Ya se instaló el consejo constitucional, dejando una elección donde triunfó el Partido Republicano. Chile vamos, Socialismo democrático y Apruebo dignidad en general sufrieron una derrota electoral. Sin embargo, el Partido Comunista obtuvo 791.533 votos, sacando en limpio la conclusión de que a la derecha se le derrota en las urnas, para ser más precisos, llaman a su militancia a buscar frentes electorales; con el objetivo de "abrir paso a la más amplia unidad y en una intensa disputa para conquistar mayorías, y luchando por las demandas urgentes del país, detener el avance de la ultra derecha"
Sábado 10 de junio de 2023
El balance de la colectividad del ciclo político abierto con la rebelión, específicamente en sus primeros momentos, es que "El proceso constituyente que abre el estallido social del 18 de octubre, y se institucionaliza con el acuerdo del 15 de noviembre de 2019, su objetivo principal era dar cabida a transformaciones profundas en la institucionalidad chilena, de esa forma construir respuesta a las demandas que venían de los movimientos sociales y los partidos de izquierda en Chile. Esta nueva constitución tenía como objetivo no declarado superar al modelo de desarrollo neoliberal".
Con éste balance alimentan ilusiones en el Acuerdo por la paz, adjudicándole nada más ni nada menos, el objetivo de superar al modelo de desarrollo neoliberal (¡la constitución era la tumba del neoliberalismo!) pero lejos de resultar así, el proceso fue logrando los objetivos de la burguesía.
Para ser más claros, tenía como objetivo inmediato, salvar a Piñera de ser derrotado por la movilización y crear un proceso constituyente, reglamentado por el Congreso, que impuso a las candidaturas independientes dificultades para ser candidatos y aseguró para la derecha poder de veto mediante el quorum de 2/3, veto que perdieron por la votación popular, donde quedaron en minoría. Además, las normas emanadas de la cámara, obligaban a los integrantes de la convención a no tocar los tratados internacionales (no por nada Piñera puso suma urgencia a la aprobación del TPP-11), asegurando de esa forma que las posibles reformas terminen por ser arreglos cosméticos al modelo.
Continuando con el balance político del PC, expresan que no se hizo la mejor campaña, pero que están satisfechos con su resultado. En su Informe Al XIII Pleno Del Comité Central, además de lo citado más arriba, escriben; "Sentimos una sana satisfacción por la votación alcanzada por nuestro Partido que, en medio de una descarada campaña anticomunista y con candidaturas en 14 de las 16 regiones, llego al 8,08% (equivalente a 791.533 votos), el mejor resultado logrado desde la vuelta a la democracia".
Sin embargo, no se hizo la mejor campaña para la dirección del PC porque: "Los resultados electorales han puesto al centro la importancia del instrumento partidario, esta elección mostro el peso del Partido Comunista (vota confiado/a, vota comunista), pero también evidencio los problemas que tenemos y que debemos abordar con una perspectiva de proyección y no de encierro.
(...) Existe un fenómeno de larga data que afecta al Partido y la Jota, que se expresa en cómo nos incorporamos al proceso de disputa de masas, sean espacios sindicales, sociales y/o electorales, hay una franja partidaria que no hace campaña. Se sintió la ausencia de muchos cuadros en tareas destacadas y que al parecer vieron una contradicción entre sus labores y el trabajo político más importante del momento. Más serio fue los que se manifestaron contra lo acordado, fenómenos de dispersión que en esta coyuntura se expresó en voto nulo, y afectó la unidad de acción. Posiciones y actitudes que abiertamente debilitan al Partido y que en los distintos colectivos de dirección debemos abordar y resolver".
En conclusión, el problema no estuvo en legitimar un fraude constituyente que descansa sobre bases antidemocráticas (comité de expertos elegido a dedo, comité de admisibilidad elegida a dedo, bases constitucionales pactadas por partidos de dudosa representatividad y que mantienen en lo esencial las bases de la constitución actual) volcando a las federaciones estudiantiles y sindicatos que dirigen, a hacer campaña en todas las elecciones para alimentar las expectativas de trabajadores y estudiantes en un texto constitucional redactado con las condiciones de la clase dominante, sino en que, hubieron sectores de su partido que votaron nulo y "claramente" las prioridades de las grandes mayorías han cambiado. Por supuesto, queda agregar que no hicieron una mejor campaña, integrando a otros sectores de la izquierda a su programa.
El giro del PCch
Por lo expuesto más arriba, en su documento se muestran categóricos, deben revertir su "error":
"Sin embargo, el resultado de la elección del consejo constituyente del 7 de mayo de este año, nos permite decir que el proceso constituyente, como uno de los cambios profundos, ha quedado clausurado. Junto a ello, las normas que ha redactado el comité de expertos han ido en la dirección de dar cabida a todos los procesos políticos, por lo que la constitución queda más bien como un espacio que habilita que las trasformaciones se produzcan, ya no en el marco del debate constituyente, sino por medio de la discusión de leyes en el parlamento, devolviendo la lucha a la escena de los movimientos sociales."
De un balance incorrecto deviene un giro incorrecto. Han pasado de estar en un charco a entrar en otro, más bien, a mostrarles la perspectiva política a trabajadores, estudiantes y movimientos sociales de que para conquistar nuestras demandas necesitamos un lobby parlamentario con rasgos de acción.
Ahí está el cómo; una estrategia de desgaste para el movimiento estudiantil, para los sindicatos, movimientos de mujeres y la diversidad sexual. ¡si no nos escuchan en el consejo lo harán en el Congreso! ¿pero qué iremos a exigir?... derechos que están sujetos a la reforma tributaria...
Sobre la coyuntura: por una perspectiva contra la resignación y la ultra derecha
La instalación del consejo constituyente dejó como postal a la ultra derechista, de familia latifundista y defensora de la iglesia, presidenta del consejo, Beatriz Hevia, declarando al conjunto de los consejeros:
"esta crisis integral que sufrimos la antecede una profunda crisis moral que se manifiesta en la descomposición de la vida moral, en el desprecio por la autoridad, las normas y el Estado de derecho. Y por cierto en la justificación de la violencia y la solapada promoción como método de acción política”.
La hija del ex director de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno, que estudió en el Deutsche Schule Osorno (Instituto Alemán de Osorno), cuya mensualidad asciende a 13,5 UF (alrededor de $486 mil pesos mensuales. Más que el sueldo mínimo actual) defiende los intereses de su clase.
La encargada de la sección ideológica de juventud del Partido Republicano hasta antes de su candidatura, escribía el 4 de septiembre: "Tal como en la moraleja del sapo en el agua hirviendo, la izquierda ideológica venía realizando un trabajo de relojería avanzando en la implantación de sus ideas en nuestra sociedad, y creyeron que luego del estallido de 2019 y el 80% de la opción Apruebo en el plebiscito de entrada, estaba todo listo y podrían subir la temperatura bruscamente y acelerar el trabajo".
Mas allá de metáforas de sapos y lecciones de moral, la postura de la Republicana presenta una forma inversa de plantear el problema que el PC; la presidenta del consejo ha llegado a la convención junto al PR para cerrar la "crisis integral" que sufrimos, que afirma es causada por una "crisis moral" abierta por las movilizaciones contra la precarización de la vida el 2019. Defendiendo la idea de la familia, la propiedad privada y el Estado.
Por otro lado, el Partido Comunista asegura que; "Las listas que representaban esta ambición de cambios para superar el neoliberalismo construyeron rápidamente una mayoría que posibilitó que la constitución redactada incorporara los anhelos de cambio. Los cambios pasaron de tener un alto nivel de apoyo, a considerarse confusos y en algunos casos un retroceso, el proceso completo generó vértigo en la población, que vio cómo se cambiaba todo. Al mismo tiempo y en todas partes, la respuesta fue contundente, se rechazó el texto más avanzado en términos constitucionales".
Asegurando con su análisis que el proceso profundizaría las demandas y constituyó una conquista para las grandes mayorías, pero que éstas decidieron rechazar la propuesta por "vértigo" al texto "más avanzado en términos constitucionales". En consecuencia hay que desplazar la energía desde el consejo (buscando incidir en él de todas formas y legitimar el proceso de conjunto) hacia una presión al poder legislativo.
En definitiva, mientras el partido Republicano corona en el consejo constituyente abriendo una batalla ideológica sin tregua contra los derechos de sectores populares, de mujeres y disidencias, el Partido Comunista buscará mediante movilizaciones de base a trabajadores, estudiantes y pobladores para ir a presionar al Congreso la agenda legislativa pendiente: Reforma de pensiones y Reforma Tributaria.
Agregar que, aseguran que lucharán por el fin de las AFP y por un "nuevo sistema de financiamiento educativo", su análisis parte de un punto único: El camino de la nueva constitución con reglas impuestas por el Congreso era un paso necesario para resolver los "anhelos de cambio" de las personas. Desmovilizando en consecuencia, a los organismos de trabajadores y estudiantes como la CUT y la Confech respectivamente.
Desde el PTR hemos votado nulo por una perspectiva diferente: Retomar los organismos de la clase trabajadora, de estudiantes y del conjunto de la sociedad como el movimiento de mujeres y disidencias para discutir nuestras necesidades principales y organizar un plan de lucha que no deposite su confianza en las condiciones de un congreso deslegitimado sino que retome la lucha por una asamblea constituyente libre y soberana.