La Unión Europea aplicará un nuevo Plan de Defensa, financiado con los fondos Next Generation, para reforzar la industria militar europea. Toda una maniobra que, en el marco de la agudización de la situación en Ucrania, preparará nuevos expolios e intervenciones como el genocidio que vemos en sobre el pueblo palestino.
Lunes 4 de marzo 20:15
En las próximas semanas, la Unión Europea presentará un Plan de Defensa que destinará recursos para el fortalecimiento de la “seguridad” europea y la industria militar. Así lo ha anunciado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Este rearme se suma a las políticas militaristas precedentes, que incrementaron la inversión militar en la última década más de un 30%, llevando la inversión total a niveles no vistos desde la Guerra Fría. Bajo el discurso de mantener una Europa "libre y segura", la realidad es que este rearme profundizará las políticas imperialistas de los países de la Unión Europea (UE), que ya actúan como cómplice del gobierno de Israel en el genocidio al pueblo palestino y perpetúan todo tipo de guerras y expolios, a la par que dificultan o impiden la migración que generan.
La ofensiva del gobierno israelí sobre el pueblo palestino ha supuesto una convulsión en los planes del imperialismo mundial. El cambio en la estrategia exterior del presidente estadounidense Joe Biden, centrado durante más de un año, en la ayuda económica y militar a Ucrania y ahora en reforzar al gobierno israelí, ha hecho perder impulso a Ucrania en el conflicto. La posibilidad de que Rusia acabe con la guerra anexionando una parte del territorio ucraniano en el corto plazo ha sido el detonante para que la UE trate de reforzar su capacidad militar.
Desde Bruselas, se plantea un plan que refuerce la autosuficiencia europea en materia militar, creando un mercado de defensa interno que no dependa de entes exteriores. Además, impulsará a las grandes empresas militares Europas con los fondos comunitarios. Con esto, lo que busca la UE es hacer pesar menos la desventaja competitiva que tiene con la industria norteamericana.
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El gobierno español se ubica como el principal defensor del militarismo europeo. Mientras la exministra de economía y exvicepresidenta del gobierno y actual presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Nadia Calviño, planteó en una entrevista con el diario El País su intención de que el BEI vire estratégicamente hacia “reforzar la industria militar europea y la capacidad disuasoria” de la Unión, el gobierno mantiene el despliegue militar en el Líbano como parte de la ayuda que brinda a Israel a defenderse de Hezbolá. Mientras, respalda las intervenciones en el Mar rojo contra las milicias hutíes y firmó hace apenas un mes un nuevo contrato millonario con una empresa israelí que fabrica armas testadas en Gaza.
La escalada belicista y militarista de los estados europeos continúa aumentando las tensiones geopolíticas mientras se perpetúa el genocidio sin predecentes en este siglo que Israel comete contra el pueblo palestino. La clase trabajadora y los pueblos del mundo seguirán sufriendo la consecuencia de las guerras que llevan a cabo estas potencias. La intensificación militarista, lejos de las promesas de paz y seguridad que plantea la UE, tan solo deja tras de sí la apertura de un horizonte de mayores conflictos.
