27A. Hospital Larcade: en las calles coordinando las luchas está la fuerza para ganarle al municipio

El Encuentro de Coordinación de las luchas de AMBA en Madygraf (bajo control obrero) realizado el sábado pasado -con la presencia de decenas de sectores en lucha, más de 4000 trabajadores y trabajadoras conectados, y con la participación de agrupaciones como el Movimiento de Agrupaciones Clasistas (MAC), ANCLA, Corriente Sindical 18 de diciembre, y el saludo de PO e IS- votó una acción para éste martes 27 de abril. A las 8 am habrá con concentración en el Obelisco y luego continuará con movilización junto a movimientos sociales, el sindicalismo combativo y la juventud, al Consejo del Salario cuando se discuta el mínimo. Será con las medidas de cuidado necesarias, pero con la necesidad de seguir avanzando en la coordinación y exigir medidas de emergencia ante la crisis sanitaria y social.

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Ayer, mientras escribíamos esta nota, trabajadores del Hospital Larcade acompañaron la movilización de los trabajadores del Hospital de Trauma Dr. Federico Abete, en el partido de Malvinas Argentinas gobernado por Leonardo Nardini. Allí los residentes se organizaron como Autoconvocados y se movilizaron al palacio Municipal, por salarios igual a la canasta básica y por la salud pública, con el lema “así no hay ambo que aguante”, un grito más que se escucha en la salud pública contra los salarios de miseria y la precarización en todo el territorio nacional. Es que ante la desfinanciación, el recorte y la falta de medidas serias de los distintos gobiernos, la salud está al borde del colapso en todo el país con récord de contagios y muertes por coronavirus que se supera día a día. Coordinar y unir las luchas de los trabajadores de la salud, con el conjunto de la clase trabajadora que hoy padece las consecuencias de la crisis y el ajuste, es una tarea de primer orden para que no nos derroten y de esa manera poder avanzar en conquistar nuestras demandas.

Mientras la crisis se profundiza y avanza la segunda ola, los sindicatos siguen en tregua con el gobierno y se niegan a convocar un plan de lucha real para enfrentar el ajuste y la crisis, dividiendo las luchas y dejándolas aisladas. Por eso más que nunca resulta imprescindible unir y coordinar "desde abajo" aquello que el gobierno y la burocracia sindical dividen "por arriba". Sabemos que si derrotan una lucha, después vienen por el resto; pero que si una triunfa el resto estará en mejores condiciones.

Organicemos la fuerza "desde abajo" y digamos basta todos los trabajadores juntos

El Hospital Larcade viene siendo atacado y aislado semana tras semana. El municipio que conduce Jaime Méndez de Juntos por el Cambio, con despidos persecutorios, aprietes, causas y militarización nunca tuvo intenciones de dialogar más que atacar a los que reclaman un salario digno, el pase a planta y sostienen la salud pública. No puede esperarse nada de quienes no les tiembla el pulso para perseguir y despedir a los esenciales en plena segunda ola. Siempre que se le dio tiempo atacó el Hospital. Del mismo modo, no hay que perder de vista que el Ministerio de Trabajo, que intenta mostrarse como mediador entre los trabajadores y el municipio (patronal), durante la pandemia del 2020 ha dejado correr una ola de despidos (pese a la prohibición por DNU), llegando a las 4 millones de personas y ha actuado como una oficina de las patronales, manteniendo y favoreciendo a la perpetración del trabajo flexible y precario durante décadas.

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Es en base a esto que no se puede confiar en el Municipio ni tampoco en el Ministerio cuando está claro en los hechos que sus prioridades e intereses no son los trabajadores. Si hasta ahora el Ministerio mostró alguna predisposición a “mediar”, es porque la lucha que vienen llevando incomoda más allá de los límites distritales cómo sucedió con el corte de vía del ferrocarril San Martín.

El conflicto ya lleva 3 meses, mientras hay trabajadores como enfermeros, administrativos, técnicos, cocineros, limpieza que cobran un mínimo de 9 mil pesos y no pueden esperar más mientras sus condiciones se degradan día a día. Retomar el camino de la lucha, sumando a más compañeros dándole voz y voto, confiando en la propia fuerza de los trabajadores y coordinar con otros sectores es una tarea de primer orden para el Larcade.

Salir a las calles este 27 de abril junto a miles de trabajadores que enfrentan la misma situación, es donde está la fuerza para fortalecer al Hospital y defenderse de los ataques del municipio, buscando el apoyo de otros trabajadores y de la comunidad. Incluso con campañas contra la persecución recurriendo a organismos y referentes de derechos humanos. Cómo bien dicen las y los trabajadores "la unidad hace a la fuerza" y esa empezó a cobrar vida cuando en un primer paso marchamos en la "columna de las luchas" el 24 de marzo y después permitió confluir con muchos más sectores que se sumaron al gran Encuentro en Madygraf.

Basta con mirar el gran ejemplo de unidad y coordinación de los auto convocados de la salud en Neuquén, que pusieron en pie la coordinadora Interhospitalaria agrupando a más de 100 establecimientos de salud y cortan la estratégica ruta del petróleo y el acceso a Vaca Muerta, afectando los millones que ganan las multinacionales saqueando nuestros recursos con el aval de los gobiernos. Toda la provincia está atravesada por la rebelión de "los elefantes" de la salud y tienen el apoyo de los obreros ceramistas de las fábricas recuperadas, estudiantes de la universidad de comahue, los trabajadores petroleros yendo al paro para unirse a su causa, docentes, los mapuches, los desocupados y toda la comunidad que protagoniza enormes movilizaciones y caravanas en la ciudad neuquina.

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Este 27 de abril a las 8 am en el Obelisco las y los trabajadoras vamos por una gran columna del Hospital Larcade junto a miles de trabajadores en lucha, ocupados y desocupados.