El precandidato radical aprovechó su paso por A Dos Voces para atacar el derecho elemental a la protesta. No sorprende de los radicales, que en estos momentos impulsan una reforma antidemocrática en Jujuy, donde gobiernan, contra el derecho al voto y la protesta social.
Jueves 1ro de junio de 2023 20:28
Durante la noche de este miércoles el principal referente del radicalismo en la Ciudad de Buenos Aires, que busca competir contra Jorge Macri por la candidatura de Juntos por el Cambio a Jefe de Gobierno, aprovechó su paso por TN para atacar el derecho a la protesta social.
En su intervención planteó: “Hay otros distritos, otras provincias, Mendoza tiene un código de convivencia nuevo, donde hay que pedir autorización, y cuando se excede el tipo de protesta que se autorizó, lo que hace es ir patrimonialmente contra los responsables de la protesta y el exceso”.
En plena campaña electoral, Lousteau se sube al caballo del ataque a un derecho elemental como el de la protesta social. Mientras posa de republicano, el radicalismo quiere que para manifestarse haya que pedirle permiso al propio gobierno contra el que eventualmente se protesta. Una verdadera provocación. Pero no sorprende, las palabras de Lousteau, además de subirse al carro derechista de la campaña, van a tono con la línea de Gerardo Morales en Jujuy, donde luego de años de mano duro y persecusión, buscan hacer votar una reforma constitucional que busca profundizar todavía más el ataque al derecho a la protesta, así como limitar el derecho al voto. Dudoso republicanismo del que dicen ser abanderados.
El dirigente radical agregó en el mismo sentido: “Pero además la Ciudad de Buenos Aires tiene un anillo digital, que ustedes saben que para transportar gente a una protesta, hacen falta medios de transporte. Muchos de esos medios de transporte operan comercialmente en la Ciudad de Buenos Aires. Entonces si cuando hay una protesta los que se excede es el codigo de convivencia, cualquiera que haya contribuido al exceso de ese código tiene que recibir una penalidad, en este caso no operar en la Ciudad de Buenos Aires. Yo lo que creo es que eso disminuye la cantidad de gente y podemos tener la validación constitucional del derecho a protestar de una manera que sea compatible con aquellos que todos los días queremos ir a trabajar y muchas veces nos vemos impedidos de hacer eso.”
Como ya es habitual, aprovechan la campaña para profundizar sus campañas en favor de la mano dura. No es casual, en plena crisis y con una profunda crisis política que agita al conjunto del régimen político, cualquiera que asuma se prepara para seguir profundizando el ajuste ante un descontento social que crece. Quieren impedir la expresión social y en las calles de ese profundo descontento.