El Gobierno de Cambiemos impulsa la creación de un fuero migratorio y además ya tiene un listado con más de mil extranjeros.
Lunes 7 de enero de 2019 10:56
Luego de los anuncios que pretenden bajar la edad de imputabilidad a 15 años y la implementación de las pistolas Taser, el Gobierno lanza una medida que apunta contra los extranjeros que se encuentran en el país.
Cambiemos busca agilizar la expulsión de extranjeros que ingresaron de forma ilegal al país, para lo que creará un Fuero Migratorio y una unidad especial de búsqueda de delincuentes extranjeros. Ya a principios del año 2018 Macri buscó endurecer la Ley de Migraciones N° 25.871, planteaba la expulsión sumarísima de personas con proceso abierto, aún sin ser cosa juzgada e imponía restricciones para la entrada de inmigrantes que tuvieran causas en la justicia de su país de origen, tampoco importaba si ese proceso judicial hubiera emitido fallos condenatorios o no.
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Frente a la noticia que se dio a conocer este lunes, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, dijo que “ya hay un listado de personas. Es una primera parte de un programa más extenso que será enviado al Congreso. Pero esto (la deportación de 1.000 extranjeros) se va a hacer con la legislación existente”.
“El objetivo es que todo el que se radique en la Argentina lo haga para sentar su familia, sus bases, y no para venir a delinquir”. En ese sentido, advirtió que “en el último tiempo, sobre todo en drogas, el aumento del delito en manos de extranjeros es importante, llegando al 20 % de detenidos. Esto se reproduce también en tema motochorros”, declaró en radio Mitre.
Estas declaraciones que nada tienen que envidiar a otras que han dado sectores del peronismo como el mismo Pichetto quien arremetió contra los inmigrantes la última semana de diciembre, a quienes denigró no solo por su nacionalidad, sino también por habitar en villas y asentamientos; son disparadores para seguir estigmatizando y criminalizando a la pobreza. Al Gobierno de Cambiemos le molesta la gente pobre, persiguen a los inmigrantes, los estigmatiza pero no les estorban los nombres como Lewis o Benetton.
Las condiciones de vida de los barrios populares son paupérrimas, en mucho de los cuales viven los inmigrantes, quienes trabajan a destajo y en condiciones precarias. Son las consecuencias de la falta de inversión en infraestructura de Gobiernos anteriores y del brutal ajuste que impuso el gobierno de Cambiemos en connivencia de la oposición, ambos buscan que la crisis la pague el pueblo pobre y trabajador.