Crimen De Estado. Nuevas pruebas confirman espionaje ilegal del Estado a la familia de Santiago Maldonado

A tres años de la desaparición de Santiago Maldonado tuvo lugar una nueva presentación por parte de la querella que encabeza la diputada del PTS en el Frente de Izquierda, Myriam Bregman ante el Juzgado Federal 3 de Daniel Rafecas. Allí se investiga el espionaje de Gendarmería y funcionarios del Ministerio de Seguridad bajo la gestión de Patricia Bullrich contra la familia de Santiago Maldonado, organismos de derechos humanos y comunidades mapuches.

Bregman, junto al abogado Matías Aufieri del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH), pidieron que se investigue a quienes espiaban a Sergio Maldonado en hoteles de la Ciudad de Buenos Aires y de Esquel (Chubut).

También solicitaron que el Ministerio de Seguridad entregue toda la información existente sobre el accionar del Centro de Reunión de Información de Gendarmería Nacional de la provincia de Neuquén. Se ha confirmado que integrantes de esa dependencia y desde equipos telefónicos pertenecientes a esa fuerza federal transmitían información obtenida ilegalmente de la familia de Santiago y de organismos de derechos humanos.

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La causa judicial se inició en octubre de 2017, ocasión en que trascendieron numerosos chats entre personal de Gendarmería, los cuales evidenciaron actividades de inteligencia sobre la familia de Santiago y organizaciones como la de la propia querella, que reclamaban por la aparición con vida del joven desaparecido en el marco de una protesta de la comunidad mapuche en la localidad chubutense de Cushamen, sobre la ruta nacional 40.

La nueva presentación ante el juez Rafecas exige información a distintas dependencias del Estado sobre las personas que realizaron tareas de seguimiento a Sergio Maldonado desde habitaciones contiguas a la suya en un hotel, tras un acto en Plaza de Mayo en que éste fuera orador principal del reclamo por la aparición con vida de su hermano.

Vale recordar que en mayo de 2019 Sergio declaró ante Rafecas haber sido mandado a espiar también en la ciudad de Esquel, incluso con la utilización de menores de edad, en hoteles en que se hospedaba mientras seguía la causa judicial en que se investigaba la desaparición de su hermano.

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En el pasado mes de junio se confirmó la pertenencia al Edificio Centinela (jefatura de Gendarmería Nacional) de uno de los celulares que enviaban numerosos datos sobre aquellos que reclamaban por la aparición del artesano y sobre el curso mismo de la investigación judicial.

Toda esa información era producida y enviada ilegalmente a comandantes de esa fuerza situados en la zona de desaparición de Santiago. La información era recopilada por el Centro de Reunión de Información (CRI) de Gendarmería asentado en Neuquén, durante los meses en que esa fuerza se encontraba separada de la investigación en el caso Maldonado. Más aún, muchos de sus miembros estaban investigados en dicho contexto. Por tal motivo, la querella de Bregman solicita ahora toda la información sobre el accionar de esa área.

Consultada por este diario, Myriam Bregman señaló que “al espionaje ilegal por parte del Estado se lo investiga en serio, se lo juzga y se lo castiga. No caben otras variantes. Menos aún ante el accionar sistemático y descarado de los últimos años que cada vez sale más a la luz. La impunidad sólo trae más impunidad. Y a tres años de la desaparición de Santiago, más que nunca exigimos respuestas a los distintos poderes del Estado”.

Por su parte el doctor Aufieri destacó que “gran parte de esto ya está acreditado, no está en discusión. Sólo resta acelerar y que cada responsable brinde explicaciones. Al igual que la familia de Santiago, consideramos que no pueden pasar más tiempo impunes”.

El CeProDH, como parte de la querella, afirma que “hay muchas pruebas contundentes, datos duros, que no dejan dudas del espionaje impulsado desde el Ministerio de Seguridad de Bullrich, la cúpula de Gendarmería, y los propios escuadrones regionales que actuaron en la represión que terminó con Santiago desaparecido”.

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