después de eso el presidente y su chofer arrancaron a toda velocidad hacia la avenida principal seguidos por su escolta también a toda velocidad y sin ningún cuidado por los peatones que todavía se encontraron en la manifestación.
Posteriormente los migrantes decepcionados y frustrados convocaron a una rueda de prensa a las afueras del instituto nacional de migración donde hasta ahora mantienen su plantón iindefinido.
Es de destacar que la política migratoria del gobierno actual, expresa la alineación a las exigencias de los gobiernos norteamericanos de los últimos años, donde se criminaliza a lxs migrantes, se les niega el reconocimiento de sus derechos sociales y políticos y se viola sistemáticamente sus derechos humanos.
La indignación y denuncia de los crímenes que sufren cientos de miles de migrantes en su paso por México, exige un correlato en luchar por plenos derechos para lxs migrantes, exigir un alto a la represión y defender que ningún ser humano es ilegal.
