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Red Internacional
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Santa Fe. Para el Gobierno “no es alarmante” la contaminación con glifosato del río Paraná

La cuenca del río Paraná está altamente contaminada con el herbicida glifosato según una investigación del Conicet. Para Gestión Ambiental de Santa Fe el nivel hallado "no es alarmante".

Viernes 22 de julio de 2016 09:30

Una investigación de científicos del Conicet, publicada por la revista internacional Environmental Monitoring and Assessment, reveló que la cuenta del río Paraná está altamente contaminada con glifosato o AMPA, su degradación (metabolito).

El trabajo, firmado por Alicia Ronco, Damián Marino y otros investigadores del Conicet, plantea que la contaminación tiene su origen en los afluentes del Paraná que pasan por zonas donde se practica una agricultura intensiva, combinando semillas transgénicas, agroquímicos y siembra directa.

El estudio arrojó que la contaminación más alta de glifosato corresponde al río Luján. También los resultados fueron alarmantes en los tramos del Paraná que comprenden a las provincias de Santa Fe y Entre Ríos, siendo esto es consecuencia directa de las actividades agrícolas que se realizan en toda esa área del país.

Para el gobierno, “no es alarmante”

Diversas organizaciones ecologistas se hicieron eco de este estudio para exigir que se estudie la presencia de este herbicida en el agua potable. Recordemos que, según estudios recopilados por la Organización Mundial de la Salud, el glifosato tiene una alta probabilidad de generar cuatro tipos de cáncer: Hepático, Páncreas, Riñón y Linfoma. Además, un informe elaborado por Greenpeace Argentina explica que los impactos en la salud incluyen malformaciones congénitas y efectos neurológicos (posiblemente vinculados al mal de Parkinson), así como intoxicación severa con peligro de muerte cuando se trata de una exposición directa al herbicida por medio de fumigaciones.

Sin embargo, el Subsecretario de Gestión Ambiental del Gobierno de Santa Fe indicó que los niveles de glifosato hallados por el estudio del Conicet “no son alarmantes”. Contradictoriamente el funcionario, llamado Edgardo Seguro, afirma no haber leído el informe aún, pero, por si acaso, sale en defensa de los grandes empresarios del agro, responsables de la degradación del medioambiente y la salud de la población.