El gobernador del estado de Chihuahua, Javier Corral, cumple sus amenazas y reprime las manifestaciones. La bronca y las protestas continúan.
Viernes 6 de enero de 2017
Tras la serie de bloqueos y toma de casetas (cabinas de peajes) que se extendió a lo largo de Chihuahua desde el pasado lunes, Corral amenazó con usar la fuerza para quebrar dichas manifestaciones si estas no se efectuaban por la "vía civil y pacífica". Este jueves hizo efectiva su amenaza.
Alrededor de las ocho de la mañana, fuerzas de la policía estatal y federal presionaron a los manifestantes que se encontraban en las instalaciones de PEMEX en la capital del Estado para desalojar.
Más tarde, ocurrió lo mismo en la carretera a Delicias donde elementos policiacos obligaron a retirar el bloqueo que desde el lunes permitía el paso en general, deteniendo únicamente camiones de carga.
A las casetas de Cuauhtémoc y Camargo, que se encontraban tomadas para dejar el libre tránsito de los automovilistas sin pago de cuotas, también arribaron miembros de la policía estatal y federal.
Sin embargo, la población de la comunidad de Camargo, una pequeña ciudad al sur- este del Estado de alrededor de 50 mil habitantes, salió en defensa de la caseta manifestando su descontento en contra del alza de la gasolina y del actuar del gobierno estatal, logrando aglutinar alrededor de 1000 personas que impidieron que la caseta fuera ocupada por las fuerzas policiacas.
El bloqueo en la vía corta a Parral, de igual manera continúa bajo el control de los transportistas.
Luego de las declaraciones ofrecidas por el gobernador estatal Javier Corral, la mañana del miércoles, donde amenazó con usar las "fuerzas del orden" a su mando contra todas aquellas manifestaciones que afectaran ’el orden’, dirigentes de El Barzón y la Confederación Nacional de Transportistas (CONATRAM) declararon que no se daría marcha atrás con las manifestaciones.
Tras el desalojo, estos mismos dirigentes declararon que seguirán buscando la forma de manifestar el descontento, que no ha cesado al mantener los altos costos de la gasolina.
La administración de Javier Corral justifica su accionar en las pérdidas que ha significado la ausencia de cobros en las casetas y el cese a la recaudación de impuestos que significó la toma del Servicio de Administración Tributaria, los cuales hasta el miércoles se cuantificaba en 3 millones y 3.5 millones de pesos, respectivamente.
Lo que Corral pasa por alto es el hecho de que son las familias de los que hoy se manifiestan, las que ahora se enfrentan no sólo a los altos costos de combustible, sino al reciente anuncio del aumento en los costos del transporte público, que según el sistema de transporte pasará a ser de 10 pesos a partir del lunes 9 de enero. Esto, como una de las consecuencias inmediatas del aumento.
Sin embargo, Chihuahua es sólo un ejemplo más, distintos gobiernos estatales han reaccionado reprimiendo las manifestaciones de descontento que se han extendido a lo largo del país. Se ha visto el mismo accionar del gobierno en otros estados como Jalisco el pasado martes y el jueves en Monclova, Coahuila donde se habla de al menos 30 detenidos.
A pesar de esto, el descontento continúa y las convocatorias a acciones siguen expandiéndosecomo reguero de pólvora. Por lo pronto, algunas organizaciones y civiles de Ciudad Juárez han comenzado a convocar a una marcha este viernes 6 de enero a las 5 de la tarde en la megabandera del Chamizal.
Mariel Ochoa
Estudiante de la FCPyS