El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, decidió suspender hasta el 2016 la cancha de Laferrere debido a los graves incidentes ocurridos tras la suspensión del partido ante Dock Sud este lunes.
Jueves 5 de marzo de 2015
La excusa para semejante decisión fue el nivel de violencia que tuvo el conflicto. Dijo Scioli “No sólo agredieron brutalmente a nuestra Policía, sino que también han generado gran cantidad de daños a los vecinos trabajadores del barrio, destruyendo autos, vidrios y todo lo que ustedes pudieron observar”. Al parecer luego de que el gobernador se reuniera con el secretario de Seguridad Alejandro “Mataguachos” Granados decidió que los hinchas “Verdes” debían recibir un "castigo ejemplar".
Podríamos “creer” que si los aledaños a la cancha de Laferrere hubiesen seguido el consejo del Sheriff Granados de que "todos los vecinos deben tener un arma en su casa" el desastre hubiese sido peor. Lo cierto es que los verdaderos hinchas del club no podrán ir a la cancha por lo que resta del año.
Tal vez a Scioli le vendría bien asesorase sobre el tema de seguridad y barrabravas no con su secretario de seguridad sino con el cuñado Daniel Visconti (líder de la barra de Ferrocarril Oeste) que al parecer sabe mucho del tema o con su hijo Gastón "El Gato" Granados, actual Presidente de Tristán Suárez, club de Ezeiza, el distrito que gestionaba su padre como Intendente.
Lo cierto es que esta suspensión tiene toda la pinta de un castigo político por parte del Frente Para la Victoria hacia el Club debido a sus vínculos con el Frente Renovador de Massa, como denuncié en esta nota. El vinculo entre “Lafe” y el FR se materializó abiertamente cuando aparecieron los nuevos sponsors del club. Debajo del logo del Bingo Mirador aparece la sigla del Sindicato de Empleados y Obreros de Comercio y Afines: SEOCA. Su secretario general es Julio Rubén Ledesma, quien empapeló la ruta con su foto sonriente en los carteles que promocionan la candidatura a presidente de Sergio Massa por el Frente Renovador. Ledesma es candidato a intendente de La Matanza por el mismo espacio.
Resumiendo: castigar al Club Deportivo Laferrere es castigar al massismo por atreverse a intentar hacer pie en La Matanza, principal bastión político del FPV, que aprovechó el momento luego de los graves incidentes ocurridos esta semana. Lejos de querer enfrentar seriamente a los barras, los Scioli y los Massa los necesitan para sus campañas electorales, para sus disputas territoriales, para apretar a los trabajadores cuando se organizan. Esta semana, de este año electoral que recién comienza, sólo vimos un capítulo más de una larga historia de mafias que combinan futbol y política, y que seguramente van empeorar con el correr del año.