Estudiantes, docentes y no docentes de la Universidad Nacional de San Martín se organizaron durante las semanas de movilización contra la ley Bases y por la libertad de los detenidos por la represión. Este es un relato que trata de reflejar parte de ese proceso, en perspectiva de redoblar este camino para las luchas por venir y por liberar a los 4 detenidos que faltan.
Viernes 5 de julio 20:09
Este año el movimiento estudiantil cumplió un papel importante en la lucha contra Milei, con una gran movilización el 23 de abril en todo el país, luchando en defensa de las universidades, defendiendo el presupuesto y los salarios de los trabajadores de la universidad. Nicolás, Camila y Sasha fueron parte de esta pelea en la UNSAM desde el primer momento, participando en las asambleas, ruidazos, movilizaciones y festivales. Se organizaban en sus escuelas, discutiendo en sus centros de estudiantes, pero también en la asamblea de San Martín, con vecinos y trabajadores de la zona.
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Las detenciones ese miércoles nos conmovieron y nos llenaron de rabia, primero porque podríamos haber sido cualquiera de los que estuvimos durante la movilización con ellos junto a la columna de las asambleas populares de todo el AMBA, y también porque junto a ellos nos organizamos durante todo el gobierno de Milei en estos espacios entre estudiantes y trabajadores. La semana previa habíamos realizado una fuerte campaña para movilizar a toda la UNSAM contra la ley Bases, explicando en redes y en cada aula que implicaba esta nefasta ley.
Así fue que a pesar del cansancio luego de días de explicar que significaba la ley Bases en la universidad, de movilizarnos el mismo 12 desde la mañana junto a docentes autoconvocados de la UNSAM, de trabajadores del INTI (instituto nacional de tecnología industrial) y CNEA (comisión nacional de energía atómica), de haber estado horas en la plaza frente a la represión, el jueves volvimos a convocarnos en las puertas de las comisarías en reclamo por la libertad de nuestros compañeros. Por las redes y grupos de whatsapp hicimos llegar la noticia a todos nuestros conocidos, y fuimos recibiendo las noticias del apoyo de los centros de estudiantes de la universidad, de los sindicatos, y del rectorado, que transmitimos en la puerta de la comisaría a Silvia, madre de Camila.
El viernes nos enteramos que eran trasladados a Comodoro Py, y hacia allá nos movilizamos estudiantes de la UNSaM y vecinos de la Asamblea San Martín, esa misma unidad con la que enfrentamos el robo a los jubilados, quita de derechos laborales y entrega de las empresas públicas y bienes naturales del país que significaba esta ley. Mientras hicimos una breve asamblea para decidir como seguir, desde la universidad otros compañeros de En Clave Roja nos hacían llegar fotos de solidaridad desde las aulas, incluso en parciales, que estudiantes y docentes se tomaban.
Esa noche la noticia de que Camila, Nicolás y Sasha serían trasladados a las cárceles de Ezeiza y Marcos Paz nos llenó de odio y preocupación, y fue un punto de inflexión para redoblar la campaña por su liberación. El sábado por la tarde, a propuesta del Centro de Estudiantes de Ciencia y Tecnología y también impulsada junto a la asamblea de San Martìn se realizó una movilización desde la universidad hasta la plaza, donde participaron familiares y amigos de los detenidos, integrantes del centro de humanidades, docentes autoconvocados de UNSAM, la asamblea de trabajadores de CyT, de ATE INTI, CNEA, de la escuela técnica de UNSAM, docentes, ferroviarios, de comedores populares y el centro de estudiantes del ISFD 39 de Vicente López.
El lunes delegaciones de centros de estudiantes de la UNSAM, la asamblea de San Martín, de la agrupación Marrón de CNEA y Pan y Rosas participamos de la conferencia de prensa en el SERPAJ que dieron los familiares de los detenidos. Con la movilización anunciada, desde En Clave Roja propusimos a los familiares enviar una carta al rector para solicitar un cese de actividades durante la tarde del martes para que la movilización desde la universidad sea masiva, algo que finalmente no accedieron las autoridades.
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A pesar de no estar en la universidad durante el fin de semana se juntó todo el apoyo posible para expresarlo públicamente. Docentes e investigadores de la universidad hicieron llegar videos pidiendo por la libertad de los detenidos, defendiendo el derecho a la protesta que todo este año también han ejercido defendiendo sus salarios y las universidades. También se difundió por cada grupo de cursada, de trabajo y de amigos el petitorio por la liberación de los detenidos, que logró recolectar más de 60.000 firmas que luego serían entregadas por una delegación de referentes de organizaciones de derechos humanos al juzgado.
El martes volvían las clases, pero aún faltaban nuestros 3 compañeros en sus aulas, así que no fue un día normal. Eran días de parciales, pero igualmente docentes y alumnos dieron lugar durante sus exámenes a que estudiantes de En Clave Roja junto a trabajadores docentes y ferroviarios de la asamblea de San Martín pasaramos por las aulas para avisar que por la tarde habría movilización y difundir el petitorio de firmas.
El primer año de las carreras de artes escénicas organizaron una asamblea durante su cursada, en la cual debatieron el avance represivo del gobierno, frente al cual votaron un plan de lucha. Este incluía pintadas de carteles, semaforazos y participar de la movilización de la tarde, además que se tomó la propuesta realizada desde la presidencia del CECyT para impulsar jornada de asambleas de toda la universidad al otro día, que luego llevamos a los otros centros de estudiantes. Por la tarde estudiantes, docentes autoconvocados, la asamblea de becarios e investigadores, docentes de la escuela técnica de UNSaM, trabajadores de CNEA y la asamblea de San Martín nos movilizamos juntos a la plaza de mayo donde tomarían la palabra los familiares de los detenidos. Una alegría inmensa recorrió en todos los que participamos la noticia que llegó por la noche de la liberación de 11 detenidos incluídos los 3 estudiantes de la UNSAM.
Esta lucha aún no termina hasta liberar a los 4 detenidos que aún siguen presos y que se cierren las causas a todos los que fueron detenidos. Por eso el jueves acompañamos la ronda de las madres, nuevamente entre el CECyT, la asamblea de San Martín y una importante delegación de estudiantes de artes que realizaron una presentación ese día. Esta pelea continúa y el viernes 29 los docentes autoconvocados realizarán un cartelazo en la gala de circo para exigir por el salario docente y la liberación de los detenidos.
Los planes de Milei siguen en marcha, ahora con la ley Bases en el congreso para su aprobación buscará redoblar sus ajustes y ataques contra los derechos del pueblo trabajador, y conocemos que ese plan será acompañado de más represión. Por eso ahora tenemos que reforzar toda la solidaridad que hemos conseguido estas semanas, mostrar el apoyo que tienen todos los que ejercen su derecho a movilizarse. Stornelli junto al gobierno armaron esta persecución para intentar frenar la masividad de la oposición a medidas antipopulares como se mostró el 23 de abril en defensa de las universidades y la determinación de enfrentar el conjunto del plan reaccionario del gobierno que vienen mostrando, entre otros sectores, las asambleas populares.
La coordinación que se dió en estos distintos sectores que participaron de estas peleas es el camino a seguir si queremos derrotar estos planes de Milei, para nosotros es importante sostener los espacios asamblearios, de coordinación por qué allí podemos construir uma gran fuerza. Los 282 despidos en el INTI y los 97 despidos en FATE, además de las amenazas de privatización de los trenes estatales, son lugares que tenemos que llenar de apoyo para seguir construyendo esta fuerza de resistencia. La coordinación entre los espacios asamblearios de docentes, estudiantes y vecinos puede ser un espacio de referencia para que más se sumen a esta pelea y reforzar la lucha, así como tener más fuerza para lograr coordinar con los centros y sindicatos que dirige el peronismo, en perspectiva de organizar planes de lucha desde abajo, en asambleas y otras instancias de participación desde abajo, hasta derrotar los planes de Milei.