El Gobierno y su GPS para la segunda ronda electoral. Los problemas estructurales no se resuelven con el resultado de las PASO. Una elección histórica para la izquierda trotskista y la necesidad de definir bien al fenómeno a la derecha, de la nueva derecha.
Martes 14 de septiembre de 2021 15:18
🖋️ EDITORIAL | PASO a la izquierda | Análisis de la gran elección del Frente de Izquierda Unidad - YouTube
En el análisis de la derrota del gobierno en las PASO, entran elementos económicos y también un descontento que incluye otros aspectos cómo los goles en contra el Vacunatorio Vip o el Olivos Gate
En el terreno económico, hay declaraciones de personajes del gobierno que aparecen cómo una confirmación ultra distorsionada de ese problema, ubicados entre el cinismo y el humor cómo Hugo Yasky.
El resultado de las PASO no resuelve para nada las necesidades mñas profundas de orientar a la argentina dependiente y con rasgos semi coloniales en uno u otro sentido.
Eso implica que las tendencias más generales que pujan por imponer su política, se mantienen. La elección que además es una PASO, no las termina de resolver ni mucho menos, incluso puede profundizar algunas contradicciones.
Con matices y respondiendo a distintas fracciones de clase de los dueños del país, las dos principales coaliciones, con estos resultados en la mano, tienen un punto de fuga común que es orientar el país cerrando con el FMI.
En la coyuntura, eso puede ser mas problemático para el oficialismo, ya que tiene que ir en búsqueda de esos acuerdos que son en parte explicación de lo que HOY está generando descontento, que es el fuerte estancamiento y desazón económica y social de todo un sector que los había votado para hacer algo distinto a la receta macrista.
Luego del desastre del macrismo, la oposición de derecha capitaliza una parte del descontento con un gobierno que había asumido, en la elección 2019 fundamentalmente acompaña de una gran expectativa respecto a la posibilidad de dejar atrás aquellos olvidables 4 años gobernados por un gobierno de CEOs.
Esto aplica incluso para el históricamente cascoteado Partido Radical que en la interna de juntos logra una interna con varios distritos ubicándose sobre la otra lista, por ejemplo en el interior de la PBA, en Jujuy y en Mendoza.
Uno de los temas a mirar con más precisión es el voto que se ubica a la derecha de la coalición de Juntos. Tiene un elemento de un espacio de derecha radicalizada en el discurso, fundamentalmente proveniente de sectores medios.
Las fuerzas a la derecha de la derecha de JUNTOS sacan 250 mil votos, FIT-U supera el millón de votos.
Acá hay que destacar para cualquier distraído que siempre tiene a mano en las discusiones el argumento del cero coma.
En CABA la mejor elección desde que existe el FIT superando el 6% de los votos
En PBA, con elecciones muy importantes en algunos distritos con fuerte composición obrera cómo la matanza o merlo superando los 8%:
Jujuy arriba del 23%
Neuquén casi 8% de los votos
Chubut casi el 10%
En este marco es que hay que definir el fenómeno que aparece a la derecha de la nueva derecha del PRO/Cambiemos hay que mirar especialmente CABA, ya que cómo veíamos no es un fenómeno de alcance nacional.
El voto a Milei tiene algunas características. Mas que un fenómeno militante es un fenómeno mediático (esto se expresó en la falta de fiscales) que radicaliza a un sector de desencantados con la derecha realmente existente o que no encuentra representación en esa derecha . Los otros desencantados del otro lado de la grieta.
Según leía en el Newsletter de Cenital con el análisis de la elección, si se toma la historia del liberalismo, la votación más alta lograda fue por la Alianza de Centro, liderada por la Unión de Centro Democrático (UCeDé) y Álvaro Alsogaray, en 1989 con el 22%. y plantea una definición, Milei es un personaje nuevo, el voto liberal en la ciudad de buenos aires no lo es tanto.
Un primer paso para no entrar en el juego del miedo, es definirlo con precisión. Sin exageraciones que lo emparentan con un fascismo del Siglo XX es importante también para definir sus alcances, es cierto que es un voto a una variante de derecha radicalizada en el discurso, pero un limite, no tienen el poder de fuego, ni el apoyo y la promoción de los principales sector de la burguesía ni transnacional ni nacional para aplastar las organizaciones de la clase trabajadora, cuestión fundamental para definir al fascismo cómo fenómeno.
Hay que tener cuidado con las interpretaciones que a estas derechas se las combate en una “repetición permanente” de las mismas recetas que justamente dejan crecer a estos fenómenos.
Pero esto aplica también para la nueva derecha de Cambiemos. Porque no creo que nadie se crea ya que hay grandes propuestas alternativas por parte de los que ahora nos van a intentar convencer que hay que fortalecer al Frente de Todos una vez mas para que NO se fortalezca la derecha.
En lugar de volver a probar con lo mismo, se le podría tomar la palabra a Alberto Fernández y salir a militar y a convencer que para resolver los problemas que se colaron en las urnas, y que le dieron un cachetazo de realidad a un oficialismo que venía mirando otra película hay que tomar estas PASO cómo un piso para los grandes desafíos que se le plantean a una izquierda de los trabajadores que será más que necesaria, imprescindible para los tiempos que se vienen.
Leo Améndola
Trabaja en el MTEySS y es delegado de ATE-Trabajo. Miembro de Izquierda Diario y militante del PTS