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Red Internacional
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PRO. En plena crisis de Juntos, Larreta también llamó a no votar ni por Massa ni por Milei

Mientras todos los sectores de Juntos se posicionan luego del anuncio de Bullrich y Macri de acompañar a Milei en el próximo balotaje, lo que desató una crisis profunda en esta alianza, el Jefe de Gobierno porteño buscó posicionarse a la cabeza de los sectores críticos de esta decisión, al igual que la amplia mayoría de la UCR. Se reacomodan dentro de la alianza derechista pero todos coinciden en sus intenciones de profundizar el ajuste sobre las grandes mayorías.

Diego Iung

Diego Iung @IungDiego

Miércoles 25 de octubre de 2023 19:54

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Horacio Rodríguez Larreta, Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hasta el próximo 10 de diciembre, se pronunció en la tarde de este miércoles acerca de la profunda crisis que atraviesa a Juntos por el Cambio y apunta a terminar en ruptura de este espacio político.

En esa sintonía, Larreta se diferenció de quien ganara la interna de Juntos por el Cambio y afirmó "Las dos opciones son muy malas para todos los argentinos", en referencia a Javier Milei y Sergio Massa, que se enfrentarán en el próximo balotaje del 10 de diciembre.

A lo largo de la conferencia de prensa, quién era presentado hasta hace pocos días atrás como el eventual jefe de gabinete de un gobierno de Patricia Bullrich, repudió la decisión tomada por esta y el ex presidente Mauricio Macri de concretar una alianza con Javier Milei que, según planteó, fue tomada a sus espaldas.

Larreta, a quién Milei denomina como un "colectivista", se pronunció sobre el libertario: "Milei está en los bordes de la democracia. Las ideas son malas, peligrosas. Y agravadas por las formas. Construyó su carrera en base a la agresión y no es lo que la Argentina necesita". Agregó además "No creo en nada de lo que propone. No creo en la venta libre de armas, de órganos, no creo en la dolarización sin dólares que nos va a dar más inflación y más pobreza. No creo en la educación de los vouchers, no creo en los ataques a la prensa, al Vaticano, a la iglesia católica".

Por su parte, aseguró que tampoco piensa en apoyar a Massa ni formar parte de un eventual gobierno del candidato peronista: "Massa es la reelección del populismo kirchnerista, la reelección del desastre de este gobierno, de seguir con la hiperinflación y sigue dándole a la maquinita y regalando pesos. Es darle la educación a los sindicalistas, a los Baradel, a cerrar escuelas, a los que adoctrinan políticamente".

En momentos en que la coalición que fue gobierno entre 2015 y 2019 de la mano de Mauricio Macri como presidente se encuentra prácticamente estallada, con una mayoría del radicalismo y la Coalición Cívica planteando que "Juntos por el Cambio no se rompió, Macri y Bullrich se fueron" y a la espera de que los gobernadores del espacio se pronuncien en sentido similar, las declaraciones de Larreta parecen formar parte de un intento del Jefe de Gobierno porteño por ubicarse a la cabeza de un eventual armado opositor con los restos que se mantengan por fuera de las fuerzas que siguen en carrera por la presidencia. En esa sintonía Larreta se mostró muy duro con Macri y Bullrich al tiempo que buscó mostrarse como garante de la unidad del espacio derechista. Miguel Angel Pichetto y Graciela Ocaña también se mostraron contrarios a integrar una alianza con el candidato de La Libertad Avanza.

Luego de jugar un rol central en la política argentina en los últimos años, tanto siendo gobierno como oposición, la alianza Juntos por el Cambio amenaza desintegrarse de forma explosiva, incluyendo la explosión del mismo PRO fundado por Mauricio Macri.

Así como Larreta se ubicó llamando a sectores del radicalismo y la Coalición Cívica, Massa llamó repetidas veces a estos mismos sectores a conformar un gobierno de unidad nacional. En el debate presidencial llegó incluso a apelar a sectores del liberalismo. Queda claro que un gobierno con estas fuerzas sería un gobierno de derecha, comprometido en avanzar con el ajuste y seguir pagando hasta el último centavo de la maldita deuda externa, en momentos en que la pobreza alcanza a más del 40 % de la población, lo que se profundizará al calor de la devaluación.