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Red Internacional
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Genocidio e impunidad. Nuevo escrache a Etchecolatz en Mar del Plata

La Poderosa, organización que nuclea a barrios y villas de todo el país, se concentró frente a la casa del genocida en el Bosque Peralta Ramos.

Martes 20 de febrero de 2018

La Poderosa, organismos de derechos humanos y vecinos de Mar del Plata realizaron este lunes un escrache frente a la casa de Miguel Etchecolatz ubicada en el Bosque Peralta Ramos, donde el viejo genocida cumple su prisión domiciliaria desde el 29 de diciembre.

Como parte de la actividad, los participantes (llegados de diferentes ciudades del país) jugaron un torneo de fútbol denominado “Chicha Mariani”, en homenaje a la fundadora de las Abuelas de Plaza de Mayo que todavía busca a su nieta Clara Anahí Mariani, desaparecida el 24 de noviembre de 1976 en La Plata a manos de un grupo de tareas dirigido por Etchecolatz.

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Nacho Levy, uno de los referentes de La Garganta Poderosa y miembro de uno de los 79 barrios que participaron de un foro nacional en Tandil durante el fin de semana, conversó en las puertas de la casa de Miguel Etchecolatz con La Izquierda Diario.

“Estamos acá, frente a la casa de este genocida, por dos razones fundamentales. Primero porque estamos buscando a Clara Anahí, la nieta de Chicha Mariani, y segundo porque Julio López no pudo venir. Acá nos acompañan las Madres de Plaza de Mayo, la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos, el hermano de Rafael Nahuel, Pablo y muchos más”, dijo Levy.

El referente destacó que todos los años realizan “un foro nacional, un fin de semana nos juntamos los compañeros de las asambleas de todo el país, desde Tierra del Fuego hasta La Quiaca. Somos un movimiento de base, sin apoyo comercial de ningún tipo, todo lo hacemos desde la autogestión. Estuvimos tres días aprovechando al máximo el tiempo, haciendo un balance del año que pasó”.

Sobre el contexto en el que realizaron el escrache a Etchecolatz, Levy dijo que desde La Garganta Poderosa no reivindican “a nuestros 30 mil desaparecidos sólo por su condición de desaparecidos, sino porque muchos de ellos fueron iniciadores de muchas de las causas que hoy continuamos. Por eso hoy vinimos acá, para poner de relieve esa continuación histórica que hoy tiene a Etchecolatz adentro de su casa pero no lo tiene libre, algo que para él debe ser terrible”.

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Levy agregó que “la escalada represiva de este Gobierno podría pensarse que se inició en un ataque a dos de nuestros compañeros, Iván y Ezequiel, torturados por la Prefectura en la Villa 21-24 con prácticas típicas de las que uno leyó en el Nunca Más. Y esas prácticas no son aisladas. Las estadísticas de Correpi dicen que tenemos un caso de gatillo fácil cada 23 horas aunque no los tengamos en los noticieros ni cada 23 días. El control popular de las fuerzas de seguridad que nosotros ejercemos en nuestros barrios (que este año nos puso de cara al Comite de los Derechos del Niño de la ONU) llegó a registrar más de mil irregularidades de la fuerza en un solo mes”.

El referente de La Garganta Poderosa destacó, en ese sentido, el sistema de “control popular de las fuerzas de seguridad” que impulsan en los barrios donde se organizan. “Consiste en comisiones de vecinos propuestos por los propios vecinos, que registran denuncias de irregularidades de las fuerzas de seguridad en coordinación con la Procuraduría contra la Violencia Institucional, con el CELS y otros organismos de derechos humanos, sin pasar por las comisarías y los destacamentos policiales, que son los que administran el delito adentro de nuestro barrio”.

Por último Levy recordó que ellos no empezaron “a denunciar a las fuerzas de seguridad con el cambio de gobierno. A mi ahijado lo mataron en septiembre de 2013. Siempre marchamos al Ministerio de Seguridad denunciando que esas fuerzas de seguridad tenían carta blanca para actuar en los barrios. Ahora directamente hay una bajada de línea, un protocolo de la ilegalidad, un mandato que dice que tienen que ejercer en el territorio la mano dura que no pueden sacar desde el Congreso. Ellos creen ideológicamente en el terror, en el boca a boca de los pibes que son sometidos a torturas”.

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