Como todo disco del ex Beatle, Imagine es un reflejo de su tiempo, procesado por la personalidad del músico, compositor y activista, con un concepto que le llevó años de aprendizajes y experiencias formar y transmitir.
Jueves 9 de septiembre de 2021 00:05
“Imagina dejar que un pez dorado vuele a través del cielo”. (Yoko Ono. Grapefruit -1964)
Una formación inconsciente
Para fines de 1967, la banda más famosa del mundo, ya no era una unidad creativa. Las personalidades de Paul McCartney, Ringo Starr, George Harrison y John Lennon, que habían sido una conjunción perfecta en beneficio de la música de Los Beatles, a partir de la muerte de su manager Brian Epstein, se habían convertido en cuatro egos individualistas e indiferentes hacia cualquier creación que no fuera propia. Era el principio de un fin que se alargaría hasta 1970. En ese período, aprendieron a desarrollar su estilo como artistas solistas a pesar de publicar como banda.
Aparentemente, Ringo solo quería hacer canciones y pasarla bien. George, ante la interna entre los compositores Lennon-McCartney, creció como guitarrista, tanto como compositor. Paul, por su parte, se obsesionó con el perfeccionismo, y floreció en él un rasgo autoritario. John, influenciado por su compañera, Yoko Ono, quería saltar los límites del músico pop, quería convertirse en un artista que expresara con sinceridad sus sentimientos e ideas.
La temática social y política pocas veces apareció como mensaje en las canciones de Los Beatles. En 1966, George Harrison se quejaba en “Taxman” sobre el aumento de impuestos durante el Gobierno de Harold Wilson. Más tarde, el convulsionado clima social de 1968, las protestas mundiales contra la Guerra de Vietnam, o las luchas por los derechos civiles en EEUU, no pasarían desapercibidas para Lennon y McCartney.
Paul, fiel a su forma de expresar, compuso “Blackbird”, inspirado por los conflictos raciales, mientras que Lennon, frontal y salvaje, escribió “Revolution”.
Tanto en las giras, como en el estudio de grabación, Lennon, siempre leía el periódico y estaba muy informado. Fue él, junto a Harrison, quienes protestaban porque su manager no los dejaba hablar de Vietnam con la prensa. Fue él quien cuestionaba públicamente a la religión. O quien había dicho a la realeza británica que “agitara sus joyas”. Con el final del cuarteto, John iría trasladando sus visiones políticas a su música, pero antes debía encontrarse a sí mismo.
Para 1970, ya sin Los Beatles, Lennon enfrentó a su pasado para poder caminar hacia el futuro. Todo el trabajo publicado como “Plastic Ono Band” es la reafirmación de sí mismo y la aceptación de su propia historia. En este álbum, John exorciza los demonios de su niñez, la ausencia de su madre, cuestiona la existencia de Dios, valida su relación con Yoko, pero también habla de la revolución de las mujeres, y se define como un miembro de la clase obrera. Habiendo, literalmente, gritado quién era y de dónde venía. John estaba listo para dar su propio mensaje al mundo.
Lennon conoce el Trotskismo
“The Red Mole Workers Press”, un periódico político trotskista perteneciente a la Liga de Trabajo Socialista Británica, había criticado a la canción “Revolution” de 1968, en contraposición con “Working Class Hero” de 1970. Fue el propio Lennon, en una muestra de que era un ávido lector de noticias, quien respondió personalmente a la crítica mediante una carta. El cruce terminó con una incipiente amistad entre el músico y el director de Red Mole, Tariq Alí, quien introdujo a Lennon al trotskismo a principios de 1971. A partir de allí, John se enfocó en ordenar su visión política desde una perspectiva de izquierda y transmitirla en su obra, algo que sería una constante en los primeros tiempos del Beatle en New York en 1972, cuando sufriría la persecución del Gobierno de Nixon.
Fue tal el entusiasmo de Lennon por el trotskismo, que pensaba en componer música para que el pueblo pudiera cantar marchando en las calles. El resultado fue el sencillo “Power to the People”, lanzado en marzo de 1971, algo que fue difundido como una canción para Red Mole. Después de aquello, Lennon necesitaba expresarse en un nuevo álbum y, arrastrando su aprendizaje junto con sus nuevos conocimientos, comenzó a trabajar en el mismo con canciones menos autorreferenciales, como su último trabajo, sino que sentaba una posición a través de su música
Tittenhurst Park
John Lennon y Yoko Ono adquieren su primera casa juntos en mayo de 1969, una mansión llamada Tittenhurst Park en Ascot, en el condado de Berkshire, Inglaterra. Gastaron el triple de su valor en reformas, entre ellas, la construcción de un estudio de grabación. Fue allí donde el proyecto, que se llamaría “Imagine”, comenzó a tomar forma. El músico, con las canciones escritas, comenzó a trabajarlas, y fue reclutando a los músicos, principalmente a quienes ya venían trabajando con él, como su amigo Klaus Voormann al bajo, y al futuro baterista de Yes, Alan White, pero además, pensó en varios músicos invitados. El clima relajado y familiar de los ensayos comenzó a endurecerse al inicio de la grabación a fines de junio de 1971, cuando el talentoso aunque irascible Phil Spector, se hizo cargo de la producción del disco.
Lennon, tenía archivada una canción llamada “Child of Nature” compuesta en 1968, y que jamás fue considerada por Los Beatles, fue la base melódica para “Jelous Guy”, una piadosa autocrítica sobre el machismo al que se enfrentaba e intentaba vencer. Nicky Hopkins, por esos años un prestigioso pianista de sesión, hizo un trabajo omnipresente en la canción. Y también aporta su talento en la bella “How?”, otra justificación autocompasiva por los momentos en donde el músico no vislumbraba futuro alguno. El amor de John por Yoko, se hace presente en “Oh Yoko”, una balada country-folk, en donde el músico pone de manifiesto que necesita a su compañera las 24 horas del día. Y el amor mutuo, como una visión esclarecedora, tiene su momento en la delicada “Oh, My Love”, escrita por el matrimonio, donde además de Hopkins al piano, se suma en guitarra George Harrison.
Pelea de escarabajos
Apenas unos meses antes, Harrison había demostrado que por fuera de Los Beatles lograba la cúspide de su popularidad con su álbum “All Things must Pass”, cuyo sencillo “My Sweet Lord” era en un éxito de ventas. En los últimos tiempos de Los Beatles, Harrison principalmente, había desarrollado un resentimiento contra McCartney, por su deseo de controlarlo todo. Lennon, por su parte se sentía muy molesto con Paul desde hacía un mes. Paul, había lanzado RAM, y John vio muchas ironías personales hacía él, sobre todo por el tema “Too Many People”, que hablaba de los músicos que se vuelven predicadores, en una solapada alusión a la incursión en medios políticos de Lennon. Además de eso, en la portada Paul sostenía a un carnero por los cuernos, y en el sobre interno mostraba a dos escarabajos enzarzados en una pelea. Lennon se lo tomó personal, y secundado por Harrison, grabó “How do you sleep?” en donde cuestionaba duramente a McCartney por crear música pop inexpresiva, por ser políticamente correcto todo el tiempo, y hasta por sus aportes a Los Beatles. En respuesta a la parodia de las fotos, en el sobre interno de “Imagine” aparecía una fotografía de Lennon, sosteniendo a un cerdo por las orejas.
Reflexiones y Protestas
John había comenzado a trabajar en una melodía durante las sesiones de “Let it be”, último trabajo editado de los de Liverpool, pero era sólo una idea. Dos años después, esa melodía se transformó en “Gimme some truth”, una ácida crítica al sistema político y a los políticos que los sostenían a base de engaños hacia el pueblo. La continuidad de la Guerra de Vietnam era parte de ese sistema político, y en la cruda “I Don’t Want to Be a Soldier” Lennon se despacha sobre el mecanismo del negocio armamentista, que se apoyaba en varios sectores poderosos de la sociedad. Más reflexivas son el country rock, “Clipped Inside”, que cuestiona en varios sentidos a la hipocresía de la religión, o el blues, "It’s So Hard", en donde se pone en evidencia lo difícil que resulta no sentirse presionado por los mandatos sociales. Hay un excelente saxo de King Curtis en este tema.
Imagine
En la letra de “Imagine”, tema que daría nombre al álbum, se funden dos conceptos. Por un lado el estudio del Manifiesto Comunista que realizaba Lennon, y por el otro, la frase inspiradora de Yoko Ono: “Imagina dejar que un pez dorado vuele a través del cielo” de su libro “Grapefruit” de 1964. La idea de la imaginación como motor de la transformación, había sido usada por los estudiantes del Mayo Francés, y en la canción, esa idea toma más fuerza, con una energía esperanzadora. Lennon resumió en un puñado de versos el Manifiesto y le puso un tinte poético. Grabó varias tomas de “Imagine” hasta llegar a la definitiva. En una de esas tomas John llamó a Tariq Alí para conocer la opinión del Movimiento Trotskista. El dirigente político recuerda que junto a dos miembros del partido escucharon la canción y dieron su aprobación, aunque les pareció algo “blanda” en comparación con “Working Class Hero” o “Power to the People”. Lennon argumentó que era el mismo mensaje pero “con un baño de chocolate”. Después de muchas variaciones, finalmente la pista base del tema estuvo a cargo de John en piano, Vormann en bajo y Alan White en batería.
Producción y Lanzamiento
Durante todo el proceso de grabación en Tittenhurst Park, Yoko Ono estuvo muy involucrada en el proyecto, aportando ideas para la portada tanto como contribuciones en las letras. Años más tarde, Lennon lamentaría no haber acreditado a su esposa como coautora de la canción “Imagine”. Las grabaciones originales, viajaron a los Récord Plant Studios de New York, donde Phil Spector arregló las cuerdas para el disco, cuya producción salió acreditada a Lennon, Ono y Spector.
Cuando el álbum llegó al público, con una cubierta trabajada sobre una polaroid tomada por Andy Warhol, el 9 de septiembre de 1971, recibió críticas muy favorables y rápidamente se convirtió en un éxito comercial. Llegó al número 3 del Billboard estadounidense esa semana. Lennon se negó a lanzarlo como sencillo en Inglaterra, por lo que el álbum fue N°1 en ese país en noviembre.
El mensaje antimilitarista, anti religioso, en contra de las diferencias raciales, y de las posiciones materiales, fue mucho para algunas radios que censuraron la difusión del tema, algo que volvió a ocurrir en EEUU, después de los atentados a las Torres Gemelas, en septiembre del 2001. En 1972 se lanzó un video de las grabaciones del álbum en Tittenhurst, en donde aparecen, además de los músicos, los actores Jack Palance, Fred Astaire, el artista Andy Wharhol y el músico Miles Davies.
“Imagine” volvió a ser N°1, a fines de 1980, tras el asesinato de Lennon. En 2017, la National Music Publishers’ Association, acreditó a Ono como coautora.
Más allá de que “Imagine” representa el mayor éxito comercial de Lennon, es sin duda la esencia definitiva de su mensaje a la humanidad. Un día después del asesinato de John, Yoko dijo a la prensa: "El futuro sigue esperando a que nosotros lo construyamos. La década de 1980 florecerá si la gente acepta la paz y el amor en sus corazones. Esta tragedia será mayor si la gente se aleja del mensaje que hay en la música de John". Esta frase, sumado al ejemplo activista del músico que compuso “Imagine”, es aún hoy, el camino abierto como una invitación a construir un mejor futuro.