Causando daños en Puebla, Veracruz e Hidalgo, fue la tormenta tropical más letal en los últimos 16 años.
Lunes 22 de agosto de 2016 16:42
El jueves 4 de agosto pasado el Servicio Meteorológico Nacional mexicano había informado que, después de su paso por Belice, la tormenta Earl provocaría tormentas torrenciales en Chiapas, Tabasco y Campeche, así como tormentas intensas en Veracruz, Oaxaca y Quintana Roo, y fuertes chubascos en Yucatán.
Ante el fenómeno, las autoridades exhortaron a la población a “mantenerse informada a través de los avisos que emiten el SMN, Protección Civil y las autoridades estatales y municipales; asimismo, llamaron a extremar precauciones ante posibles deslaves, deslizamientos de laderas, desbordamientos de ríos y arroyos o afectaciones en caminos y tramos carreteros, así como inundaciones en zonas bajas y saturación de drenajes en sitios urbanos.
En cuanto a la navegación marítima en las inmediaciones del sistema, deberá extremar precauciones y no realizar actividades náuticas, turísticas, recreativas y comerciales en el mar y zonas costeras, durante las próximas horas.
El fenómeno Earl subió al grado de huracán en categoría 1 de acuerdo con el último reporte del Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) de Miami.
A partir de este informe las autoridades mexicanas cancelaron vuelos y el Sistema Nacional de Protección Civil emitió un comunicado con recomendaciones a la población.
Después de ese recorrido la tormenta tropical Earl tocó tierra causando daños en Puebla, Veracruz e Hidalgo, dejando un saldo de 52 personas muertos y cantidad de desaparecidos. Eso la convierte en la tercera tormenta tropical más letal ocurrida en México en los últimos 16 años.
Los especialistas en eventos climáticos afirman que el huracán Ingrid combinado con la tormenta Manuel en 2013 y el huracán Stan, que arrasó Chiapas en 2015, han dejado un mayor número de personas muertas si se compara con Earl.
Aunque la intensidad de Earl se fue degradando al llegar a México, su nivel de destrucción es superior a huracanes, algunos de nivel 3, 4 y 5 que afectaron a ese país en otros momentos.
Según datos publicados por el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) entre el 2000 y 2016 “más de dos mil quinientas personas han fallecido por desastres hidrometeorológicos (sequías, lluvias, ciclones) y de ese total 535 han muerto en tormentas tropicales y huracanes”.
A esto hay que sumarle los daños materiales que según este mismo organismo asciende a más de 368.798 millones de pesos tomando el período 2000 y 2014.
Daños en infraestructura
El paso de la tormenta Earl ocasionó daños en 202 escuelas de 29 municipios de Puebla y amenaza con retrasar el inicio de clases a 2.700 alumnos de la sierra norte. En ocho de ellas, los daños son severos como el Bachillerato Ignacio Zaragoza en Chicahuaxtla, Tlaola, o el Bachillerato Octavio Paz de Ahuacatlán.
Las autoridades de protección civil anunciaron que por permanecer en una zona de alto riesgo, estas instituciones educativas no podrán utilizar sus instalaciones por el deterioro en techos paredes y equipos de computación. Muchos estudiantes de la zona de Chicahuaxtla y Ahuacatlán, tuvieron que tomar sus propias clases en lugares asignados para eventos deportivos.
Gabriel Alvarado, presidente municipal, comentó que a los niños "no se le niegue el acceso, por ninguna condición en este regreso a clase, ya sea por falta de uniformes, por falta de papeles o ya sea por estos apoyos de cuotas voluntarias que entregan a los comités de padres de familia"
Las autoridades informaron que se instalarán escuelas móviles en los próximos días para el inicio del ciclo escolar 2016-2017.
México país en riesgo
¿Por qué México es un territorio que está sujeto a estos fenómenos naturales? Este país tiene costas en los dos océanos. Esto es beneficioso a nivel económico pero lo hace mucho más vulnerable a los efectos de los ciclones que se originan en las dos temporadas de huracanes: la del Atlántico y la del Pacífico.
El mismo informe de CENAPRED refuerza esta teoría señalando que “en septiembre de 2013 el Huracán Ingrid, que ingresó al país por el Golfo de México, se combinó con la tormenta Manuel que lo hizo por el Pacífico, generando afectaciones menores y mayores en 22 Estados del país según el balance del CENAPRED”.
Si uno toma el período 2000-2016 se han sucedido 37 fenómenos hidrometeorológicos que ocasionaron cinco personas muertas siendo los Estados más afectados Veracruz, Oaxaca, Guerrero, Puebla, Chiapas y Baja California Sur.
En 2013 ha sido el peor del siglo en pérdidas humanas: “se registraron 300 fallecimientos por fenómenos hidrometeorológicos de los cuales 180 correspondieron directamente a ciclones tropicales”. Por otro lado la investigación establece que las inundaciones en Puebla en 1999 dejaron 263 muertos, las lluvias torrenciales en Chiapas de 1998 a 229 muertos y el huracán Paulina de 1997 arrojó un saldo fatal de 228 personas fallecidas.
Las únicas excepciones de fenómenos no hidrometeorológicos en México se dio en el sismo de 1985 en la Ciudad de México, con un saldo oficial de seis mil muertos, y la erupción del volcán Chichón en Chiapas, en 1982, que cobró la vida de mil 700 personas.
