El Departamento de Comercio de los Estados Unidos confirmó ayer que el crecimiento del PBI de ese país fue de un escuálido 0,2 por ciento durante el primer trimestre de 2015.
Jueves 30 de abril de 2015
Según los indicadores presentados por este organismo estatal que se encarga de la promoción del crecimiento económico del país, se advierte un freno mayor del previsto que causa un estancamiento de la economía, aunque provee que la actividad puede mejorar en el corto plazo.
Los factores que causaron este bajo crecimiento económico, llegando a 0,2 por ciento anual en el primer trimestre del año, es asociado a factores estacionales como el clima frío que redujo bruscamente el gasto del consumidor. Otro factor fue que las compañías de energía, afectadas por los precios más bajos, disminuyeron sus inversiones.
La fortaleza del dólar y una disputa en los puertos de la costa oeste estadounidense, ahora resuelta, también afectaron a la expansión, dijo el Gobierno.
La brusca moderación del consumo, que paso de un incremento del 4,4% en el cuarto trimestre pasado a solo el 1,9% en el primero del año, se produjo incluso a pesar de que los hogares estadounidenses pudieron aumentar su ahorro producto de la considerable baja de los precios de la gasolina. Los consumidores aumentaron su ahorro a 727.800 millones de dólares desde 603.400 millones de dólares en el trimestre anterior.
El sector de la construcción también se vio afectado por el impacto del clima, mientras que los menores precios energéticos, que se sintieron en la producción doméstica de crudo, socavaron la inversión empresarial. El gasto en estructuras no residenciales, que incluye exploración y perforación petrolera, se desplomó a un ritmo de 23,1 por ciento. Esa caída fue la más fuerte en cuatro años y marcó la primera contracción desde el primer trimestre de 2013. Simultáneamente las exportaciones cayeron un 7,2%.
Frente a este panorama, muchos analistas coinciden en señalar que el estancamiento será pasajero, aunque se multiplican los datos desalentadores de sectores como manufacturas, ventas minoristas e inversión empresarial, que dan la pauta de un repunte más débil y lento. El retroceso fue considerable si lo comparamos con el 2,2 por ciento de crecimiento registrado en el trimestre anterior y el 5 por ciento del tercer trimestre de 2014.
Para la FED el estancamiento es transitorio y no afecta las tasas de interés
Luego de la publicación de los indicadores de crecimiento bajo, muchos economistas atinaron a pensar que ya no sería posible que la FED suba las tasas de interés, saliendo del 0%, medida implementada a partir de la crisis del 2008.
Sin embargo, una vez finalizada la reunión de política monetaria correspondiente al mes de abril de la FED, en su comunicado de prensa afirmaba: "El Comité anticipa que será apropiado elevar el rango meta de la tasa de fondos federales cuando vea nuevas mejorías en el mercado laboral y esté razonablemente confiado de que la inflación avanzará nuevamente hacia su objetivo de mediano plazo del 2 por ciento"
En consonancia, la Reserva Federal de Estados Unidos destacó que existe una debilidad en el mercado laboral y en la economía general, y esto es muestra las dificultades que tendría el banco para avanzar con su plan de subir las tasas de interés este año.
Janet Yellen, presidenta de la FED aseguró que la subida de las tasas de interés "no necesariamente tiene que ser en junio, pero no se descarta" que sea así.
Estas declaraciones tuvieron un muy buena recepción en los mercados, que ayer cerraron en alza en Wall Street, y deja abierto el escenario para nuevas especulaciones financieras relacionadas a la probable suba de las tasas de interés en junio.
Guadalupe Bravo
Nacida en Trenque Lauquen, Provincia de Buenos Aires en 1985. Es economista, recibida en la UBA. Miembro del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2004. Coedita la sección de Economía de La Izquierda Diario.