SITUACIÓN EN PERÚ. El presidente interno de Perú se niega a iniciar un proceso de cambio constitucional

En una entrevista otorgada este jueves, Francisco Sagasti, presidente interino de Perú, se refirió a la crisis política, económica, social y sanitaria que tuvo como resolución parlamentaria momentánea su propia asunción al cargo luego de días de incertidumbre y mucho movimiento.

Tras las protestas que impusieron como principal demanda la caída de la Constitución y el régimen político fujimorista que está respaldado por la carta magna de 1993, hay líderes políticos que comienzan a desentenderse, sumados a los que siempre resisten los cambios profundos requeridos por el pueblo trabajador.

”Creo que después de un periodo tan turbulento, tan cargado de protestas, de incluso algo de violencia, lo más importante en este momento es devolverle la calma, devolver la tranquilidad a la ciudadanía”, expresó el también miembro del Partido Morado desde el Palacio de Gobierno.

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Ante esta situación Sagasti expresó que una nueva Constitución no es urgente, y no sería tarea de su gobierno iniciar un proceso de cambio constitucional, por lo que se dedicará a administrar el Ejecutivo.

”Creemos que es una tarea que el próximo gobierno libremente elegido por la ciudadana tome la decisión o no, de plantear la reforma de la constitución o una nueva constitución”, dijo Sagasti, poniendo en suspenso y en evidente contradicción con las masas populares que sacaron a Manuel Merino del gobierno, convocándolas a esperar a que asuma un nuevo presidente recién en julio de 2021.

No es de extrañar la postura vacilante de quien ejerce el interinato, pues la postura inicial de su organización política durante los días de gran presión social siempre estuvo por la vuelta al poder de Martín Vizcarra, a pesar de tener sólidas acusaciones de corrupción a sus espaldas.

Ante este intento de desvío a la movilización social contra los sectores de vanguardia que exigen una Asamblea Constituyente libre y soberana (tal como sucedió en Chile con la firma del vergonzoso acuerdo desde el Frente Amplio a la derecha y luego respaldado en los hechos por el Partido Comunista) la principal central sindical peruana, la CGTP ha mantenido en una pasividad inconcebible ante la emergencia que suscita una salida de fondo a la crisis que este año en su frente sanitario ha dejado casi un millón de contagiados y más de 35 mil muertos, y en su frente económico a millones de desempleados.

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Quienes están tanto en acción como en omisión y en defensa del régimen no tienen un interés particular en la defensa de los jefes de Estado, que han demostrado una y otra vez su inutilidad, sino que de frentón se han convertido en el sostén del sistema de opresión y explotación al pueblo trabajador, mujeres y la juventud de Perú.

En el esfuerzo para acabar con este sistema, están nuestrxs compañerxs de la Corriente Socialista de las y los Trabajadores, promotores además de La Izquierda Diario Perú, que construyen una alternativa anticapitalista, socialista y revolucionaria que saque al pueblo de la crisis que la han llevado los grandes empresarios y la casta política que se resisten por la fuerza a dejar el poder.