El Banco Central Europeo sale al rescate de la zona con un plan de compra de 750.000 millones para salvar al Euro de la crisis del coronavirus.
Jueves 19 de marzo de 2020
La pasada medianoche, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, anunciaba lo que muchas han calificado de bomba o de órdago. Se trata del mayor estímulo económico global a nivel europea desde la crisis de 2008. Para dar una idea su magnitud, la cifra equivale a casi tres cuartas partes del producto interior bruto de España.
En una reunión de urgencia de su consejo de dirección, el banco aprobaba un plan de compra de 750.000 millones de euros en activos públicos y privados. Con esta esta lluvia de millones se quiere asegurar a los gobiernos financiación para sus planes de estímulo, como el español de más 100.00 millones de euro de dinero público. Además también pretende bajar las primas de riesgo. Estas, especialmente las de los países del Sur (Estado español, Italia o Grecia) llevan días subiendo sin parar, y esto hizo que muchos ya vieran el fantasma de 2011, cuando se dispararon sin control y hubo que hacer varios rescates financieros a esos países. Con estas medidas se quiere evitar esta situación límite.
La idea es clara, hay que hacer todo lo posible para salvar el euro. El propio comunicado emitido por el BCE anunciado la decisión lo deja claro: “El consejo de gobierno asegura que hará todo lo necesario dentro de su mandato y que está totalmente preparado para aumentar el tamaño de sus programas de compra de activos y ajustar su composición, tanto como sea necesario y durante el tiempo que sea necesario”. Al igual que en los tiempos de la crisis del euro, el BCE sale al rescate.
Como afirma un economista en el diario El País: “El sentido económico de estas operaciones consiste en intentar seguir alimentando el acceso al crédito por parte de familias y empresas de cara a favorecer consumo e inversión. O sea, crédito barato y tipos artificialmente bajos para seguir dopando a la economía europea”.
¿Millones para la clase trabajadora o para la Patronal y la Banca?
Por mucho, que este organismo diga que: “Se asegurará de que todos los sectores de la economía puedan beneficiarse de condiciones financieras favorables que les permitan absorber este shock. Esto se aplica igualmente a las familias, empresas, bancos y Gobiernos”, la experiencia nos dice que la realidad será muy diferente.
Como siempre bajo el capitalismo, el gran beneficiario de esta medida serán son los aparatos estales de cada país y sobre todo y el sistema financiero, es decir patronal y banca, que, aunque en manos privadas, siempre recurren a “Papa Estado” cuando se encentran en dificultades.
Por un lado el gran capital financiero, obtiene un prestamista de última instancia que le convierte en un archiprivilegiado. Por otro lado, los Estados consiguen, capacidad de financiarse de forma realmente barata. El binomio capital financiero-aparatos estatales, es el gran favorecido por sus propias decisiones políticas. Nada nuevo bajo el sol.
Esto es una cosa intrínseca del capitalismo. La única forma que tiene de seguir existiendo es atreves de un constante proceso de proceso de acumulación de capital. Por ello, cuando se produce una bajada de producción y del consumo evidente, como la actual por esta pandemia, necesita seguir con su tasa de ganancia. Para ello recurre a las ayuda y dinero público, a costa de endeudad más a los estados, como en 2008, y que estos luego hagan recortes sociales brutales para pagar esta deuda. Y también, como ya se está viendo con la oleada de despidos o ERTEs que está habiendo, a “apretar” cada vez más a la clase trabajadora, reduciendo nuestras condiciones laborales y salariales.
Con estas medidas vemos claramente como este sistema, es un sistema hecho por ricos y para ricos. Por ello hoy más que nunca es necesario levantar con más fuerza que nunca la hipótesis estratégica de lucha por una salida revolucionaria a esta nueva crisis capitalista.