Nilda Roldán y María Emilia Eslava son legisladoras de Unión por Córdoba que fueron repudiadas por ganar 98 mil pesos por mes y tener beneficios en las tarifas de la luz a su nombre. Sin embargo, ambas legisladoras se negaron a defender los derechos de las y los trabajadores de EPEC.
Jueves 31 de mayo de 2018 15:54
Nilda Azucena Roldán es legisladora de Unión por Córdoba y ha sido dirigente del Sindicato de Amas de Casa de Córdoba. Responde a la diputada nacional, Alejandra Vigo. Todos los meses embolsa 98 mil pesos de dieta como legisladora provincial de Unión por Córdoba (UPC).
Según denunció el portal En Redacción, tiene una cuenta de luz con tarifa social a su nombre en la Empresa Provincial de Energía (EPEC). En la factura que vence mañana 1 de junio, correspondiente al período de abril 2018, el monto a pagar es de 171,40 pesos. Su caso no encuadra en ninguno de los supuestos para recibir este beneficio, que está dirigido a trabajadores o trabajadoras que perciban hasta dos salarios Mínimos, Vitales y Móviles, esto es 19.000 pesos por mes, según el valor que tendrá hasta el mes de julio.
Dicho portal pudo revisar los consumos mensuales asociados a esos datos, que aparecen en la Web de EPEC y que corroboran que está inscripta como beneficiaria de la Tarifa Social. La cuenta de la legisladora indica consumos de 200 Kw/h en el período de abril 2018; 193 en marzo 2018; y 207 en febrero de 2018. Mientras que desde julio de 2017 hasta enero de 2018 el consumo fue inferior a los 150Kw/h que establece la reglamentación de este beneficio.
No conforme con esta situación de privilegio, la legisladora Roldán tiene una deuda con la Empresa Provincial de Energía de Córdoba de 5 mil pesos que data desde el año 1997.
Parece que éste modo de vida del que hace uso la legisladora de Unión por Córdoba no le afectó a la hora de votar en contra de los derechos de las y los trabajadores de EPEC cuando el pasado miércoles 23 de mayo se aprobó en la legislatura provincial dos proyectos enviados por el ejecutivo.
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La legisladora del PTS/FIT repudió esta situación: "Es un escándalo que una legisladora que cobra casi 100 mil pesos por mes mantenga a su nombre una tarifa social a la que no renunció en ningún momento desde que asumió su cargo en la unicameral. No parece importarle que ésta tarifa social supuestamente era para las y los más desprotegidos, para quienes Unión por Córdoba durante 20 años ha dejado debajo de la línea de pobreza. Ella se sigue aprovechando de sus beneficios, como está acostumbrado su partido: hacer uso de los recursos del Estado".
Legisladora y extrabajadora de EPEC fue repudiada por Luz y Fuerza
María Emilia Eslava también es legisladora de Unión por Córdoba y pese a su importante dieta y ser trabajadora de EPEC, fue repudiada por Luz y Fuerza porque "usufructa la tarifa de empleado" y por abstenerse de votar en contra de las leyes que violan el Convenio Colectivo de Trabajado de las y los trabajadores de la energía.
Eslava asumió en la legislatura en marzo de 2017 en reemplazo de Walter Solusoia. Ella proviene de una familia históricamente ligada a Unión por Córdoba: su padre es intendente de San Francisco del Chañar; su tío, Gustavo Eslava, es legislador por UpC por Río Seco; mientras su tía, Gabriela Eslava, es jueza de Familia de 6° Nominación de la ciudad de Córdoba. Una familia claramente ligada al poder ejecutivo provincial
El motivo del repudio a esta legisladora es que pese a su importante sueldo y que esté de licencia en EPEC, se abstuvo de votar en contra el ataque a las y los trabajadores y, encima, ella sigue accediendo a los derechos conquistados por las y los trabajadores de la energía.
