El sábado entraron por la fuerza a la casa donde vive la hermana de Juan Martín Yalet. Dieron vuelta todo, la golpearon y la amenazaron diciéndole "cuidado con lo que hablás".
Lucas Passa @LucasPascuale
Jueves 10 de septiembre de 2015
Era la medianoche del sábado 5 cuando seis hombres con uniformes de Gendarmería irrumpieron en la casa de la familia de Juan Martín Yalet, el joven asesinado por la policía dentro de un patrullero días atrás. Los atacantes amenazaron y golpearon a Viviana, hermana de Juan Martín.
Con la voz quebrada en una mezcla de temor y odio Viviana, la hermana de Juan Martín Yalet, nos relató los hechos vividos el sábado 5 cerca de la media noche.
"Yo me encontraba sola en casa el sábado a las 11 de la noche. Escucho que golpean la puerta y cuando abro veo a 6 hombres vestidos con los uniformes de gendarmes y encapuchados en dos autos particulares. Inmediatamente quise cerrar la puerta pero terminaron entrando a la fuerza a mi casa. Ahí se pusieron a revisarme toda la casa y me golpearon; me decían que era por la denuncia por lo de mi hermano, que la tenia que levantar".
"Luego de darme vuelta la casa, amenazarme y golpearme con patadas en el piso, decidieron irse. Me decían al salir que “ahora no te encontramos nada negrita, pero va a ser peor”, “cuidado con lo que hablas”. A mi no me van a callar así no mas, quiero saber quienes son, por que tienen tanto poder. No cualquiera puede hacer esto así nomas".
"Nosotros fuimos a la fiscalía para que se investigue este hecho con mi abogada que ya hizo la denuncia. Yo no les pude ver las caras porque estaban encapuchados. Todo el barrio los vio toda la semana que estaban dando vueltas, pero ellos también tienen miedo. El gobierno no salió ni a preguntar ni dio ninguna respuesta de que fue lo que pasó".
Una de las primeras organizaciones en ponerse en contacto con la hermana de Juan Martín Yalet fue el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH), quienes salieron a repudiar y denunciar los hechos sufridos por su familia.
"Hechos como este muestran que las fuerzas represivas sean la Bonaerense de Scioli, la policía local de Bruera o la Gendarmería nacional de Berni forman parte del mismo aparato represivo, que contando con la impunidad del Estado se defienden entre ellos si se sienten amenazados. Desde que se hizo público el caso de Juan Martín la familia cuenta con el apoyo y la organización de organismos de derechos humanos, organizaciones sociales, políticas y estudiantiles y familiares de víctimas de gatillo fácil" declaró Luz Santos Morón, abogada del CeProDH e integrante de Justicia Ya! La Plata.
"También en La Plata, a días del asesinato de Juan Martín, Rafael Cobo fue baleado por un efectivo de la Policía Local vestido de civil en pleno centro de la ciudad. Estos casos que movilizan a la ciudad son consecuencia de la política “de seguridad” impulsada desde los gobiernos, que busca aumentar el poder de fuego del aparato represivo del Estado con más policías armados. En la misma ciudad donde Miguel Bru y Jorge Julio López continúan desaparecidos, y mientras un pibe muere en nuestro país a manos de las fuerzas represivas cada 28 hs, es evidente que no se trata de una manzana podrida en el cajón, sino que es intrínseco del aparato represivo de estado, sean fuerzas nacionales, provinciales o municipales", agregó Mariana Derni también abogada e integrante del CeProDH.
Vale recordar que van más de veinte días que en la misma ciudad desapareció la joven estudiante de ingeniería, Rut Avila Zambrana, y que la investigación de su paradero está nada menos que en manos de la propia Policía Bonaerense, especialista en hacer desaparecer personas y socia directa de las redes de trata y otras mafias del gran delito.
A días de cumplirse un nuevo aniversario de la Noche de los Lápices y de la segunda desaparición de Jorge Julio López las mismas fuerzas represivas no dudan en retomar "viejos" métodos, como lo demuestran los dos casos de Gatillo Fácil sufridos por Juan Martín y Rafael como también en las amenazas sufridas por la familia de Yalet. Esta situación pone sobre la superficie no solo el accionar mafioso del aparato represivo contra la juventud sino la responsabilidad del Estado que en su conjunto encubre garantizando la impunidad de los responsables materiales y políticos. Como venimos denunciando desde La Izquierda Diario, con casos que cada vez se reproducen con mayor regularidad, el "gatillo fácil" es un producto directo de de las políticas de control social, militarización de las barriadas populares e impunidad impulsadas tanto por el gobierno nacional como por el provincial y el municipal.
Mañana, Viernes 11, los familiares de víctimas de Gatillo Fácil, junto a la Multisectorial La Plata, Berisso y Ensenada, el Colectivo contra el Gatillo Fácil, la Federación Universitaria de La Plata (FULP) y Centros de Estudiantes convocan a movilizarse contra la política represiva del Estado, responsabilizando al gobierno nacional, provincial y municipal, exigiendo juicio y castigo a todos los responsables y el apartamiento inmediato de la fuerza de los policías involucrados.