El expresidente y autor intelectual del crimen de Kosteki y Santillán apoyará a su amigo en el balotaje. Su esposa “Chiche” ya optó por Macri. No tan distintos.
Daniel Satur @saturnetroc
Miércoles 18 de noviembre de 2015
Foto: archivo web La Nación
Ayer a la tarde la producción de Radio El Mundo hizo una llamada a Brasil. Cuando el destinatario atendió, le avisaron al conductor que ya podía salir al aire con la entrevista pautada.
Después de un breve intercambio sobre el partido entre Colombia y Argentina por las eliminatorias, el periodista emblema de la derecha argentina le preguntó.
Hasta Feinmann se sorprendió con la respuesta de Duhalde. En parte por cómo el máximo responsable político de la Masacre de Avellaneda se mostró como parte del kirchnerismo (“las encuestan nos dan perdiendo”), y en parte porque en realidad lo hacía más cercano al voto opositor.
Sin salir de la sorpresa, Feinmann le recordó a Duhalde que hace más o menos un mes le había preguntado a su esposa, Hilda “Chiche” González de Duhalde, por quién iba a votar en el balotaje y ella respondió que lo haría por Macri.
Finalizada la entrevista, la noticia empezó a correr por todos los medios. Como si hubiera sido verdaderamente una sorpresa. Sin embargo el mismo Duhalde, antes de las elecciones del 25 de octubre, ya había manifestado que “Daniel Scioli es inclasificable como dirigente político, es distinto a todos. Yo soy amigo de él”.
En una entrevista a una radio de Mendoza realizada el 8 de octubre, el expresidente planteó que él no ve grandes diferencias entre los candidatos y confesó que a todos los considera posibles aliados frente a los tiempos de ajuste que se vienen. “Hace un par de años yo estaba convencido de que había que juntarse y que no le venía mal al país un cambio y que debíamos ir a un cogobierno”, dijo Duhalde. Y agregó que “hablé con todos pero hubo mucha soberbia (…) Los metí a todos, inclusive a Daniel, Macri, Massa y al radicalismo. Porque vamos a necesitar un gobierno que tenga mayoría parlamentaria. La situación de Argentina, por razones internas y externas, es muy dificultosa. Vamos a tener tiempos difíciles más adelante...”
Y como frutilla del postre, en esa misma entrevista sentenció que Scioli “es a la política lo que Francisco es a la religión. Le dan un cachetazo y pone la otra mejilla. No tiene rencores con nadie”.
Tantas alabanzas al candidato del Frente para la Victoria por parte de uno de los representantes más conspicuos de la derecha peronista pueden caerle mal a muchos votantes del kirchnerismo. Sin embargo no deberían extrañar. Vale recordar que Scioli conformó la fórmula presidencial con Néstor Kirchner en 2003 por sugerencia del propio Duhalde. En ese momento el santacruceño y el bonaerense pensaron que “robándole” a Menem la figura del exmotonauta lo debilitarían en la disputa por llegar a la Casa Rosada tras la debacle del 2001 y el interinato duhaldista.
Lo que debería preocupar a esos votantes “nac&pop” no es tanto que Duhalde apoye a su amigo Scioli, sino lo que el propio Duhalde anticipa hacia el futuro y cómo lo ve a Scioli como el presidente “que necesitamos”.
Si el impune autor intelectual de los asesinatos de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán afirma que “vamos a tener tiempos difíciles”, casi que está todo dicho.
Daniel Satur
Nació en La Plata en 1975. Trabajó en diferentes oficios (tornero, librero, técnico de TV por cable, tapicero y vendedor de varias cosas, desde planes de salud a pastelitos calientes). Estudió periodismo en la UNLP. Ejerce el violento oficio como editor y cronista de La Izquierda Diario. Milita hace más de dos décadas en el Partido de Trabajadores Socialistas (PTS).