Estas últimas semanas Ricardo Yáñez, General de Carabineros, ha estado en el centro de la mesa debido al procesamiento por su responsabilidad en las violaciones a los derechos humanos cometidos por la institución durante la Rebelión, ya que era encargado de Orden y Seguridad públicos.
Viernes 12 de enero
Ante el comienzo del proceso, se supo que Gabriel Boric llamó privadamente a Yáñez para darle su apoyo, según se fue confirmando. Camila Vallejo ha dicho que esperarán a los resultados del juicio para ver qué hacer con Yáñez, porque su principal preocupación, como gobierno, es que la institución siga funcionando.
A su vez, se ha podido ver cómo la derecha de conjunto ha salido a respaldar a Yáñez, desde Republicanos hasta Amarillos por Chile y Demócratas, incluso llegando a visitarlo y publicar imágenes junto a él para mostrar apoyo. Y cuestionan el juicio en desarrollo porque acusan que hay “persecución política”, mientras que lo fundamental para ellos es lavarle la imagen a la cuestionada -con mucha evidencia- institución.
En el negacionismo de la derecha no me detendré porque ha sido su histórico actuar, defendiendo siempre a los represores en contra del pueblo que sale a manifestarse. Pero es importante recalcar la posición que ha tomado el gobierno, no porque sea novedosa, sino porque han salido a respaldar a su “carabinero favorito”, mientras durante el 2019 y hasta que Boric salió electo, se mostraban críticos e incluso radicales contra Carabineros por los crímenes cometidos durante la Rebelión Popular. Nadie puede negar los ojos mutilados, los “apremios ilegítimos” alias tortura que se denunciaron en el momento y que aún hoy tiene causas en desarrollo, etc.
Y es que Boric, Vallejo, y todo el gobierno han decidido ser los defensores de Carabineros, y no solo eso, sino que también, como han salido a jactarse por redes sociales, ser el gobierno que más apoyo económico le ha dado a la institución. Tan escandaloso es esto sabiendo los múltiples casos de fraude al Estado en beneficio de altos mandos de la institución. Le dan recursos con el argumento de modernización, pero esta era la promesa de campaña de Kast, para está claro que para defender a Carabineros “izquierda y derecha jamás serán vencidas”.
Hacer vista gorda al reclamo de las familias de las víctimas, que se movilizaron el martes fuera de la oficina de Yáñez exigiendo su renuncia, es de una falta de humanidad terrible, porque estamos hablando justamente de enjuiciar a uno de los responsables políticos de las violaciones a los derechos humanos, cometidos hace tan solo 5 años.
El Partido Comunista, como siempre, está jugando a dos bandos en el caso. Ya que vemos la conducta del PC desde el gobierno, totalmente alineada con la ex Concertación, y por otro lado vemos a la senadora Claudia Pascual, al diputado Boris Becerra y a la diputada Karol Cariola firmando una carta exigiendo la renuncia junto a organizaciones de DDHH y de víctimas de la rebelión (junto a otros organismos). Puedes revisarla acá.
La izquierda, la que tiene que representar a la clase trabajadora y a los sectores populares, a las víctimas de violaciones a los DDHH (como el pueblo mapuche), a los jóvenes trabajadores y estudiantes, no puede tener “medias tintas”, no puede respaldar o esperar a que la justicia dictamine algo para tomar medidas con un alto mando de la represión contra la rebelión popular, mientras intenta mostrarse del lado de las víctimas de la manera más cínica.
Yuri Peña
Licenciado en Historia. Estudiante de pedagogía en la U de Chile. Militante de VENCER y del Partido de Trabajadores Revolucionarios