El giro discursivo conservador de Bergoglio sumó un nuevo capítulo en la visita del Papa a la ex república soviética de Georgia. Cargó contra la teoría de género y el divorcio a los que calificó como “colonización ideológica”.
Martes 4 de octubre de 2016 00:01
Lejos quedaron las ilusiones del giro “progresista” que el Papa Francisco parecía, o al menos así se lo quiso ver, traer en su jefatura al frente del Vaticano. Es que los principios de Bergoglio nunca fueron distintos a los que tenía antes de ser Papa cuando declaró la “guerra santa” contra el matrimonio igualitario en su gestión frente al Arzobispado de la Ciudad de Buenos Aires.
Esta semana su “guerra santa” sumo un nuevo capítulo. En su visita a Georgia Bergoglio alertó sobre una “guerra total” contra el matrimonio tradicional y la familia donde las principales “armas de ataque” son la “colonización ideológica” del divorcio y la teoría de género.
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El Papa viene insistiendo con la idea de “colonización ideológica”, detrás del cual se escondería el lobby de los países ricos para intercambiar ayuda a cambio de legislaciones a favor del matrimonio igualitario o políticas de salud reproductiva. Gays, lesbianas, transexuales y divorciados serían la amenaza externa que corroe el orden y el mandato natural.
A pesar de que muchísimos sectores políticos quisieron ver en Bergoglio y su gestualidad una nueva etapa renovadora de la Iglesia Católica, el compromiso del Vaticano con el patriarcado y sus instituciones se mantiene intacto. Al igual que en Argentina, Bergoglio manifestó su apoyo abierto a la “Marcha por la Familia” en México, que reunió a los opositores contra el matrimonio igualitario en ese país.
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Este tipo de discursos, además de su absoluto anacronismo con la realidad donde el modelo de familia nuclear, monogámica y heterosexual dejó de ser la opción para millones de personas, concentran no solo una enorme carga de oscurantismo, sino también alimentan la discriminación y la estigmatización contra la diversidad sexual, las mujeres que se apartan de la maternidad obligatoria y hasta los divorciados.
Rodrigo López
Nació en Rosario en 1989. Es licenciado en Historia de la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario.