Debate. ¿Cómo frenar la inflación?: las propuestas de los partidos patronales y la izquierda

La inflación de abril fue de 8,4%, así ya alcanzó 108,8% en los últimos doce meses, un golpe al bolsillo de la clase trabajadora. Alberto Fernández prometió una guerra contra la inflación, que nunca empezó, y el actual ministro de Economía, Sergio Massa, a fin de año declaró que su objetivo era que la inflación empiece con 3% en abril. Bueno, eso no ocurrió.

Todavía faltan algunos meses para las elecciones presidenciales y no se conocen en detalle los programas económicos de todos los partidos políticos patronales, pero ya hay medidas que están en debate. A continuación, presentamos las propuestas que se conocen por el momento para frenar la inflación y qué propone la izquierda para enfrentar la suba de precios.

Juntos por el Cambio

Los principales referentes que integran la mesa nacional de Juntos por el Cambio se reunieron con sus economistas hace semanas para debatir los ejes de un plan económico del espacio. El comunicado público indica que acordaron "una hoja de ruta para atacar prioritariamente la inflación que destruye el salario, genera pobreza y desordena nuestras vidas" y expresa que “con equilibrio fiscal, una política monetaria y financiera responsable y políticas que salvaguarden a las familias argentinas lograremos las bases para el desarrollo productivo en todas las provincias de nuestro país”.

Si bien hay diferencias entre los candidatos presidenciales Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, ambos coinciden en la necesidad de reducir el déficit fiscal, es decir avanzar con el ajuste, y en bajar la emisión monetaria, una medida que frena la economía.

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Los economistas de derecha suelen apuntar a la emisión de billetes del Banco Central como causante único de la inflación con la cual pretenden justificar el ajuste sobre el gasto público. Sin embargo, eligen recortar partidas sensibles como educación o salud, se niegan a discutir la “estabilidad fiscal” a través de atacar el sistema tributario regresivo subiendo impuestos a los grandes empresarios. Durante el gobierno de Macri se propuso metas de incremento de la base monetaria cero (reducir la emisión), sin embargo tuvo los registros históricos de inflación más altos desde la hiperinflación de inicio de los años 90.

En tanto, más allá de las diferencias de plazos ambos candidatos proponen eliminar el cepo, lo que significa una devaluación del tipo de cambio oficial que provocará más inflación.

“Liberales”

La dolarización es uno de los temas que se viene debatiendo y uno de sus impulsores es Javier Milei. Este economista asegura que su aplicación permitirá estabilizar la economía, terminar con la inflación y mejorar los salarios.

La dolarización implica que se retiren todos los pesos en circulación y se reemplazarán por dólares, pero para realizar esto se necesitan dólares, que son los que escasean en las reservas del Banco Central. Por este motivo, distintas estimaciones calculan que la cotización del dólar oficial podría escalar hasta $2600, o incluso más. La medida que propone Milei empujará a una megadevaluación que hundirá aún más el poder de compra de la clase trabajadora, también afectará a los pequeños ahorristas, y sería el grado cero de la soberanía monetaria porque desaparece la moneda nacional.

La dolarización tuvo consecuencias nefastas en los países que se aplicó como Ecuador con aumento de pobreza, y pérdida salarial.

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Para profundizar sobre la estafa de la dolarización se recomienda el primer capítulo de Marxismo versus Liberalismo por Lucía Ortega, el informe especial sobre dolarización de La Izquierda Diario y la nota de Ideas de Izquierda de Pablo Anino “Dolarizar: el Caballo de Troya de Milei contra la clase trabajadora”.

Frente de Todos

La inflación se aceleró bajo el gobierno del Frente de Todos, el acuerdo con el FMI es inflacionario como tuvo que reconocer la vicepresidenta Cristina Fernández. La suba de tarifas de los servicios públicos, de los combustibles, las minidevaluaciones para cumplir con el Fondo aceleraron los precios.

Las medidas oficiales para contener la inflación fueron los programas como precios cuidados, precios justos, que no lograron domar los precios. Los grandes empresarios realizan maniobras para evadir dichos programas y remarcar precios.

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Massa convocó junto a los dirigentes sindicales un acuerdo de precios y salarios, pero los grandes empresarios no dieron una respuesta sobre esta propuesta. Este tipo de política actúa sobre las consecuencias y no sobre las causas centrales de la inflación. Además, estos acuerdos ya se intentaron en otros momentos de la historia nacional y siempre quedaron en la nada como ocurrió con el Pacto Social de 1973 de Perón. Las patronales quieren mayor libertad para remarcar los precios, frenar todo lo que puedan el reclamo paritario de los trabajadores, ampliando la brecha entre el precio de las mercaderías que venden y los salarios que pagan, lo cual les permite mejorar sus ganancias a costa de los trabajadores.

Frente de Izquierda Unidad

El PTS en el Frente de Izquierda Unidad, junto a sus candidatos Myriam Bregman y Nicolás del Caño, plantea un programa de otra clase para evitar que la crisis se descargue sobre las espaldas del pueblo trabajador. La izquierda propone frenar la inflación con medidas que estén orientadas a atacar sus causas y medidas de emergencia ante el deterioro del poder de compra. En este sentido, es necesario aumento de emergencia de salarios, jubilaciones y programas sociales, y que se ajuste mensualmente según la inflación; comités de trabajadores y consumidores sobre todas las cadenas de productos esenciales, desde la producción, distribución hasta la venta en grandes supermercados. Así, se podría impedir que las grandes cadenas de supermercados e hipermercados remarquen los precios sin control. También es necesario imponer la apertura de los registros contables para verificar las ganancias reales de las grandes empresas, así como evitar las maniobras que puedan hacer para presentar números menores a sus ingresos reales.

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Además, se requieren medidas como la nacionalización de los servicios públicos, bajo control, administración y gestión de trabajadores y control de los usuarios populares, para acceder a tarifas bajas; la nacionalización del sistema financiero, creando un banco único estatal, para frenar la salida de capitales (dólares), y evitar una disparada del tipo de cambio que aceleraría aún más los precios; la nacionalización del comercio exterior, que hoy está en manos de unas pocas multinacionales extranjeras, bajo control de los trabajadores. Las grandes alimenticias producen para ganar exportando mientras una porción enorme de la población pasa hambre. El monopolio estatal del comercio exterior permitiría controlar la entrada y salida de dólares, se evitarían maniobras especulativas que hacen las grandes patronales, así como también es necesaria la estatización de los puertos que en la actualidad están en manos privadas, y la expropiación de los 4.000 grandes propietarios.

Se trata de un conjunto de medidas para dar una respuesta a la clase trabajadora que es la que sufre las consecuencias de la inflación y de las crisis permanentes. La salida es por izquierda.

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