Ledesma S.A.A.I. inició un juicio para excluir de la protección sindical a un delegado de la Planta de Jugos, bajo el argumento que estaba comiendo una naranja en horario de trabajo. Hace seis meses la justicia de Jujuy confirmó la medida solicitada por la empresa.
Viernes 6 de septiembre de 2019 15:41
El año pasado el emporio de los Blaquier inició un juicio nominado "exclusión de tutela sindical" contra José Solorzano, para explicarlo sencillamente la empresa pretende sacarle la protección que enviste como delegado para poder sancionarlo y abrir la puerta a dejarlo sin trabajo.
La insólita e ilegal causa que alega Ledesma S.A.A.I. es que el 17/03/2018 "fue sorprendido consumiendo una naranja, hecho que configura una falta grave" para luego acusarlo de haber utilizando auriculares en horario laboral. Para la patronal "amerita la aplicación de una sanción disciplinaria, para lo cual es necesario que previamente sea desafectado de la tutela que le otorga la Ley 23551 en virtud del cargo gremial que detenta". Dicha información consta en el Expediente judicial Nº D – 23.238/185 caratulado: “EXCLUSIÓN DE TUTELA SINDICAL / DESAFUERO: LEDESMA S.A.A.I c/ SOLORZANO, LUIS.
Esta persecución viene de una larga data ya que José Solorzano es un reconocido delegado combativo que se encuentra cumpliendo su cuarto mandato consecutivo como delegado del Sindicato de Industrias de la Alimentación de Jujuy, levantando la voz contra los planes antiobreros que viene impulsando la empresa, que ya lleva cientos de despidos en el último año.
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Jugosas ganancias
La fábrica de jugos es una planta del complejo agroindustrial de Ledesma S.A.A.I. en el que invirtieron 8 millones de dólares a fines de 2017, luego de concretar la firma del acuerdo para el suministro de productos derivados de frutos cítricos con la empresa Coca Cola. Lo que le permitió en 2018 incorporar 200 hectáreas con nuevas plantaciones de limón e inauguró una nave industrial con un nuevo sistema para la extracción de aceites. Durante la campaña 2018, la firma produjo un total de 108.548 toneladas de cítricos en las provincias de Jujuy y Salta, donde posee 3.000 hectáreas de plantaciones de frutas. De esta forma el año pasado produjo 3.477 toneladas más que en 2017.
Estos números dan cuenta del nivel de rentabilidad que está teniendo la patronal, y ello explica que pretendan disciplinar bajo estos métodos a cualquier tipo de organización de base.
El año pasado la empresa de los Blaquier decidió avanzar de manera arbitraria sobre los derechos gremiales de este delegado y por medio de su abogado Diego D´Andrea Cornejo promovió un juicio en su contra. De la causa lo único que logró probarse es que el día 17 de marzo de 2018 el Sr. Solorzano se encontraba pelando una naranja.
La justicia de Blaquier
A todas luces surge la grotesca y arbitraria medida adoptada por Ledesma S.A.A.I. por cualquier persona que no tenga conocimiento en derecho laboral. Sin embargo el pasado 19 de marzo del corriente año, el tribunal de San Pedro de la Sala IV del Tribunal del Trabajo de la Provincia de Jujuy con la firma de los jueces Silvia Elena Yecora, Eladio Guesalaga y Gustavo Alberto Toro resolvieron convalidar excluirlo de la tutela gremial y dar vía libre al accionar ilegal del emporio azucarero.
El tribunal no se refirió expresamente a los hechos, ni a los derechos que le asisten a los representantes de trabajadores sino que se limitó a citar dos párrafos de sentencias anteriores del Tribunal Superior de Justicia, manifestando en síntesis, que cuando las empresas "demuestren" indicios para sacarles la protección a los delegados será suficiente para que puedan concretar dicha medida.
Para ver el fallo completo: aquí
La causa ahora se encuentra en manos del Superior Tribunal de Justicia de Jujuy que deberá analizar la arbitrariedad del fallo antes citado. Lo que queda en evidencia es un pisoteo a derechos laborales y sindicales reconocidos no solo por normativa nacional sino internacional que resulta muy peligrosa para los tiempos de ajuste que está atravesando la clase trabajadora y deja a la vista el entramado de un régimen feudal, de una empresa dueña de todo con una justicia que actúa según sus dictámenes.
