La lucha de los trabajadores administrativos de la UPN-Unidad Ajusco abre la necesidad de analizar por qué los estudiantes debemos sumarnos a dar la pelea en defensa de sus derechos laborales. Porque, los estudiantes, docentes y trabajadores en unidad debemos defender la educación pública y gratuita sin precarización en nuestras escuelas.
Miércoles 26 de febrero de 2020
El pasado martes 18 de febrero tras un paro de doce horas, los trabajadores administrativos integrantes de la Delegación sindical III-47, comunicaron que dado el nulo interés de la Rectora Rosa María Torres de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) ante las problemáticas del sector administrativo de base y la violación a los derechos humanos y laborales, así como la falta de cumplimiento de los acuerdos pactados, estructuraron el siguiente pliego de demandas:
1. Programa de calidad y eficiencia en el trabajo (PROCAET): Dado que ya se recibió un pago por este concepto desde el año del 2018 junto con el compromiso de realizar el registro correspondiente ante las autoridades competentes y hasta la fecha no se han regularizado, exigimos que se pague el adeudo de tres semestres que tienen y se finiquite el proceso de registro referido.
2. Aplicación de la diferencia del incremento salarial del 2.03% y la creación del rango “D” (C+) al tabulador horizontal para el PAAE otorgado al Instituto Politécnico Nacional en julio y agosto de 2019, como institución homologada a la UPN.
3. Que se realicen los Dictámenes de Condiciones Insalubres, dado que se ha solicitado, en más de una ocasión, que se practiquen en las áreas que se representan un riesgo para la salud de los trabajadores de base, sin que hasta el día de hoy, ni la Secretaría Administrativa, ni la Rectoría, han tomado la responsabilidad de iniciar el proceso.
4. Alto al acoso laboral y desplazamiento del personal administrativo de base por parte de los directores de la Biblioteca y Apoyo Académico, Difusión y Extensión Universitaria y Unidad 098, atentando contra los derechos laborales y humanos de los trabajadores.
5. Atención oportuna a las prestaciones tales como la dotación de anteojos, vestuario, gratificaciones por jubilación y antigüedad para que sean cubiertos en tiempo y forma.
6. Respeto a las mesas de trabajo de las diferentes comisiones y subcomisiones por parte de la rectoría y sus colaboradores.
7. Publicación de la Convocatoria de la Promoción Horizontal 2020. La autoridad se comprometió a publicarla en la última semana de enero y no lo hicieron argumentando que la rectora la tenía en firma.
Responsabilizaron totalmente de las acciones emprendidas y las afectaciones a la vida universitaria de la UPN a Rosa María Torres Hernández, Rectora de esta institución, pronunciándose en “Movilización Activa Indefinida”, exigiendo la instalación inmediata de una mesa de negociación con carácter resolutivo.
Se convocan asambleas estudiantiles
El viernes 21 de febrero se convocó a una asamblea estudiantil para analizar la situación que enfrenta la Universidad y obtener información sobre los motivos de la toma de instalaciones. Sin embargo, dado la premura de la convocatoria, no se logró quórum que permitiera construir una postura colectiva, como se informó en distintos grupos de Facebook.
Cuestión que generó la convocatoria de las asambleas del día lunes 24 de febrero a las 10am (turno matutino) y a las 5pm (turno vespertino) en ambos espacios se expresó una gran preocupación del conjunto de los estudiantes sobre el motivo por el cuál luchaban las y los trabajadores y cómo poder apoyar pero también hubo posiciones de un pequeño sector que exigía volver a clases sin importar que fuera a costa de pasar por encima de las decisiones de los trabajadores de base que en sus organismos definieron está acción ante la negativa de la Rectora.
Así mismo se le señalo al Consejero Estudiantil que dado el proceso antidemocrático por el que reconocido no tenía mucha legitimidad y se le solicitaba que no se montara en las preocupaciones y demandas de la comunidad para construir su agenda.
Una vez que se escuchó en ambas asambleas a las y los trabajadores que se presentaron para explicar su pliego petitorio y resolver inquietudes de la comunidad estudiantil se ratificó la propuesta de poder generar un espacio con mayor participación de los estudiantes de la Unidad-Ajusco. Por lo que se convocó a asamblea para este miércoles a las 3pm afuera de las instalaciones en el jardín conocido como el “triángulo”.
Unidad para que se resuelva el conflicto
Es preocupante que la Rectora Rosa María Torres prefiriera mantenerse en Monterrey en la reunión nacional de directores de la UPN, que se realiza anualmente, sin todo el quórum necesario para sesionar dada la situación de la Unidad-Ajusco, en vez de tomar medidas para resolver las demandas de la delegación sindical III-47.
Los comunicados que emite la autoridad en páginas oficiales tienen como objetivo difundir incertidumbre, miedo y provocación para que seamos los estudiantes quiénes pidamos clases reventando una lucha legítima de trabajadores que sostienen día a día nuestra universidad con su labor sin importar las condiciones y golpes a sus derechos.
Y es que nos quieren dejar la lección de que no vale la pena luchar pero hoy en distintas luchas justamente los profesores y trabajadores demuestran que pese a todas las campañas de desprestigio, maltratos, acoso laboral y la división que realiza la autoridad, vale la pena pelear por un trabajo digno y demandas principalmente sociales.
Las nuevas generaciones bajo el neoliberalismo estamos marcadas por el trabajo precario, la subcontratación (outsourcing) plazas eventuales y hay pocas posibilidades que podamos obtener en su mayoría plazas de base, adquiriendo derechos que se han ganado con lucha, cuestión que es diferente a los privilegios que gozan quiénes viven o se benefician del trabajo precario pero si ganan las luchas de las y los trabajadores se marcan precedentes para que tengamos mejores condiciones como futuros trabajadores de la educación.
Sumado a que en nuestra unidad también la crisis presupuestaria nos afecta directamente por lo que es necesario consolidar espacios de discusión por carrera y generales que nos permitan encontrarnos para avanzar en poner en pie un gran movimiento estudiantil que se apueste a pelear por nuestras demandas y a democratizar nuestra universidad. Sin dejar de lado las demandas que enfrentamos las mujeres (estudiantes, docentes y trabajadoras) en una población mayoritariamente femenina.
Por ello la única respuesta favorable para que podamos volver a clases vendrá de la unidad entre estudiantes, docentes y trabajadores de base para exigir que se resuelvan las demandas inmediatas del pliego petitorio de los trabajadores de base.
No podemos permitir que la autoridad para abrir las instalaciones mañosamente firme acuerdos con las y los trabajadores para luego ignorarlos o violarlos, debemos exigir un compromiso de la rectora Rosa María Torres, quién desde su llegada prometió un cambio basado en escuchar, dialogar y disposición de resolver las necesidades de la comunidad, cuestión que jamás ni en el discurso plantearon las rectorías priistas anteriores.
Asimismo, el llamado a construir la unidad debe venir de la delegación sindical III-47, es indispensable que convoque a que estudiantes y docentes fortalezcan su lucha pero que a su vez sean partícipes de las discusiones. De la mano de convocar a la unidad a todas las y los trabajadores que hoy luchan por trabajo digno pero también contra los recortes presupuestales impulsados por la austeridad republicana que afecta la educación pública y gratuita como es el caso de la asamblea de profesores de la UACM y la lucha de los estudiantes de la Escuela de Derecho Ponciano Arriaga o la lucha contra los despidos y el respeto a su contrato colectivo de las y los trabajadores de Notimex.