Hace unos días se lanzó para las plataformas PC y Nintendo Switch el videojuego "Tonight We Riot", contextualizado en una realidad completamente decadente por parte del sistema capitalista y donde la precariedad de la clase trabajadora se encuentra por los cielos. En este artículo repasaré algunos elementos de interés frente a la emergencia de una juventud con ideas anticapialistas, y su relación con el desarrollo de nuevas tecnologías.

Cuando el cineasta y artista visual, Harun Farocki comenzó a investigar sobre la profundidad de los videojuegos y la realidad virtual en nuestras vidas, no fue por una decisión azarosa. El alemán prolífero de producciones innovadoras, pudo reconocer en esta forma de representación ficcional, audiovisual, e interactiva, un cruce absolutamente visionario sobre la estrategia, el arte y la teoría del juego. No en un sentido en el que programadores, diseñadores, o funcionarios y funcionarias a fines, no hayan reconocido previamente esta genialidad, sino más bien en el intentar mostrar el uso ideológico del capitalismo en un tipo de estructura narrativa y experiencial, frente a la implementación de nuevas tecnologías con las que convive nuestra generación. Y por tanto como el mismo señala una necesidad latente de “Desconfiar de las imágenes” [1].

El entretenimiento electrónico en medio de la crisis

En el caso de lo que se conoce como “industria del entretenimiento”, los videojuegos ocupan el primer lugar, seguidos del Cine y posteriormente del streaming [2], que durante estos últimos años, se ha mantenido galopante, sobre todo si es que tomamos en cuenta que producto de la pandemia del COVID19, consiguieron aumentar en 15 millones los suscriptores producto de la cuarentena [3]

Sin embargo, los videojuegos, como el conjunto de las expresiones creativas y geniales del ser humano, no son ajenos a los eventos políticos e históricos que ocurren a escala mundial. En particular en un año como el 2020, en cual se han venido depositando muchas esperanzas y expectativas por amplios movimientos de masas, en poder dar una respuesta profunda y estructural a la crisis económica, social y ambiental que vivimos actualmente. Esto sin mencionar las importantes rebeliones gestadas en distintos países como Francia, Hong Kong o Chile. De aquí se desprende la versión demo de “Chile Crisis” [4], que busca representar las importantes luchas masivas en las calles, junto con el rol de la “Primera línea”, al cual el gobierno represivo y criminal de Sebastián Piñera, ha buscado deslegitimar recurrentemente.

Y es en este contexto convulsivo, en el que la clase trabajadora a nivel internacional ve socavada sus ya precarias condiciones laborales y de vida -en comparación a las ganancias que amasan los capitalistas- que nace un videojuego como “Tonight We Riot”, desarrollado por "Pixel Pusher Union 512" [5] en colaboración con"Means Interactive", y que relata la sublevación espontánea de las masas frente a un régimen imperante, abriéndose paso en una serie de niveles, donde debe enfrentarse a la policía, al mismo tiempo que va liberando fábricas y zonas bajo control de sus trabajadores.

Trama y jugabilidad en “Tonight We Riot”

“Es el 20XX el mundo está en las garras del capitalismo mundial. Trabajadores en cualquier lugar se esfuerzan diariamente por unas migajas. Mucho trabajo en múltiples empleos para poder llegar a fin de mes. Pero no importa cuanto trabajen, nunca será suficiente para ser libre. Para quienes no controlan los medios de producción, nunca conocerán la verdadera libertad. Pero todo eso está a punto de cambiar. Esta noche nos manifestaremos”.

Con este fragmento comienza el juego creado por “Pixel Pusher Union 512”, una cooperativa de trabajadores dedicados al desarrollo de videojuegos retro, de perspectiva crítica, y anticapitalista, que hace un par de días estrenó dicho videojuego, que nos permite vivir desde principio a fin el alzamiento de la clase obrera y los sectores populares, en contra de sus verdugos la burguesía, los capitalistas.

Es así, que con toda la estética de aquellos recordados juegos de supernintendo (SNES), se da punto de partida en la ocupación de una corporación por parte de un sector político organizado, que poco a poco comienza a extenderse a través de la ciudad.

En lo que refiere al equipamiento, primero se comienza con piedras, pero en el transcurso del juego irán apareciendo nuevos objetos de apoyo para el jugador que tiene que resistir a la represión de la policía en las calles con lacrimógenas, aras de fuego, drones, tanques y todo dispositivo posible con tal de sofocar la rebelión desatada.

La liberación de fábricas y zonas naturales aprisionadas por industrias contaminantes, son algunas de las etapas que hay que sortear, con tal que se expanda el movimiento revolucionario por el socialismo, a la para que decenas de trabajadores comienzan a sumarse a la insurrección, cada vez más masiva y decidida en llevar su lucha histórica hasta el final aunque eso signifique luchar en contra de robots, mutantes, o cada personaje extraño, como una cuota de humor pero no menos ajena a los discursos distópicos que se han ido instalando a través de los últimos años. Esto acompañada de música "vaporwave" generando un híbrido entre actualidad y pasado.

La crisis del capitalismo y el impacto generacional en la juventud

La crisis del capitalismo a nivel mundial es evidente. Si bien posterior a la crisis e la burbuja inmobiliaria del 2008 [6], la burguesía pretendía reajustar el ideal capitalista como modelo de sociedad triunfante, hoy vemos que la enorme desigualdad y precariedad de la vida, junto a enormes crisis sanitarias y medioambientales, han reventado aquella burbuja, produciéndose diversos levantamientos durante los últimos años a nivel internacional. Protestas como en Irán, Francia, Hong Kong, o Chile son parte de ese segmento sobre el cual los empresarios en todo el mundo quieren hacer caer en sus espaldas.

Sin embargo, hay una juventud de espíritu indomable, que al calor de nuevas tecnologías y conocimientos sobre la ciencia y la cultura, hoy se posicionan frente a la miseria que viven ellos y sus familias, teniendo que soportar trabajos altamente demandantes, al mismo que deben organizase con sus horarios de estudio. Sólo basta pensar en servicios como la comida rápida, call center, asistentes de supermercado, o directamente al trabajo irregular sin ningún tipo de seguridad.

Es esa juventud de hoy, que a la par que programa, diseña, que utiliza medios de masas para comunicarse, con el efecto de socializar y generar nuevas comunidades, también tiene una mirada crítica de la sociedad en la que vivimos, y que es urgente organizarse para ponerle un freno a esta crisis, para que la paguen sus verdaderos responsables, los grandes empresarios. O a esto a punta al menos “Tonight We Riot”, de Pixel Puchers Union 512”, quienes a la par que desarrollan una narrativa o modalidad de juego muy novedosa, rebelde y de un mensaje político fundamental, a su vez cuenta con un equipo que no sólo formula los problemas de la sociedad en un videojuego, sino que también se compromete con una visión política que es capaz defender en la práctica. [7]

Puedes revisar el trailer de "Tonight we riot" aquí: