Derechos laborales. Raquel Sosa insiste en precarizar a los trabajadores de las Universidades del Bienestar

La coordinadora nacional para las Universidades del Bienestar Benito Juárez (UBBJ), Raquel Sosa, continúa con su ataque contra los trabajadores de la institución, ya que a pesar de que un juez federal determinó que debía reconocer a los docentes como trabajadores, a partir de que ganaron una serie de demandas laborales, la funcionaria se negó. Ya que Sosa ordenó el despido de profesores de forma arbitraria por organizarse o simplemente para reducir al personal, en la lógica patronal de ’hacer más con menos’, aunque eso implicara vulnerar los derechos humanos laborales de los trabajadores contratados para llevar adelante las funciones de esas universidades.

Los despidos datan del 2019, cuando se inició un paro en la entonces Escuela de Derecho Ponciano Arriaga (EDPA), hoy UBBJ sede Cuauhtémoc. Dicho paro fue organizado por los estudiantes, a los que pronto se sumaron docentes y trabajadores administrativos, producto de las condiciones de precariedad laboral y de las pésimas condiciones de estudio por la falta de recursos y personal. La respuesta de Sosa fue despedir a todos los profesores y trabajadores del plantel, a la vez que perseguir a los estudiantes que se mantuvieron en pie de lucha durante los meses que se sostuvo el paro.

Un segundo momento fue el 19 de julio de 2021, cuando mediante un correo institucional, las autoridades de las UBBJ anunciaron un despido masivo sin dar ningún tipo de explicación, cuando los profesores ya habían cumplido una semana de trabajo, con la condición de que parar poder cobrarla tenían que aceptar el despido.
Es decir, ni siquiera tuvieron el derecho de una liquidación digna, lo que representó una violación flagrante a sus derechos laborales, como consecuencia de la aplicación a raja tabla de la llamada ’austeridad republicana’. Otros despidos se dieron en noviembre de aquel año, entre ellos el de uno de los profesores que hoy ganó la demanda, Xicoténcatl López en Aguascalientes.

En 2023 continúan las vulneraciones

La lucha de los profesores como Xicoténcatl López y otrxs, logró demostrar que las autoridades de las UBBJ incurrieron en violaciones a la Ley Federal del Trabajo ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, donde se evidenció que los despidos fueron injustificados y arbitrarios, por lo que en noviembre del 2022 se notificó a través de sus abogados a los dos profesores del plantel Calvillo, que el caso les favoreció.

Así, la orden de la autoridad laboral fue que se debía resarcir a los profesores el pago de los sueldos no pagados y la reinstalación laboral inmediata. Sin embargo, el profesor López denunció que cuando se presentaron en el plantel el 2 de enero de este 2023, no se encontraba ninguna autoridad y sólo estaba la secretaria administrativa, lo que los vuelve los primeros trabajadores de programas sociales reconocidos como tales.

Esa situación los llevó a regresar al día siguiente a las instalaciones, pero ocurrió lo mismo, sólo que esta vez se encontraron con la coordinadora del plantel, Erika Daniela Castro, quien siguió con la línea de Sosa de vulnerar los derechos laborales y no reconocer la obligación que como autoridad tienen de resarcir el daño por las violaciones a derechos laborales. Incluso, llegaron al descaro de que, en una de las visitas al plantel, una abogada que decía representar a Raquel Sosa les advirtió que no pasará nada, ya que según ellos no se les había notificado, por lo que no iban a cumplir con la orden del juez.

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Pero esta situación no sólo le ocurre a los profesores o administrativos, se expresa también contra los propios estudiantes, ya que en octubre del año pasado alumnos de las UBBJ sede Tlalpan, de Medicina Integral y Salud Comunitaria (MISC), realizaron una serie de protestas frente a Palacio Nacional denunciando falta de maestros, abuso de autoridad por parte de algunos coordinadores, acoso escolar y la inexistencia de convenios para realizar servicio social o prácticas profesionales.

Ante ello, las autoridades de las UBBJ se negaron a dar respuesta favorable a las demandas de sus comunidades y, por el contrario, se dedicaron a amenazar y hostigar a estudiantes y profesores, con tal de mantener la precarización laboral y en los estudios, situación que se replicó en las sedes de Guanajuato, Aguascalientes y Guerrero.

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Precarización contra los trabajadores

Estos hechos no son nuevos ni son aislados, ya que expresan la continuidad de la vulneración de los derechos laborales que se da en el país contra diversos sectores de trabajadores, producto de la política de precarización que el gobierno de la 4T ha profundizado Es mediante un ejército de trabajadores sin derechos laborales y con salarios miserables que se desarrollan los programas sociales e instituciones como las UBBJ, que utiliza el gobierno para mostrarse como ’progresista’ y a favor de los sectores populares.

Pero los ataques van también contra trabajadores sindicalizados. Basta ver la huelga de SutNotimex, que está por cumplir tres años, la cual estalló contra los despidos arbitrarios y violaciones al contrato colectivo de trabajo, demandas justas que el gobierno no ha querido resolver.

Otros ejemplos los podemos ver en el resto de universidades, donde se advirtió desde el principio que no habría aumentos presupuestales porque “había que hacer más con menos”, lo que ha implicado en la vía de los hechos vulnerar derechos conquistados o no resolver las demandas que los trabajadores tienen, como de aumento salarial superior a la inflación para no seguir perdiendo poder adquisitivo ante la inflación.

Pero no podemos esperar a que sean los gobiernos, díganse progresistas o neoliberales u otras instituciones del Estado, o las autoridades que encabezan a la burocracia y a la privilegiada casta académica de las Universidades, las que resuelvan las demandas de nuestra clase, pues como se puede ver en este caso, la patronal no atiende las resoluciones que se logran a favor de los trabajadores si estos no cuentan con una fuerza organizada que con la movilización pueda obligar a las autoridades. De otro modo, podemos ganar miles de demandas y aun así no nos van a resolver, porque realmente no hay nada que los obligue más que la movilización.

En ese sentido, se requiere la unidad con todos los sectores que quieren enfrentar estos ataques, de la educación, la salud, la industria, los programas sociales y otros, también con los estudiantes que ven afectado su derecho a una educación digna y el movimiento de mujeres que enfrentan la precarización laboral, de la vida y la violencia patriarcal.

Para promover esta unidad se convocó a la Asamblea de Trabajadoras y Trabajadoras en Lucha, que se llevará a cabo este sábado 28 de enero, donde intervendrán diversos sectores de trabajadores que están dando combates por defender sus derechos laborales y por el bienestar de sus comunidades. Desde La Izquierda Diario hacemos una atenta invitación a todas y todos los trabajadores y jóvenes que luchen por sus derechos a asistir.