Sánchez, junto a otros mandatarios europeos y aliados se han reunido con Zelenski este lunes en Kiev. En un momento de crisis del bando otanista ante las negociaciones de Trump y Putin, la UE y el Gobierno del PSOE y Sumar refuerzan compromiso con el rearme imperialista y el envío de armas a Ucrania.
Jaime Castán @JaimeCastanCRT
Lunes 24 de febrero
Imagen de La Moncloa.
Este lunes se ha producido la cumbre en Kiev de Zelenski con los principales líderes internacionales que lo apoyan, fundamentalmente de la Unión Europea, y coincidiendo con el tercer aniversario de la guerra en Ucrania tras la invasión reaccionaria de Putin. Pedro Sánchez, como presidente del Gobierno español, ha acudido junto a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el presidente del Consejo Europeo, António Costa; los principales jefes de Gobierno de los países bálticos y nórdicos; y junto al jefe de Estado canadiense, Justin Trudeau. Además, han intervenido a través de videoconferencias o vídeos grabados el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan; el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba; el primer ministro británico, Keir Starmer; y el secretario general de la OTAN, Mark Rutte.
La cumbre se da a pocas semanas de la crisis en el bando otanista generada por Trump y el giro de la política estadounidense en Ucrania, poniendo en cuestión el apoyo de Washington a Zelenski, al que llamó “dictador” por no realizar elecciones y al que trataría de imponerle una paz a costa de concesiones territoriales a Putin. Una expresión más de la crisis de la hegemonía estadounidense y del cambio de rumbo que está dando Trump hacia un imperialismo de corte más nacionalista y hacia el clásico control de “esferas de influencia”, frente a la pretensión de liderar un orden mundial.
Te puede interesar: Giro de Estados Unidos en Ucrania: de la guerra proxy al reparto del botín
Te puede interesar: Giro de Estados Unidos en Ucrania: de la guerra proxy al reparto del botín
Zelenski se encuentra en una situación muy frágil, con el apoyo del imperialismo estadounidense en cuestión, su principal valedor, y exigiendo mayor compromiso a una Unión Europea todavía por definir su hoja de ruta. Sin embargo, la delegación liderada por Von der Leyen y Costa ha manifestado su apoyo incondicional al mandatario de extrema derecha ucraniano, anunciando un paquete de ayudas de 3.500 millones de euros del fondo europeo de 50.000 millones aprobado en marzo de 2024.
El envío de tropas y mayores “garantías de seguridad” para Ucrania, en un escenario diplomático de incertidumbre y de una hipotética paz, ha sido uno de los temas tratados por los dirigentes políticos presentes en la cumbre. Así se ha expresado el primer ministro británico, Keir Starme; como el presidente de Finlandia, Alexander Stubb.
“No habrá una paz justa sin Ucrania y sin la UE”, decía Costa, en relación a las intenciones de Trump de negociar con Putin e imponer una paz rápida y en sus términos. Los mandatarios europeos siguen recurriendo a la retórica vacía de la “democracia” para defender su apoyo a Zelenski y el rearme militarista, mientras Trump ya está pensando en repartirse el botín con Moscú. En este sentido, la victoria en Alemania este fin de semana de los conservadores y la continuidad del “extremo centro” en un Estado europeo central, da un respiro a las tensiones internas del imperialismo europeo que se podrían haber agravado con un gobierno de la extrema derecha de Alternativa por Alemania (AfD), la candidatura apoyada por el trumpismo, como señaló públicamente el vicepresidente estadounidense J. Vance en la Conferencia de Seguridad de Múnich.
En este marco de crisis y tensiones geopolíticas el imperialismo europeo va a tratar de reforzar su posición ante el cambio de agenda estadounidense por la elección de Trump, que también ha afectado los intereses de Canadá o Turquía, aliados de la UE —Trudeau y Erdogan han estado presentes en la cumbre como decíamos— y a los que se ha referido el primer ministro noruego, Jonas Gahr Store, llamado a un mayor acercamiento y compromisos con estos Estados por parte de la UE.
El Gobierno del PSOE y Sumar comprometido hasta el final con el imperialismo europeo
Pedro Sánchez ha aprovechado la cumbre para reforzar su compromiso militarista, declarando que el Estado español “aportará más ayuda militar y con más determinación”, y que la posición de su Gobierno es que Ucrania debe alcanzar “una paz justa y duradera”.
Así ha anunciado un envío de armas a Ucrania por valor de 1.000 millones de euros este 2025, que se suman a los 1.000 millones acordados el pasado año. No olvidemos que el compromiso del Gobierno del PSOE y Sumar con la hoja de ruta del imperialismo europeo es tal que Sánchez y Zelenski firmaron en mayo del 2024 un acuerdo bilateral de defensa para Ucrania para los próximos diez años en función del cual se enmarcan estos envíos de armas.
Por su parte, el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, ha planteado también el envío de tropas, yendo incluso más allá, defendiendo “incluir la capacidad de tener fuerzas de despliegue rápido” como “embrión de un ejército europeo” como parte del aumento de las capacidades militares del bloque.
No deja lugar a dudas, por lo tanto, la posición del Gobierno del PSOE y Sumar, más armas y un imperialismo europeo con mayor capacidad y autonomía militar. Sánchez no ha querido quedarse atrás en este sentido con respecto al resto de líderes europeos y sus aliados.
