La mayoría de los trabajadores eran oriundos de la provincia de Salta. El empresario responsable está detenido.
Jueves 5 de diciembre 13:15
Otro ejemplo de que la famosa “inversión privada” se garantiza básicamente en base a la explotación de la clase trabajadora. El escándalo se desató frente a Nordelta, la lujosa zona del norte del conurbano bonaerense donde se encuentran algunos de los barrios privados más caros del país.
Un empresario quedó detenido luego de que se descubriera que construía un lujoso complejo con trabajadores que se encontraban en condiciones infrahumanas, casi en situación de trata de personas.
En el allanamiento que se llevó a cabo se encontró a 24 trabajadores de la construcción en condiciones de trata de personas con fines de explotación laboral. Esto ocurrió en el complejo inmobiliario Delta Center, frente al country en cuestión.
Los trabajadores vivían hacinados, con pésimas condiciones de seguridad e higiene. Además, se pudo constatar que hacían jornadas laborales de cerca de 14 horas, de lunes a sábados. El salario, lógicamente, era una miseria. Dado que no estaban registrados, los trabajadores sufrían restricciones para su propia movilidad. Es decir, no podían manejarse libremente.
Más allá de este hecho particular, los trabajadores de la construcción sufren condiciones laborales pésimas en general, además de cobrar salarios bajísimos. La conducción de la Uocra nacional está en manos de Gerardo Martínez hace casi cuatro décadas. Esa burocracia ha garantizado esta situación. Martínez, oficialista de todos los gobiernos, fue, además, parte del Batallón 601 de espías durante la dictadura. Es decir, un agente de inteligencia de los genocidas.