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PASO en Bahía Blanca. Las dos Bahías: una ciudad con grandes desigualdades y las propuestas de la izquierda

¿Ganancias del complejo agro-químico portuario para unos pocos o para solucionar los problemas de las grandes mayorías en Bahía Blanca? El extractivismo y el pasivo ambiental en la región. Qué propone el PTS-FITu y la lista que encabezan Daniela Rodríguez en la ciudad, Myriam Bregman y Nicolás del Caño nacionalmente.

Domingo 30 de julio de 2023 13:11

Portada: edición sobre foto de Cambio2000

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Las PASO y la Guerra de pirotecnia

Se acerca las PASO 2023 y en Bahía Blanca, los frentes electorales patronales hacen que se pelean, pero es solo para las cámaras porque en lo esencial mantienen un orden que favorece a unos pocos privilegiados. Nidia Moirano, la representante de Patricia Bullrich, disputa la interna con Andrés De Leo, el alfil de Larreta. Por más que se esfuercen en mostrarse como distintos, no pueden ocultar que su espacio político gobernó durante los últimos ocho años en la ciudad y son directos responsables del estado en que esta se encuentra: 90.465 bahienses en situación de vulnerabilidad económica.

Enfrente, o no tanto, esta el administrador de los negocios de la multinacionales, el presidente del Consorcio de Gestión del Puerto, Federico Susbielles por Unión por la Patria. Susbielles además es parte del Frente que hoy gobierna con el Ministro de Economía Sergio Massa (precandidato a Presidente) que acaba de renegociar un acuerdo con el FMI que profundizará el ajuste, recortando en ayudas sociales, subiendo las tarifas, y conteniendo el crecimiento de la masa salarial. Y no duda en hacer campaña hasta con Sergio Berni, el ministro estrella de Kicillof , responsable de la desaparición y asesinato de Facundo Castro que implica directamente a la Policía Bonaerense.

Ambos frentes usan mucha pirotecnia verbal pero no pueden ocultar que ambas opciones políticas cogobernaron la ciudad y el puerto en función de los negocios capitalistas.

Radiografía de la ciudad y su puerto

En los últimos años, Bahía Blanca y su complejo portuario industrial fueron consolidándose como la tercera zona industrial del país, detrás del gran Buenos Aires-Rosario y Córdoba. Uno de los pilares de este complejo es el puerto. Administrado por el Consorcio de Gestión del Puerto (CGPBB), un ente público no estatal de gestión, presidido por Federico Susbielles (UP), que tiene la finalidad de administrar y potenciar las ganancias capitalistas de las multinacionales del agropower. Junto con puerto Galván, el puerto de Ingeniero White da salida a la producción del agropower de la región, completando la carga de los buques graneleros salidos de la hidrovía del Paraná.

El año pasado se superó las 31 millones de toneladas exportadas en 1.220 buques. De estos, 24.659.096 toneladas son del complejo agrícola (granos, maíz, trigo, cebada, soja).

A esto se le agrega 3.510.934 toneladas de los inflamables y químicos del complejo petroquímico, el segundo pilar económico de la región, donde multinacionales como Proferil, Mega, Dow Argentina, Solvay Indupa (ahora Unipar), PBB Polisur y TGS producen fertilizantes, PVC, Soda cáustica, Hipoclorito de sodio, etileno, polietileno y poliuretano.

El tercer pilar es el parque industrial con más de 130 empresas que proveen servicios a las grandes empresas del polo petroquímico y ayudan a mantener operativo el puerto. A este potencial, en los últimos años se sumó el puerto Rosales, donde operan las empresas Oleoductos del Valle (Oldelval) y Oiltanking Ebytem que transportan el petróleo desde Vaca Muerta a través de 455 km de un oleoducto. Finalmente, el año pasado se firmó un acuerdo con Petronas para el desarrollo de una planta de licuefacción del gas de la cuenca de Vaca Muerta para ser exportado al exterior.

Sin lugar a dudas el complejo agroportuario bahiense se ha consolidado como una de las principales concentraciones porturarios-industriales del país. Pero las terminales portuarias están en manos de estos pulpos multinacionales, ya que desde 1993, el estado nacional traspasó el puerto de Bahía Blanca a manos de la provincia de Buenos Aires, quien creó un ente público no estatal que tendrían a su cargo la administración y explotación del mismo. Este ente debían participan los sectores privados interesados, junto a representantes de la provincia y los municipios. Desde ese momento las 12 terminales portuarias, de Bahía Blanca, Puerto Rosales y Puerto Galván, están bajo el control de cerealeras y multinacionales, que incluso tienen sus propias terminales portuarias (ADM Agro, Cargill, Profertil, Mega y Dreyfus) donde sin intromisión del estado declaran a sola firma lo que exportan sin que haya un control real de sus cargas.

Las ganancias obtenidas el año pasado fueron descomunales, mientras la ciudad se sumerge en la pobreza (28.4 %), la indigencia (7.2 %), la desocupación (12.025 personas), la precarización de la vida y el pasivo ambiental que dejan estas multinacionales. Así se configura el mapa de las dos Bahías, una ciudad para unos pocos privilegiados y otra para las grandes mayorías. Una ciudad con grandes desigualdades.

¿Quiénes ganan y pierden con este modelo?

Daniela Rodríguez, precandidata a intendenta por la lista de “Unir y fortalecer a la izquierda” del FIT-U viene planteando que: “… Bahía Blanca cada vez se consolida más como una ciudad de grandes desigualdades… Quienes gobiernan y la oposición se pelean para las cámaras, pero después tienen un proyecto en común, y con promesas de que los negocios de Vaca Muerta, el petróleo, el gas son un futuro asegurado para la ciudad. Vemos cómo todos estos años esas multinacionales tuvieron récord de ganancias, pero eso jamás se tradujo en mejoras para las y los laburantes”.

Es que la gran burguesía tiene un plan que pretende avanzar con el extractivismo y juntar los dólares que hacen falta para pagar la deuda y garantizar los negocios capitalistas. A ese fin quieren destinar el aumento de la explotación del petróleo, el gas, ampliando la frontera agraria para producir más soja, maíz y trigo para la exportación, y así avanzar hacia una Argentina reprimarizada, donde solamente se exporten productos primarios. Un país y una ciudad donde los miles o millones que “sobran” deberán subsistir con limosnas estatales, salarios miserables o trabajos precarios y una minoría, ligada a estos grandes negocios, que podrá vivir como dioses. Y en este plan no hay grietas entre el kirchnerismo y Juntos por el Cambio. Ambos cogobernaron la ciudad: Federico Susbielles desde el Consorcio del puerto y precandidato a intendente de la UP y Hector Gay, actual intendente de JxC.

Ahora, en estas elecciones Susbielles (UP) y Moirano-De Leo (JxC), se disputan la primer magistratura de la intendencia, pero su modelo estructural no cambia. Sólo el Frente de Izquierda Unidad propone una verdadera salida por el vértice opuesto a la crisis actual.

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Algunas medidas de emergencia que proponemos

1. Que el salario mínimo cubra la canasta familiar. Por un aumento de emergencia para los salarios, jubilaciones y planes sociales.

Hay que defender el salario frente a la devaluación. Nuestro poder de compra se desplomó. Según el último informe del INDEC de “Incidencia de la pobreza y la indigencia en 31 conglomerados urbanos”, se contabilizaron que en Bahía Blanca-Cerri tiene 318.660 habitantes, de los que 90.465 son pobres y 22.984 son indigentes. Es decir 1 de cada 3 bahienses es víctima de la inflación, los salarios miserables y la pobreza.
Por eso peleamos por un aumento de emergencia de los salarios, jubilaciones y programas sociales con subas automáticas según la inflación mensual y así garantizar que nadie gane menos que la canasta familiar. Hoy un trabajador para no ser pobre debería ganar más de $232.000.

2. Nacionalización completa del comercio exterior

El gobierno nos dice que no hay dólares y eso habilita a una serie de recortes y ajustes. Pero el complejo portuario industrial bahiense demuestra que sobran los dólares, pero está en manos del agropower, especuladores y multinacionales. El año pasado se cansaron de juntarla en pala. Solo en la exportación de maíz, trigo, cebada y soja, tuvieron 3.658.726.645 de dólares de ganancia.

Pero el comercio exterior está manejado por este puñado de empresas. Por eso luchamos por el monopolio estatal del comercio exterior bajo el control de los trabajadores para terminar con todas las maniobras legales o ilegales, y así resguardar las divisas y ponerlas al servicio de una planificación democrática de la economía, garantizando un precio accesible los alimentos en la mesa de todas las familias.

En esta opulenta ciudad 113.449 personas son pobres e indigentes, pero otra sería la realidad si pusiéramos las ganancias del complejo portuario industrial bahiense al servicio de las necesidades de estas mayorías. Por ejemplo, 15.641 personas podrían salir de la pobreza e indigencia con el valor de un solo barco granelero de trigo de 50.000 tn. Es decir, podemos eliminar la pobreza y la indigencia de la ciudad con la ganancia de la venta de la carga de solo 8 de estos barcos al mes. Menos del 1 % del total de ganancias del complejo portuario industrial.

En conclusión si pudiéramos disponer sólo de una fracción de lo que exporta el puerto bahiense podríamos solucionar el problema de pobreza, indigencia, la emergencia alimentaria y los problemas de vivienda de la ciudad.

3. Por un plan de viviendas y obras públicas.

En las últimas semanas los candidatos locales fueron presentando su plan de gobierno. Federico Susbielles se refirió al déficit habitacional y la problemática de acceso a la vivienda en Bahía Blanca, y disparo contra los que tomaron posesión de tierras del estado usando el mecanismo de usucapión, considerando que era un proceso “de alguna manera inmoral”.

El precandidato parece desconocer la situación por la que pasan mas de 13 mil familias bahiense, que producto de la inflación, los bajos salarios, la falta de trabajo y los alquileres por las nubes se ven empujados a tomar posesión de tierras y así poder construir su casa, en condiciones precarias.

Según los indicadores habitacionales del INDEC de 2021, en la ciudad hay 150.503 viviendas particulares. El 20.5%, unas 30.100, carecen de al menos un servicio. Pero las más afectadas son las familias más humildes que viven en las 32 villas y asentamientos precarios donde residen 10.000 familias. Allí el 50% no tiene agua corriente, el 53% no poseen gas y el 91 % ni siquiera tiene cloacas. La precarización de la vida se incrementa en estos asentamientos ya que el 75% no tiene pavimento, el 69% no poseen cordón cuneta y el 78% ni siquiera tienen desagües pluviales. Pero si pudiéramos disponer de una parte de las ganancias del puerto solucionaríamos estos problemas.

Daniela Rodríguez planteaba a este medio que “…solo con el valor de un barco de 50.000 tn de trigo podemos construir 633 viviendas prefabricadas de 46 m2. En un Año podríamos solucionar los problemas habitacionales de la ciudad, para eso necesitamos un programa de viviendas bajo administración de los trabajadores que se financie en base a impuestos progresivos a las grandes empresas, multinacionales y cerealeras…”

4. Por la protección del medioambiente

Mientras que en el modelo de saqueo y extractivismo capitalista la ganancia empresaria está por sobre las necesidades de la mayoría o del cuidado del ambiente, se hace necesario correr el lucro y poner la protección del medioambiente en la ecuación. Las grandes coaliciones del Union por la Patria y Juntos por el Cambio tienen consenso en la profundización del neodesarrollismo extractivista. Los métodos destructivos del medio ambiente, nocivos para la vida humana como fracking o la eliminación de zonas protegidas como los humedales se siguen profundizando y están a la vista de todos.

En Bahía Blanca la ampliación del puerto tiene previsto un daño para la biodiversidad local. Las empresas de Ing. White fueron llevadas a juicio por los pescadores artesanales que vieron afectadas sus fuentes de trabajo por la contaminación producida. Se determinó que los peces del estuario estaban contaminados con metales pesados, altamente tóxicos, que afectan su ciclo vital y declarados no aptos para consumo humano.

Por eso denunciamos la contaminación que sufre la ría bahiense, así como nuestros barrios por el Polo Petroquímico y los Puertos en Bahía Blanca, Galván y Rosales. Proponemos la reconversión productiva con garantía estatal de continuidad laboral-salarial, y control social de trabajadores y comunidades, con asesoramiento de técnicos, y especialistas en materia socioambiental.

5. Reducción de la jornada laboral a 6 horas y 5 días a la semana, sin afectar el salario

Según el informe del departamento de economía IIESS-Conicet-UNS del 2022 en la ciudad hay una fuerza laboral de 80.094 varones y 61.589 mujeres. Unas 12.025 personas (5.089 varones y 6.936 mujeres) están desocupadas. Si se implementara la reducción de la jornada laboral a 6 horas, 5 días a la semana, sin afectar del salario, en las grandes empresas del complejo portuario-industrial bahiense, se podrían generar nuevos puestos laborales con derechos para todos y todas. Así se repartirían esas horas restantes entre aquellos que no han logrado obtener un trabajo y se eliminaría la desocupación de la ciudad.

6. Plan de emergencia contra la violencia de género

Según un informe del Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina del 2017, el 78 % de los femicidios ocurren en una vivienda, donde el 70 % es una vivienda compartida con el agresor. Mas de la mitad, el 53 % lo cometió la pareja o ex pareja. Así la mujer agredida es retenida en su casa porque no tiene a donde ir, es trabajadora precarizada, o no tiene trabajo, tiene a sus hijos a cargo y depende del salario de su agresor.

En 2022, en Bahia Blanca ocurrieron 4 femicidios, a una tasa en relación a la población de 1.20. Mientras la OMS estipula que debería haber un refugio contra la violencia de genero cada 10.000 habitantes, en Bahia Blanca, con 350.000 habitantes, solo hay uno. A todas luces totalmente insuficiente. A nivel nacional se destinan 135 pesos por mujer en situación de violencia, pero localmente se desconoce el presupuesto destinado a esas políticas.

El municipio no tiene política contra la violencia hacia las mujeres, ni siquiera esta en la agenda de JxC y UP. Por eso proponemos un plan de emergencia contra la violencia de género que implique aumentar el presupuesto para la apertura de casas-refugios, con un plan de vivienda a tasa cero para quienes tienen trabajo. Y para quienes no lo tienen exigimos puestos laborales con derechos, licencias laborales, subsidios para poder alquilar y alimentar a sus hijos y equipos interdisciplinarios para la prevención, atención y asistencia a víctimas de violencia de género y sus hijxs.

Las PASO 2023 en Bahía

Este 13 de agosto se definen en las PASO (que incluyen mecanismos proscriptivos para que las fuerzas minoritarias no lleguen a octubre), las candidaturas que van a representar a los distintos frentes electorales... pero en definitiva solo se van a dirimir dos proyectos: el de una minoría capitalista que siempre gana o el de las grandes mayorías empobrecidas.

Es por esto que la lista “Unir y fortalecer a la izquierda” del FITU está repleta de luchadores y referentes de las luchas actuales, para que los puestos o bancas conquistadas se pongan al servicio de las y los trabajadores y así potenciar las luchas que vendrán, como ya lo hicimos en Jujuy.

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La lista está encabezada por Daniela Rodríguez como precandidata a Intendenta, docente, referente del feminismo local, secretaria de DDHH del SUTEBA y dirigente del PTS; Estefania Grosso, docente y delegada de SUTEBA como precandidata a Concejala; Lucas Cuenca, estudiante y trabajador, secretario de DDHH del CEHum, como precandidato a Consejero Escolar; y Clara Aldea, estudiante y consejera del Dpto de Humanidades de la UNS como precandidata a Consejera Escolar.