A propósito de la defensa de los humedales, entrevistamos a Natalia Gomiz, Brenda Reymundo y Sofía Mancilla, trabajadoras de la educación y precandidatas a concejalas en Tigre y Escobar en la lista que encabezan Myriam Bregman y Nicolás del Caño.
Miércoles 26 de julio de 2023 13:51
Natalia Gomiz es bióloga, profesora en el ISFD Rosario Vera Peñaloza de San Martín, militante del PTS y referente del ambientalismo en Escobar. Brenda Reymundo, también militante del PTS, es profesora en escuelas secundarias de Tigre y forma parte de la conducción de Suteba Tigre, seccional Multicolor. Sofia Mancilla es profesora de Biología en secundarias de Don Torcuato, y junto a sus compañeros y compañeras se organiza en la Agrupación Marrón Docente e impulsa la agrupación ambiental Alerta Roja desarrollando, entre otras actividades, talleres para buscar explicaciones profundas a los problemas ambientales y a la crisis ecológica, desde una crítica anticapitalista y marxista. Natalia, Brenda y Sofía vienen siendo parte de las movilizaciones por la Ley de Humedales que se dieron estos años y que recorrieron sus localidades, junto a estudiantes, vecinos y asambleístas. Sus distritos son zonas linderas al delta del río Paraná. En estas PASO, las tres docentes son precandidatas a Concejales en la lista encabezada por Bregman y del Caño. Como parte del dossier que publicamos en la sección Ecología y Ambiente de La izquierda Diario, a propósito de las elecciones y el programa y la campaña de la izquierda, conversamos con ellas
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LID: ¿Cómo afecta la ausencia de la defensa de los humedales en el cotidiano de sus lugares?
Natalia
Recordemos que los humedales son bienes comunes que deben ser protegidos por los beneficios que nos brindan como la depuración del agua, captura de carbono, regulación del clima e inundaciones, conservación de la biodiversidad, valores recreativos, culturales, y posibles usos económicos sostenibles, entre muchos otros. En toda la zona que va desde Tigre, Escobar, Campana y Pilar tenemos el problema de su destrucción por parte del negocio inmobiliario. Se construyen countrys o puertos privados con lagunas artificiales rellenando ecosistemas de humedal y drenando, y contaminando las napas subterráneas, mientras que hay barrios enteros sin agua potable ni cloacas y problemas de acceso a tierras para viviendas populares.
Brenda
En Tigre el intendente es Julio Zamora, que se disputa con Malena Galmarini las PASO de Unidos por la Patria, intentan vender “campañas verdes”. Pero los dos junto a Sergio Massa sentaron las bases de un municipio hecho a medida de los más ricos mientras el humedal se destruye sistemáticamente para beneficiar el negocio inmobiliario. El enorme crecimiento de este negocio con yates, lagunas artificiales y megaconstrucciones destinadas a la especulación, no solo ya generó sino que profundiza una desigualdad respecto a los barrios populares bestil. Por eso, en los últimos años, aumentaron fuertemente las inundaciones y la propagación de enfermedades vinculadas a la contaminación del agua.
Sofía
Acá llegan desarrolladores inmobiliarios que en muy poco tiempo rellenan humedales y ofrecen verdaderas mansiones por miles de dólares y las ofrecen al mejor postor. Pero para su construcción son necesarias obras para elevar la cota natural del terreno, lo que se conoce como “rellenado” de los espacios más inundables, que son suelos pantanosos que cumplen la función de filtrar el agua. Se altera todo este ciclo y los que pagan las consecuencias de las inundaciones son los trabajadores y sus familias. El 50 % de la tierra del municipio está concentrada en un puñado de barrios privados donde solo vive el 10 % de toda la población de Tigre.
Natalia
Todos los intendentes de esta zona, tanto de Juntos por el Cambio como los ahora Unidos por la Patria han sido socios y cómplices directos de la degradación ambiental que esto provoca. No consideran el peligro para las zonas aledañas a estos rellenos, en un período de inundaciones y en un contexto de cambio climático, y favorecen el negocio inmobiliario por sobre incluso leyes como del uso de cursos de agua y de participación ciudadana o convenciones internacionales, como la de protección de humedales RAMSAR.
LID: Junto al negocio inmobiliario, ¿qué otros actores económicos profundizaron el problema de la contaminación y la salud por la destrucción de humedales en su zona?
Natalia
La destrucción de los humedales es una enorme pérdida para la sociedad en conjunto, ya que afecta la salud y el bienestar de la mayoría de los habitantes, el acceso al agua subterránea, a la vivienda y a un ambiente sano. En el mismo sentido vemos cómo para posibilitar el avance de la frontera agropecuaria, los terratenientes queman toda la zona lindante al delta, destruyendo ecosistemas y afectando la salud de todxs con el humo. Las quemas intencionales que se dan en toda la zona lindante producto del avance de la frontera agropecuaria, así como también por la destrucción de los humedales a favor del negocio inmobiliario y la construcción de countries y barrios privados.
LID: ¿Qué proyecto tiene la izquierda sobre los humedales? ¿Qué medidas propone?
Natalia
Desde las bancas del Frente de Izquierda en el Congreso participamos de un proyecto de Ley de humedales que consensuamos entre los distintos partidos del fitu, junto con organizaciones ambientalistas y académicos. Lo interesante de nuestro proyecto de ley de humedales es que incluimos la participación de agrupaciones de modo vinculante, esto es la participación directa de las comunidades que viven en zonas de humedales para que junto con especialistas, decidan su conservación o uso sustentable. Esto es general y vale también para los salares altoandinos. Sin embargo el proyecto fue cajoneado por las presiones de las megamineras, el agronegocio y el negocio inmobiliario. Esto es inadmisible, desde la izquierda priorizamos la salud, el bienestar de las personas y el equilibrio con la biodiversidad por sobre las ganancias de unos pocos.
Sofia
Nuestros estudiantes se enferman cada vez más seguido por las inundaciones que son recurrentes. Las afecciones respiratorias crecen y conviven en hogares plagados de humedad. En Tigre hay barrios que antes no se inundaban y ahora si, cuando llueve no pueden acercarse a la escuela y los estudiantes no asisten a clase porque se enferman muy seguido. Las zonas más afectadas son Las Tunas, Villa La Ñata, Dique Luján, Benavidez, Tigre centro, Rincón, Pacheco, Los Troncos y también El Talar.
Brenda
Desde la lista “Unir y Fortalecer” que encabeza en Tigre Paula Akerfeld, junto a organizaciones ambientalistas, trabajadores y vecinos llamamos a organizarnos para que se apruebe la Ley de Humedales y frenar la destrucción de este ecosistema esencial para la conservación de la biodiversidad, para la absorción del dióxido de carbono (proceso vital para mitigar el cambio climático) así como la retención, regulación y purificación natural del agua. Luchamos en las calles para que saquen esta ley del cajón, desde una perspectiva anticapitalista. Frente a la irracionalidad y destrucción que ofrece el capitalismo peleamos por una planificación democrática y racional de la economía en manos de los trabajadores y trabajadoras.