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Red Internacional
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Judiciales Bonaerenses. Peritos y técnicos: un ejemplo de organización desde abajo para la lucha

Al igual que el resto de las y los trabajadores de la provincia, los judiciales venimos perdiendo poder adquisitivo, recibiendo aumentos salariales insuficientes por debajo de la inflación y anuncios incumplidos. En dicho contexto, las y los peritos nos auto convocamos para exigir al gremio medidas ante la falta de cumplimiento de un reclamo histórico

Sábado 16 de marzo 12:49

Tal como sucede con el resto de las y los trabajadores de la Provincia, el salario de los judiciales viene perdiendo mes a mes frente a la inflación, mientras nuestro gremio, la Asociación Judicial Bonaerense (AJB-CTA), acepta las propuestas del gobierno sin ni siquiera contraponer ofertas ni plantear medidas de lucha para defender el poder adquisitivo de trabajadores que cobran por debajo de la línea de pobreza.

Frente a la última oferta, en muchas asambleas departamentales se expresó claramente el descontento y lo insuficiente de dicha propuesta, en una coyuntura general de incertidumbre, con aumentos de servicios, transporte y alimentos en general. El costo de vida no da respiro, y las/los trabajadoras/es lo sabemos.
En ese contexto, un conflicto que ha cobrado relevancia los últimos tiempos es aquel atravesado por el sector de Peritos y Técnicos.

¿Cómo surgen los Peritos y técnicos autoconvocados?

En respuesta a un reclamo histórico, en relación al pago del bloqueo y/o semi bloqueo, con equiparación al sector de los compañeros abogados, a fines del año pasado la AJB anunció que el gobierno provincial otorgaría un reconocimiento al sector de peritos, el pago de una bonificación por título del 15%, a cobrar a partir del pasado mes de febrero.

Si bien no respondía a la demanda del sector, esperábamos el cumplimiento del anuncio, en el marco de continuar con la organización por nuestras demandas. Sin embargo, el depósito nunca se hizo efectivo.

A partir de allí, comenzaron a reclamarse al gremio medidas y respuestas que no llegaban. Una de las cuestiones que solicitamos era conocer las resoluciones que disponían el reconocimiento, cuestión una y mil veces exigida a la AJB. Las y los peritas/os comenzamos a organizarnos de manera autoconvocada, con asambleas provinciales resolutivas y llevamos nuestras demandas al sindicato. La respuesta de la Comisión Directiva de AJB fue rechazar la existencia de dicho espacio. Ha convocado a reuniones de Comisión, por presión del sector, sin aceptar que las mismas tengan carácter de asamblea resolutiva.

Desde La Marrón somos parte de este espacio autoconvocado desde el primer día, y lo alentamos como una experiencia democrática dentro de un sindicato que cada vez está más vaciado de participación.

Luego de una asamblea donde se trató el tema salarial de conjunto y también nuestro reclamo, se dispuso la medida de retención de firmas el pasado 28 de febrero propuesta por la conducción, resolución que no era la que los compañeros del agrupamiento defendíamos e impulsábamos. A pesar de imponer medidas que no eran las que votamos quienes venimos sosteniendo el reclamo, como autoconvocados definimos darle visibilidad y llenar de contenido la medida, con cartelazos, fotos y asambleas.

Finalmente, tras nueva reunión de negociación con el gobierno provincial por parte de la AJB, tuvimos el anuncio del 15% en tres pagos remunerativos (5% en marzo, un 5% en mayo y 5% en septiembre) para Peritos y Técnicos de Corte y Procuración del Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires, pertenecientes a los grupos IV y V.

El malestar y el enojo se expresó rápidamente en diversos grupos que nuclean a peritos y técnicos, y en la última reunión provincial. El motivo es claro: nuestro sindicato se sentó en una mesa de negociación, y aceptó una oferta alejada de la que exigimos, sin consultarnos, anunciándola (como tantas veces) como un logro histórico, y desconociendo nuestro mandato.

Seguimos organizándonos. Cada paso en este conflicto es fruto de nuestra pelea encontrándonos en espacios democráticos donde discutimos nuestras reivindicaciones, y votamos resoluciones. En dicha perspectiva seguiremos.

Nuestra organización no es solo por el 15% adeudado, es también por nuestras condiciones laborales, por las demandas de todos nuestros compañeros judiciales, y por la exigencia elemental de un gremio democrático y de lucha.

Un debate sobre el rol del sindicato

Durante este conflicto, tuvimos muchos debates. Algunas compañeras y compañeros opinaban que nuestro reclamo, por un reconocimiento propio del sector, era una demanda corporativa en el medio que como trabajadores venimos sufriendo un ataque generalizado por parte del gobierno nacional. Por eso opinaban que había que aceptar lo que el gobierno provincial ofrezca, sin alentar una lucha seria contra Kiciloff, que podría capitalizar el gobierno de Milei y sus aliados de derecha en la provincia. Por el contrario, nosotros defendemos que como trabajadores el único compromiso que tenemos es con nuestros propios compañeros, con nuestras familias. Somos nosotros los que venimos sufriendo las consecuencias del ajuste y toda conquista que podamos conseguir tiene que ser un punto de apoyo para alentar la confianza a ir por todos nuestros derechos.

El argumento de no reclamarle al gobierno provincial es el que vienen sosteniendo las conducciones sindicales de ATE, SUTEBA, la AJB y otras, mientras en la provincia los trabajadores venimos perdiendo con la inflación, hay contratos que no se renuevan y sigue la precarización laboral. Sólo la lucha independiente de todos los gobiernos es la que puede permitirnos enfrentar a la derecha y no dejar pasar ningún ajuste sobre los trabajadores.

Lejos de ser un ataque al sindicato, si hay algo que aportamos con nuestra lucha es a alentar a la participación, al debate y a ser parte de las medidas de lucha. Eso sólo puede fortalecer a la organización sindical. Por el contrario, desde la conducción de la AJB se esfuerzan en sostener todos los reclamos por separado (el de peritos, el del sector de mandamientos, el salarial, etc.), vaciando de participación el gremio. Sostener luego en asambleas minoritarias que no hay fuerzas para luchar por más, es parte de una profecía autocumplida.

Contra el ajuste del gobierno nacional y las provincias, la clave es la unidad de las y los trabajadores

El gobierno nacional de Javier Milei ataca de conjunto al pueblo trabajador. Con la palmada del FMI, vienen imponiéndose recortes y despidos a todo el pueblo trabajador. Parece que la casta éramos los trabajadores y los jubilados.

Todos los gobernadores vienen aplicando un ajuste en sus provincias, garantizando que los grandes empresarios y dueños de las tierras ganen fortunas. Inclusive Axel Kicillof, eligen recortar con los trabajadores. con la imposición de paritarias a la baja en toda la administración provincial, con la anuencia de los gremios, y las amenazas de despidos.

En Buenos Aires, se vienen de pagar 360 millones de dólares en concepto de pago de intereses de deuda, mientras la salud, la educación y los salarios retrocedieron cómo nunca antes y se mantiene una estructura impositiva que es regresiva, donde los grandes empresarios y dueños de los campos le impusieron un tope a lo que tributan. La crisis de nuestra Obra Social IOMA se viene acentuando los últimos tiempos.
Por eso, es necesario organizarnos y exigir nuestros derechos, desde las bases.

No podemos dejar que nuestros gremios acepten propuestas a la baja con discursos desmoralizantes, que dividan las luchas, alentando el corporativismo y las peleas por separado, intentando desactivar cualquier proceso de organización, Por el contrario, necesitamos sindicatos de lucha que representen a las y los trabajadores.

Desde La Marrón Clasista en judiciales, venimos siendo parte de cada conflicto en curso al interior del Poder Judicial (por nuestros salarios, contra el cierre de los jardines maternales, por nuestras condiciones laborales), pero también confluyendo con otros sectores, junto a diversas agrupaciones de trabajadores y organizaciones sociales, exigiendo a CGT y CTA paro y movilización con un plan de lucha serio que combata el plan motosierra.

No es momento de esperar. Si de esperar se trata, solo van a llegar más ataques a las y los laburantes. ¡Hay que salir a luchar por todos nuestros derechos!

El paro nacional, los cacerolazos y las movilizaciones de las asambleas barriales que frenaron la votación de la Ley Ómnibus en el Congreso, muestran que ese es el camino y que hay fuerzas para frenar el plan motosierra. La enorme marea verde que inundó las calles de todo el país el 8 de marzo, deja claro que las mujeres tenemos un enorme papel que jugar en la lucha contra los planes de ajuste.

La defensa de la organización gremial para las peleas que tenemos por delante contra el ajuste de Milei, el FMI y los gobernadores, tiene que empezar recuperando la organización democrática desde abajo, con asambleas, con protagonismo de las bases para preparar un nuevo paro general y un plan de lucha que impida que el ajuste lo sigamos pagando el pueblo trabajador y para conquistar todos nuestros derechos.