La diputada nacional defendió desde su cuenta de Twitter al funcionario. Un informa de Jorge Lanata lo muestra como el mayor accionista de la cadena de farmacias.
Lunes 21 de mayo de 2018
Elisa Carrió solía presentarse a sí misma como una especie de “guardiana” de la moral y la república. De eso no se acuerda nadie ya. Por estas horas la diputada nacional del oficialismo ya solo se dedica a defender las causas más antipopulares.
Así se vio en diciembre pasado, cuando bancó la reaccionaria reforma previsional que hundía los ingresos de los jubilados. Hace pocas semanas, aunque se ausentó a la hora de la votación, Carrió estuvo entre quienes criticaron los proyectos opositores que pretendían limitar el tarifazo oficial.
Este lunes la diputada salió en defensa de Mario Quintana. El vicejefe de Gabinete nacional había sido denunciado el domingo por la noche en el programa de Jorge Lanata.
En la primera emisión una nueva temporada de PPT, se señaló que Quintana poseía el control de la cadena Farmacity. Aunque el funcionario formalmente es el titular de cerca de un 3 % del total de las acciones, estas le permiten controlar el 53 % del capital de la cadena. Desde ese punto de vista tiene injerencia en el funcionamiento de la empresa.
Carrió hizo una defensa elíptica. En su cuenta de Twitter escribió a favor de la jefatura de Gabinete por “haber bajado los medicamentos en el PAMI”.
“Mi mayor respaldo a quienes se jugaron contra los laboratorios para que podamos tener una salud más barata”, agregó la legisladora en obvia referencia al espacio estatal en el que se encuentra el dueño de Farmacity.
Los cuestionamientos a Quintana se dan en el marco de que la empresa que controla se halla en el centro de una tormenta judicial. La misma Corte Suprema deberá fallar en relación a si puede radicarse o no en la provincia de Buenos Aires. Hasta el momento, por un fallo de la Justicia Bonaerense de lo prohíbe.
La denuncia de Lanata contra Quintana no hace más que volver a confirmar el mote de CEOcracia. La acusación se suma a las que ya revisten por múltiples negociados contra otros funcionarios del gabinete nacional como Luis Caputo (Finanzas) o Juan José Aranguren (Minería).
Con su defensa Carrió solo demuestra de que “guardia de la moral” pasó a ser la abogada directa de los grandes empresarios que gestionan actualmente el Estado argentino.