×
×
Red Internacional
lid bot

Corrientes. No es una tragedia natural. Las inundaciones en Corrientes dejan miles de familias afectadas.

El evento meteorológico provocó indundaciones, personas autoevacuadas y destrozos. Vecinos de barrios como La Olla y Sol de Mayo de la capital correntina se encuentran dentro de los más afectados. El temporal dejó al desnudo la precariedad en la que viven las familias.

Domingo 3 de marzo 14:19

Escuchá esta nota

Como denuncian desde el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CEPRODH) las consecuencias de las tormentas de la madrugada del domingo nada tiene que ver con una tragedia natural o algo imprevisible. Es el resultado de obras no realizadas por el Estado, y de un modelo productivo que ha devastado los recursos naturales con desmontes, represas, avances del monocultivo y del negocio inmobiliario.

Con más de 200 milímetros de lluvia caída hasta las 9 de la mañana y ráfagas de viento que alcanzaron los 140 kilómetros por hora causó el colapso de los sistemas de desagües, anegamiento e inundaciones, cortes de luz, el gobierno provincial anunció la suspensión de clases en todas las escuelas de gestión pública y privada, según informan los medios locales. Muchas familias hacen filas frente a las escuelas buscando un lugar para resguardarse.

Los empresarios inmobiliarios, del agronegocio y de la industrial forestal, en complicidad con los distintos gobiernos vienen amasando fortunas a costa de un gran daño ambiental que paga el pueblo trabajador con su propia vida, sus hogares y con lo poco que consiguieron tener.

Lo urgente para las familias es la necesidad de exigir al Gobierno nacional y provincial que brinden asistencia sin demora a los miles de afectados por las inundaciones. Las consecuencias que sufre la población de menos recursos por las obras no realizadas tienen un solo responsable: el Estado.