La Policía de la Ciudad arremetió contra los trabajadores de los medios de comunicación que cubrían la protesta en apoyo a los trabajadores del INCAA. También quitaron elementos a estudiantes y médicos solidarios de la posta de salud que asistían a vecinos heridos. Hay al menos 4 detenidos.
Jueves 14 de marzo 20:16
La Policía de la Ciudad le pega a una fotógrafa de La Izquierda Diario en las inmediaciones de Congreso, 14 de marzo 2024 (Kaloian Santos)
Un fuerte operativo de la Policía de la Ciudad a cargo de Jorge Macri reprimió brutalmente este jueves por la tarde a los trabajadores de prensa que se encontraban cubriendo la acción en contra del ataque a la culturay el desguace del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA). La medida había sido convocada para repudiar el despido de 170 trabajadores y se desarrollaba en el cine Gaumont, en las inmediaciones del Congreso, donde el Senado trata el DNU de Javier Milei.
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En las imágenes puede verse cómo oficiales de la Policía de la Ciudad le pegan una piña a Silvina Safenreiter, fotógrafa y corresponsal de La Izquierda Diario que se encontraba registrando cómo los oficiales avanzaban sobre los manifestantes. Minutos más tarde, la policía avanzó rociando directamente a los trabajadores de prensa con gas pimienta.
Policía le pega a trabajadora de prensa pic.twitter.com/34x1iSsFW9
— La Izquierda Diario (@izquierdadiario) March 14, 2024
La represión a las y los periodistas se da en el marco de un fuerte operativo contra vecinos de asambleas barriales, integrantes de Unidxs por la Cultura, estudiantes, artistas, actores y organizaciones de izquierda que manifestaban su rechazo al brutal ajuste que lleva adelante el gobierno de La Libertad Avanza sobre la cultura. Como resultado del operativo, hay al menos 3 detenidos, uno de ellos integrante de la Asamblea de Vecinos de San Martín (Zona Norte de GBA).
La particular violencia que se vio por parte de los oficiales de la Policía de la Ciudad contra los trabajadores de la comunicación reafirma la política tanto del gobierno nacional de la Libertad Avanza como el municipal de Juntos por el Cambio contra la libertad de prensa que pretende difundir la saña con la que las fuerzas de seguridad atacan a los manifestantes, como se vio durante el tratamiento de la Ley Ómnibus a principios de febrero. En aquellas jornadas, hubo un total de 35 trabajadores de prensa heridos por las fuerzas de seguridad -comandadas por Patricia Bullrich y Jorge Macri-, y detenciones a periodistas y fotógrafos que cubrían las movilizaciones populares.
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Este ataque a los trabajadores de la comunicación se da en el marco del intento de cierre a la agencia de noticias Télam y a la política de vaciamiento del gobierno nacional contra la única agencia estatal de noticias. Es una línea que pretende cercenar el derecho a la información, a la libertad de expresión, y atacar a quienes denuncian la violencia de las fuerzas de seguridad contra quienes defienden sus derechos. SiPreBA -junto a ARGRA, CELS y el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH)- había denunciado hace algunas semanas el incumplimiento por parte del gobierno de Javier Milei de los estándares de libertad de expresión ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y a la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión. Este incumplimiento se expresa no sólo en la represión a los trabajadores de prensa sino también en la intervención del sistema público de medios y la intención de privatizarlo.
Desde La Izquierda Diario repudiamos el ataque a nuestra compañera y denunciamos esta política de represión contra las y los trabajadores de prensa que muestran la realidad que los grandes medios ocultan, el ajuste que quiere llevar adelante mediante el vaciamiento a los medios públicos y el visto bueno a las patronales de la prensa televisada y escrita que pretenden hambrear a las y los trabajadores con salarios de hambre.
Nota aparte merece el ataque que también sufrieron las y los integrantes de la Posta de Salud, que se congregó en las inmediaciones de Congreso para apoyar la acción en defensa de la cultura. Oficiales de la Policía de la Ciudad quiso amedrentar a estudiantes y médicos e intentó confiscar sus insumos para curar a las personas heridas por a la brutal represión.