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Red Internacional
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Entrevista. El Bolsón: “La solidaridad ante la catástrofe de los incendios es enorme”

Los incendios en la Patagonia están conmoviendo al país. Hablamos con Carla, psicóloga del Hospital de El Bolsón, quien trabaja en Salud Mental Comunitaria. La solidaridad desde abajo que emerge en la Comarca Andina ante las consecuencias de los incendios, es un mensaje que contrasta con el individualismo que propagan desde los gobiernos.

Miércoles 5 de febrero 10:50

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En la conversación Carla arranca diciéndonos que “en virtud de los incendios que bueno nos vienen asolando hace muchos años, pero estos particularmente tienen algo más complicado desde el 2021 hasta ahora, es decir, la particularidad de estos últimos incendios es el viento. En los incendios anteriores, eran incendios sin viento, entonces el fuego avanzaba más lento. Estos tienen como una cuestión de viento huracanado, de fuego huracanado, de tormenta de fuego, se les llama. Yo creo que tiene que ver con la deforestación, o eso es lo que dicen los entendidos, en relación al viento y bueno, el mayor calor que está haciendo también”.

“Otra cosa que cambió, es que los fuegos ahora son de interfase, porque la gente al irse a vivir más alejada de la ciudad, avanza sobre las montañas y los bosques, se va a vivir a lugares hermosos que a todos nos gustan, pero es donde empiezan los incendios y nos llevan por delante”, agrega.

Y finalizando esta primera parte de la charla comenta “De alguna manera eso se pone en juego, como que hay un montón de cuestiones en estas tragedias, en estas catástrofes, que son cuestiones poblacionales, como que el Estado no planifica lo urbano de ninguna manera, de que hay intereses inmobiliarios y otros intereses que, se agregan, cuando empieza un incendio, el horrible estado de los servicios públicos, en particular de los tendidos eléctricos, explotan los generadores y eso produce más incendios”.

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Carla nos cuenta que “desde el jueves (día que empezó el incendio) hasta ahora me la pasé abrazando gente, mi tarea como psicóloga de alguna manera en esta frase “que los incendios nos afectan a todos” se percibe, se siente, porque de alguna manera el que no pasó ya por un incendio, lo está pasando o la va a pasar, no solo en el sentido de perder una casa sino de pasar una situación de incendio forestal de peligro, digamos y de dolor frente a aquel lugar que habitas, que es un territorio de bosques, montañas y recursos naturales muy apreciado y preservado por nosotros bueno, verlo así desaparecer es muy traumático”.

Además “ante esta situación nos encontramos con un abandono importante del sistema de salud provincial y, municipal, pero bueno, salimos todos a laburar, a armar lo que se puede por suerte y eso es lo que me emociona la gente genera una red que ya estaba por supuesto y nos redobla la apuesta como que se sostienen hay un apoyo mutuo, muy importante en la misma desesperación, en la misma angustia, hacen lazos, y eso mismo genera un nivel de reparación importante, el sentirse que pasan todos juntos por esto y que se reparan todos juntos, eso está, eso se pone en juego, se ve en cada incendio”, agrega.

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Y concluye planteando que “la solidaridad ante la catastrofe de los incendios es enorme. Yo estoy en el sector sur viviendo del lado de Lago Puelo o sea, bastante alejado del foco del incendio, sin embargo vos caminas por las calles y ves en las puertas de las casas que estamos lavando ropa para los brigadistas, estamos haciendo tartas, estamos haciendo empanadas, barras de cereales, juntando mangueras, todo esto, se genera a través de las redes y a través de lo personalizado de los barrios todo el mundo se pone en función de ayudar de alguna manera más a la gente que sale a combatir el fuego. Y esto atraviesa también mi lugar de trabajo, ya que tuve que dar altas a pacientes que estaban internados, (nosotros hacemos internaciones cortas de 10, 15 días en situaciones de urgencia, de crisis) y hubo pacientes que saben arreglar motobombas, que saben que pueden ser útiles en el terreno. bueno, que te piden que les des el alta porque tienen algo para hacer. Que saben dónde sumarse, que le avisaron que lo van a buscar en un camión, que tiene una moto guadaña y que tienen que ir a hacer un cortafuego para que no avance sobre determinado barrio. Y bueno, lo peor que le puede pasar a una persona con padecimiento mental y es lo que le pasa en realidad, es quedar excluido de lo social, del lazo social en todos los sentidos, no solo por la pobreza, sino por la indiferencia, sin embargo en estos momentos pasa un segundo lugar, el padecimiento mental y esa persona se siente incluida en un padecimiento que les pasa a todos y tienen algo para hacer, para reparar entre todos”.

Antes de finalizar la charla, nos dice que “después viene la triste realidad de los brigadistas, o sea, todos los voluntarios, que están sumamente organizados, todas las organizaciones de combate al fuego, y después los del Plan Nacional del Fuego, los del SPLIF, los brigadistas que mandan parques nacionales, es una barbaridad que creo que lo sabemos todos, ¿no? Que están precarizados con contratos de a tres meses, que en enero no sabían si se los renovaban, ahora se los renovaron, y que encima pasan al Ministerio de Seguridad a cargo de Bullrich, que bueno, no sé, está en Disney, metafórica y literalmente. y lo cierto es que no hay, no hay desde la provincia, no hay nada, no hay platzul, no hay colirio, es un desastre en cuanto a recursos, o sea, nosotros no tenemos incluso muchas camionetas para ir, así que nos repartimos las pocas camionetas que hay en el hospital y vamos y damos a conocer dónde van a estar las postas, el enfermero va con lo que hay, con las gasas que hay, hay que llevar mucho antibiótico, porque los brigadistas se viven lastimando, ya pasaron 4, 5 días y se infectan, y ellos siguen y se queman, tienen los pies quemados, las manos quemadas, y bueno, y siguen, siguen ahí, nadie los va a bajar de ahí a menos que se quiebren. Bueno, nosotros sentimos también la obligación de estar ahí, la obligación y la necesidad de sentirse útil, de alguna manera de sentir que uno está que es parte de esta tragedia y tiene algo para dar”.

Se alargó la charla, Carla tiene que seguir con sus tareas, pero nos deja una última idea “Yo creo que acá hay muchos negocios que quedan después con las cenizas, digamos, desde el inmobiliario, pero bueno la cuestión de buscar causas son múltiples las causas están son la sequía, el viento y todas lo que le estamos haciendo a este planeta, que no tiene planeta B, y por eso los gobiernos no quieren hablar mucho de las causas y están buscando criminalizar a los pueblos originarios o algún perejil, para después, y en general pasa esto, queda todo sin poder demostrarse, como pasó en 2021 hubo dos o tres incendios grandes como el de Las Golondrinas donde se perdieron 400 casas, también eran “fuegos provocados por desconocidos” y finalmente los focos de incendio que se iniciaron fueron por los problemas del servicio eléctrico de Chubut”.