×
×
Red Internacional
lid bot

HISTORIA DEL FÚTBOL. Goleadores Argentinos (III)

En esta tercera entrega nos ocuparemos de Ricardo Infante, legendario goleador en Estudiantes de La Plata y Huracán; Oscar Mas, otro wing goleador; y el sorprendente Bernabé Ferreyra, que tiene un promedio de gol excepcional, nunca superado hasta ahora...

Lunes 15 de diciembre de 2014 00:59

1 / 3

Ricardo Infante

El séptimo goleador en esta lista es Ricardo Infante, nacido en La Plata en 1924. Según los que lo vieron, era buen definidor, y como se debía en esa época, tenía una técnica tan pulida que su juego era un espectáculo para la vista; además de gran anotador, preparaba jugadas para sus compañeros, como a muchos de aquellos años, le tocó una época dificilísima para trascender, en su puesto estaban Adolfo Pedernera, René Pontoni, Bravo, Ferraro, etc..

JPEG

Jugó 439 partidos y marcó 217 goles, con un 0,49 de promedio de gol, estos tantos los repartió entre Estudiantes de La Plata, Huracán y Gimnasia y Esgrima de La Plata.

En su carrera, supo ser arquero, varias veces ocupó la valla de sus equipos cuando el portero salía por lesión o expulsión (en aquella época no había arquero suplente), y parece que lo hacía bastante bien.

En Estudiantes es el segundo goleador de la historia del club; debutó el 1º de Noviembre de 1942 contra River. "El Beto", tal era su apodo, jugó en "Los Pincha Ratas" hasta 1953, para luego ser transferido a Huracán, tras la intervención política ocurrida en el equipo platense, (esto se explica en la nota anterior cuando hablamos de Manuel Pellegrina), en "El Globito" jugó 94 partidos (casi asistencia perfecta) y convirtió 31 goles; en el ocaso de su carrera fue a jugar a Gimnasia, en 1961, jugó solo 16 partidos y conquistó 6 goles.

En el torneo de 1948, le convirtió un gol de "Rabona" a Rosario Central desde ¡35 metros!!, pasando el balón por encima del arquero rival. Increíble.

En la Selección Nacional solo jugó 4 partidos, marcando 2 goles, uno a España, en 1952 y otro a Uruguay, el 30 de Abril de 1958 en el estadio de Huracán.
Estuvo en el plantel del mundial de 1958 pero no pudo jugar; los títulos logrados son: Copa Escobar 1944 y Copa de La República 1945, ambas con Estudiantes de La Plata.

Pinino Mas

JPEG

El que viene es el extraordinario Oscar "Pinino" Más, con sus 429 partidos jugados en Primera División tiene conquistados 215 goles (0,50 de promedio de gol), terrible para un wing izquierdo, sinónimo de River, en los de Núñez jugó de 1964 a 1977, 382 partidos, marcando 198 goles, tenía fuerza y decisión para desbordar, cuando lo lograba, sacaba un disparo seco hacia las mallas, en la Selección Nacional de los ’60 era número puesto.

Fue descubierto por Ernesto Duchini cuando jugaba en Central Porteño de Villa Ballester. En una prueba en Boca Juniors, hubo un penal, Más lo pateó y lo tiró afuera a propósito. "¿Como iba a hacer un gol para Boca?", dijo después. A los 17 años debutó en River (1964) contra Chacarita: los "Millonarios" ganaron 1 a 0 (Eladio Rojas) y la jugada del gol la hizo él.

En 1973 fue vendido al Real de Madrid, no rindió y al año estaba de nuevo en Núñez, justo para salir campeón 2 veces en 1975.

En 1977 se fue al América de Cali, (68 partidos, 38 goles), a la vuelta comenzó un largo peregrinar por una buena cantidad de equipos, 1979, Quilmes, (7 partidos, 3 goles, uno de ellos a River), 1982, Sarmiento de Junín, (18 partidos, 6 goles), 1982, Mariano Moreno de Junín, (14 partidos, 7 goles), 1985, Huracán Las Heras de Mendoza, (8 partidos, 1 gol).

Llegó al ascenso a los 33 años de edad, con una eficacia terrible, en Defensores de Belgrano, (1980/81), jugó 57 partidos y marcó 40 goles, y en El Porvenir, (1983/84), en 46 encuentros marcó 20 tantos. Pero eso no es todo, en 1986/87, con 40 abriles a cuestas, Oscar Más jugó 11 cotejos en Talleres de Remedios de Escalada y anotó 3 goles, logrando el ascenso a la Primera B. También jugó en Huracán de Trelew (Regional), Boca Juniors de Bariloche (Regional), Progreso de Juan José Paso (Regional), Everton/Argentinos Juniors de Cañada de Gómez (Regional), Sportivo Baradero (Regional), Boca Juniors de Coronel Suárez (Regional).

Volviendo a la Selección Nacional, jugó el Mundial de 1966. Con la celeste y blanca jugó 37 partidos y marcó 10 goles entre 1965 y 1972.

Pícaro, vivaz, un wing de los que ya no hay, el inacabable Oscar Más.

El gran Bernabé Ferreyra

JPEG

En el final de esta nota se encuentra el gran Bernabé Ferreyra, con un récord impresionante: en 198 partidos marcó 206 goles, (1,04 de promedio de gol), casi imposible igualar esa eficacia goleadora.

Lo apodaban "La Fiera" o "El Mortero de Rufino"; parece que sus disparos eran violentísimos, dicen que sus remates lograban alcanzar una velocidad de 200 km por hora. Desde su Rufino natal (jugaba en el Club Jorge Newbwry), llegó a Tigre a comienzos del profesionalismo. Jugó (a préstamo) en una gira para Huracán (8 partidos, 11 goles), luego para Vélez Sarsfield en una gira americana (Chile, Perú, Cuba, México y EEUU), Vélez percibió $10.000 pesos moneda nacional libre de gastos y los jugadores un viático diario de $250; contra un equipo peruano, Bernabé desmayó al arquero de un pelotazo y cuando pasó a visitarlo al hospital le pidió: "Si nos volvemos a enfrentar, avíseme antes de patear".

Pasó luego a River Plate por la tremenda cifra de $45.000, (la cifra más alta abonada hasta ese momento por el pase de un jugador en el fútbol mundial). Allí, el club de Núñez recibió el apodo de "Millonarios", que a partir de esta incorporación la institución comenzó a crecer, Ferreyra fue el factor exacto para la gran inscripción de socios de la entidad de la banda roja. Iban a la cancha "a ver al gran
Bernabé". Su presencia en River desató una locura colectiva. La entrada valía 1 peso y al tercer partido el club recuperó los 10.000 pesos que le dio de prima. Fue un fenómeno social de tal magnitud que cuando el equipo iba de gira por el interior, el precio del boleto variaba según jugara Bernabé o no.

En el River campeón de 1932, jugó 33 partidos y marcó 44 goles, vale decir que también fue máximo scorer de ese torneo. Pero el año antes, en Tigre, jugó 13 partidos, marcando 19 goles, en el primer partido con esta camiseta, en 1931, marcó 4 goles.

Fernando Bello, arquero de Independiente le atajó un penal el 15 de abril de 1934, pero por su potencia le quebró las 2 muñecas y el arquero se desmayó. También fue campeón con River en 1936 y 1937. En aquel tiempo el balón era de tiento y llevaba una cámara adentro, Bernabé la desinflaba y la colocaba dentro de otra, ponía estas 2 cámaras dentro del cuero, la cosía y esa pelota especial descansaba 48 horas antes del partido en un balde con agua. El día del partido el balón especial era una bomba.

Jamás usó protección en sus piernas y nunca se vendaba los tobillos. Otra anécdota, en 1933 un hombre trajeado le preguntó "¿Así que usted es ’La Fiera’"?, "No maestro, ’La Fiera’ es usted cuando canta", el hombre era Carlos Gardel.

Un dato curioso es que Ferreyra hizo ganar el clásico al equipo millonario en 1932 al hacer un gol metiendo la pelota en la red después de haber desmayado al arquero "Xeneize", de un pelotazo en el estómago.

Su peso era de 73 kilogramos y medía 1,72 metros. Actuó en cuatro películas, ("El Cañonero de Giles", "El Susto que Pérez se Llevó", "Hay que Casar a Ernesto" y "La Importancia de Ser Ladrón").

Fue mencionado en tangos, como "La Fiera" (“En el foot-ball nacional/ se destaca un jugador/ de lo más fenomenal/ por ser un gran goleador"); "El Sueño del Pibe" ("Dicen los muchachos/ del oeste Argentino/ que tengo más tiro/ que el gran Bernabé."). En su ciudad natal hay un club deportivo y una calle que llevan su nombre.

Junto a Valeriano López, y Arthur Friedenreich, son los únicos tres futbolistas de Latinoamérica que convirtieron mas tantos que partidos disputados.

Los títulos logrados: 1932 y 1937, torneo de 1º División de Argentina, Copa Competencia 1932, Copa Campeonato 1936, Copa de Oro 1936, Copa Ibarguren 1937, Copa Aldao 1936, Copa Aldao 1937, todos con River Plate; Copa América 1937 con la Selección Argentina.

En 1939 debió retirarse debido a que los reiterados golpes durante los partidos le provocaron múltiples desgarros.

Jugaba de Centrodelantero, ya que por entonces las camisetas no llevaban número, y se distinguía a los ágiles por su ubicación. Está catalogado por algunos expertos, como el mejor jugador de los años ’30.

Creo que con este último jugador huelgan las palabras: un verdadero fenómeno de nuestro fútbol, Bernabé Ferreyra.