Sábado 1ro de noviembre de 2014
Mientras los trabajadores de la Secretaría de Agricultura Familiar, nucleados en ATE, recorrimos miles de kilómetros de distintos puntos del país hasta la Capital Federal, y así hacernos escuchar en el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, lugar donde manda la Mesa de Enlace, Monsanto y las grandes corporaciones y empresarios vinculados al agro argentino; Carlos Casamiquela, ministro de la cartera, viajaba miles de kilómetros, junto a otros funcionarios, como Ramiro Fresneda de la Secretaría de Agricultura Familiar, para participar del Congreso llamado "Diálogo sobre Agricultura Familiar" en Roma, Italia. Allí en jornada organizada por la FAO, el ministro ratificó en la agenda internacional "su compromiso con el fortalecimiento de la Agricultura Familiar y la valoración de sus productores como agentes centrales del abastecimiento del mercado externo e interno", y Fresneda afirmaba “perder la tierra es perder la identidad, y en un estado de derecho ya sea en la Argentina, en Latinoamérica y en el mundo, no podemos permitirlo”.
Estas declaraciones podrían haber endulzado los oídos de algún funcionario de de los más de 100 países presentes en dicho evento, pero no de quienes trabajamos de manera cotidiana hace más de 15 años, con los campesinos, pueblos originarios y pequeños productores, en la hoy llamada Secretaría de Agricultura Familiar, cuyo secretario es Emilio Pérsico. Somos quienes presenciamos como el Plan Estratégico Agroalimentario, definido por el gobierno nacional, promueve, principalmente, el monocultivo de la soja y expande la frontera agropecuaria expulsado al sector de la Agricultura Familiar que dice promover y mantiene, como dice la bandera que expandimos en el corte realizado el miércoles pasado en el Ministerio de Agricultura el "100 % de los trabajadores precarizados".
Luciano delegado de ATE-SAF La Pampa comenta para ID "nos concentramos en la puerta del Ministerio de Agricultura y cortamos la avenida Paseo Colón. Si se puede sintetizar el reclamo de hoy sería ponerle un No, un Basta, poner un freno a las condiciones de precariedad laboral, no sólo a cuestiones de contratación y salariales sino a las condiciones en las cuales los trabajadores de este organismo desarrollamos nuestro trabajo. Sin las herramientas, sin los instrumentos mínimos para desarrollarlo adecuadamente. Queremos ponerle un freno al discurso que se enarbola en defensa de la Agricultura Familiar, pero que en los hechos, el organismo que trabaja con el sector, los 1200 trabajadores nos encontramos en condiciones de precariedad laboral".
Raúl, delegado de la SAF- Misiones menciona: "desde el 2007, más o menos, nos venimos organizando desde ATE, por la estabilidad laboral de todos los trabajadores como un aspecto principal, pero también por mayor presupuesto para la Agricultura Familiar. Misiones es una provincia con una gran presencia de campesinos y población rural con esas características, que permanentemente se enfrentan con los agro negocios, con el empresariado forestal y turístico. También, estamos aquí para garantizar el cobro de nuestros compañeros (son 150), que por realizar la misma tarea cobran menos que otros compañeros, y el pase a Ley Marco de compañeros que siguen facturando como monotributistas, después la planta permanente de todos los trabajadores en este estado que sigue legitimando el trabajo en negro".
¿Te parece compatible que por un lado que los funcionarios del Ministerio impulsen el agro negocio y que por el otro apoye la agricultura familiar? Raúl afirma: "en el sistema capitalista no es compatible un modelo de desarrollo capitalista que expulsa a obreros, campesinos, indígenas de su territorio, explota gente a diario, mata a gente a diario. En Misiones mueren personas a raíz del modelo productivo. Los trabajadores precarizados trabajan en el campo forestal aplicando plaguicidas sin equipamiento de seguridad y campesinos expulsados de sus tierras que están en permanente disputa. Es imposible que se genere justicia con este modelo productivo y con este sistema".
Basta de Violecia Laboral
Los trabajadores de la repartición también venimos denunciando situaciones de violencia y persecución de quienes cuestionamos el funcionamiento de la repartición y quienes nos organizamos gremialmente. Claudia, trabajadora de la SAF comenta "en Salta hay violencia laboral porque existe el abuso de poder de manera sistemática y dirigida hacia compañeros con la finalidad de excluirlos y/o someterlos. Como resultado tenemos compañeros que han renunciado, con lo que implica la pérdida de la fuente laboral, otros han solicitado pase a otra provincias, a otras delegaciones, con el desarraigo que implica en algunos casos. Hay que resaltar que en estas situaciones en donde al compañero "no le queda otra" que pedir pase o renunciar se están violando doblemente sus derechos. Por un lado el/la compañero no puede conservar su lugar de trabajo, o directamente pierde su fuente laboral, y por otro siempre termina siendo el/la trabajador el que pierde, mientras los funcionarios que ejercen esta violencia siguen impunes sin ningún castigo. Por eso dijimos BASTA. En el camino aprendimos que muchas cosas no funcionan como deberían, ya que, si bien está la posibilidad de denunciar y que se abra un expediente, esto no garantiza de manera inmediata protección para la compañera que sufre la violencia, como tampoco garantiza la prevención a futuro.
Lamentablemente tenemos que salir a exigir una y otra vez sino nuestros derechos se ven violentados una y otra vez. Vamos a seguir denunciando esta situación y organizándonos dentro de nuestra organización gremial para acabar con la misma. La precariedad laboral es violencia, es la primera violencia y desencadenante de los otros tipos de violencia que sufren los trabajadores.