El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, propone establecer un macropaquete financiero de 100.000 millones de euros en ayuda a Ucrania. La propuesta tendrá que decidirse en julio en la cumbre de la OTAN en Washington y supondría un nuevo salto en la escalada guerrerista y el rearme imperialista de los países de la alianza atlántica.
Jueves 4 de abril
El rearme imperialista sigue in crescendo y los países de la OTAN preparan sus economías para la guerra. La guerra en Ucrania iniciada con la reaccionaria invasión de Putin a Ucrania pero aprovechada por los estados europeos como excusa para llevar adelante el mayor rearme e inversión en gasto militar desde la Segunda Guerra Mundial y esta tendencia sigue en aumento. Algo que solo puede traer consecuencias nefastas para los pueblos del mundo. Este miércoles, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha propuesto crear un fondo de asistencia militar para Ucrania por valor de 100.000 millones de euros para los próximos cinco años. La propuesta será debatida durante los próximos dos meses, el tiempo previo a una importante cumbre de la OTAN que se celebrará el mes de julio en Washington y donde tendrá que votarse la propuesta. De darse se trataría de un salto en la escalada belicista de los estados miembros de la OTAN.
El actual secretario general de la OTAN quiere blindar el apoyo de la Alianza a Ucrania. Si la UE aprobó en febrero un paquete financiero de 50.000 millones de euros para Ucrania y los países europeos de la OTAN, 23 de los 32 socios, solo en 2024 destinarán 380.000 millones de dólares a través de sus partidas en defensa, ahora Jens Stoltenberg da un paso más en el rearme imperialista y adelanta esta propuesta que implicaría un desvío de 100.000 millones en gasto militar destinado solo para Ucrania.
Esta noticia supone un salto más a los movimientos que ya vienen dando los estados miembros de la OTAN dirigidos hacia un escenario donde la guerra y las disputas imperialistas están más presentes y se preparan para ello. Mayor inversión militar, gasto en defensa, ayudas… En esta alianza además el Estado español a través de los sucesivos gobiernos encabezados por Sánchez en alianza primero con Podemos, ahora por Sumar, vienen demostrando su compromiso con esta deriva del imperialismo otanista algo que hemos visto en su compromiso con los sucesivos envíos de armas a Ucrania, la prórroga de los presupuestos militaristas votados en 2023, en la ampliación de las misiones militares en Europa del Este, en las declaraciones de Margarita Robles que “nos preparan para la guerra”, y con la reciente ofrecimiento del puerto de Maò a la OTAN para que sea usado por las fuerzas navales implicadas en su apoyo a Ucrania o Israel.
En un marco de tendencias al militarismo y la guerra como las que se extienden por Europa, es necesario hacer resurgir las mejores tradiciones de oposición a la OTAN y el militarismo del imperialismo español. La izquierda anticapitalista, junto con los movimientos antimilitaristas, el sindicalismo combativo, la militancia de base de los sindicatos mayoritarios, las organizaciones juveniles y el resto de movimientos sociales, tenemos que poner en pie un gran movimiento contra el rearme imperialista y la escalada militarista del gobierno español, el PP y Vox, que luche por frenar la entrega del puerto de Maó a la OTAN, por el cierre de todas sus bases, por tumbar los presupuestos militaristas y exigir la retirada de todas las tropas en el extranjero.
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