BASTA DE DOCTRINA CHOCOBAR. Gatillo fácil: velatorio y caravana por Matías Rodríguez

Fue un momento muy fuerte, muy duro. Los pibes junto a los docentes salieron de la escuela a recibir a la caravana. Un enorme aplauso por Matías se escuchaba fuertemente. “Se va a acabar / esa costumbre de matar”, se cantaba. En la puerta de la escuela también nos hicimos presentes distintas organizaciones para acompañar a la familia, a sus docentes, miembros de UTE Sindicato docente. Se llevó también el saludo y la solidaridad desde la comisión contra la violencia institucional que preside Myriam Bregman. Junto a Patricio del Corro presentaron en la legislatura una declaración de repudio para ser firmada por los legisladores de CABA.

Un nuevo caso de gatillo fácil, un nuevo capítulo en la doctrina Chocobar.

El miércoles 25 de abril, un policía que no estaba de servicio asesinó por la espalda a Matías Rodríguez de 16 años, en la zona de Plaza Virreyes. Matías fue trasladado al hospital Piñero donde fue atendido de urgencia, pero no logró sobrevivir. Cinco tiros recibieron de parte del policía, uno de ellos en la cabeza. Al momento no se sabe cuándo le entregarán el cuerpo a la familia, debido a que la causa cambió la carátula de “hurto” a “homicidio”, ya que no se encontraron armas de fuego que justifiquen un enfrentamiento.

Como afirma el comunicado de la Comunidad Educativa del EMEN 3 y organizaciones sociales del Bajo Flores, Matías no se encontraba armado y no disparó, como intenta instalar la versión policial. Fue asesinado por la espalda por un policía que justificó su asesinato por un presunto robo. Nos encontramos frente a un nuevo capítulo de la doctrina Chocobar; un hecho muy grave, donde otra vez un policía tiene como método disparar por la espalda a un joven.

Hasta el año pasado, Matías era estudiante del primer año de la secundaria en el EMEM 3 de 19 “Profesor Carlos Geniso”, un secundario del Bajo Flores que se fundó como un reclamo de los vecinos para que exista una escuela secundaria en el barrio. Matías iba al EMEM desde chiquito, al club de jóvenes que funciona los sábados en esa institución como forma de que los chicos no estén en la calle y tengan un plato caliente el fin de semana.

Las declaraciones políticas de miembros del Gobierno avalando estos métodos, como vimos en el caso del policía Chocobar, quien luego de haber matado por la espalda al joven Pablo Kukoc fuera recibido en Casa Rosada por Macri y Bullrich, ha dado un aval a las fuerzas de seguridad para cometer este tipo de hechos sabiendo que cuentan con la impunidad y el amparo político para hacerlo.

Acompañaremos las decisiones de su familia y su escuela en las acciones que se hagan para lograr Justicia por Matías. No podemos permitir que en este país se instale de hecho un aval político a la pena de muerte.