Música / Rock. Eruca Sativa: "Que nadie venda nuestro país ni privatice nuestra libertad"

Son las 21:00 hs y se escuchan los primeros aplausos, se va llenando el Movistar Arena, la gente está impaciente y el campo ya está lleno. Una tarima desde el escenario hasta el fondo, dónde nos espera otro pequeño escenario… van a pasar muchas cosas en esta experiencia audiovisual a la que Eruca nos convoca, para vivir con todos los sentidos, lo que elles bautizaron “el show más grande de su carrera hasta hoy”. Una pasarela que no va a evitar ese pogo con hambre que sacia el corazón. Un sonido blanco que nos confunde, humo y aplausos para darle lugar a los dos primeros temas a pura emoción.

En pantallas negras vemos la primera de muchas frases que a lo largo de la noche nos invitaran a reflexionar, "Que nadie venda nuestro país ni privatice nuestra libertad" dice Eruca.
“No puedo esperar, lo tengo que evitar, bajen los precios de la paz, suben la ilusión de un buen final”, dice la letra de Blanco del disco ES, aunque ésta noche Lula nos canta "suben los precios de absolutamente todo", es un show en un contexto sociopolítico en el que la banda no mira para otro lado y canta las 40, siguen “el genio de la nada” y “sola en los bares” de Hilda Lizarazu (tema que incluyeron en su disco Dopelganga, con ocho covers al estilo Eruca, reversionados bien rockeros). Vuelve a la pantalla una frase “en una sociedad que nos educa para la vergüenza, el orgullo es una respuesta política” -decía Carlos Jauregui- y se respira orgullo en Villa Crespo.
Un solo de bajo de Brenda Martin en el medio de la pasarela del estadio para darle paso a “Nada salvaje”, una lista que arranca muy arriba, y sigue con el calor de un pogo que se hace sentir con “Abrepuertas”.

Nos hacen pasar del agite extremo, al abrazo, y al llanto, paseamos por todos los estados y hay para todos los gustos, clásicos de sus comienzos, presentación de temas nuevos como “eso no es amor”, y covers.

 Julio Cortázar- decía "No te regalan un reloj, tu eres el regalado", y esa frase se sumaba a la selección de audiovisuales para acompañar los temas que regalaron a los seguidores más antiguos, “marca tus marcas” nos hizo felices.

Después de un bloque de temas para recuperar el aliento, el power trío oriundo de Córdoba, se traslada al “escenario b” al fondo del estadio, en un estilo electro-acústico y más intimo, bien cerca de la gente, para interpretar un set combativo, y todo el movistar grita “Memoria, verdad y justicia” junto con Lula, al terminar “para que sigamos siendo”, porque somos el fuego que no pueden apagar, y porque todo es “por quienes vendrán”.

Suena una improvisación de armónica desde el escenario principal, que los llama a reunirse con Franco Luciani, único invitado que le dio un color distinto al clásico “amor ausente”, coreado y sentido por todo el lugar.

Vuelve a sentirse el calor del agite “Ya lo dijo un sabio respetado, Dios va a de la mano con el patriarcado, separen la iglesia del estado sepárenla ya y asunto terminado, no mas fanatismo no machismo…”, es parte del la letra del poderoso “Tarará” tema que hace un tiempo Eruca modificó en sus recitales en vivo, donde siempre se siente el coro de las pibas, y te abrazas para cantarla con compañeras desconocidas, que sienten en las letras de la banda , que no estás sola. Entre frases, cantos y pogo, vemos a Brenda arengando a la gente con puño en alto al grito de “Docente luchando también está educando” (que se escuchó tan fuerte como los coros de “armas gemelas” o “magoo”) Gabi con su sólo de batería mágica y sonrisa sin fin, y una Lula emocionada que nos dijo que "las canciones nos unen, y unidos somos más fuertes”… como cantan en “creo”. Eruca Sativa despide el año y festeja así sus power 16, recordándonos que “cuidemos al que tenemos al lado" –Lula- , que así fue y así será porque seremos primavera.