A los pies de la derecha. Recalde confirmó negociaciones entre el peronismo y el Gobierno para votar al mafioso Ariel Lijo a la Corte

Una vez más los senadores dejaron en claro ante el conjunto de la población las idas y venidas de la rosca que se teje en el Congreso, en este caso en la Cámara de Senadores. Lo hizo el senador peronista Mariano Recalde al plantear que “No quiero cerrar una posición, porque los que llevan la negociación son las autoridades de los bloques” en relación al posible voto a favor del pliego del juez Ariel Lijo para que este se incorpore a la Corte Suprema de Justicia.

Y continuó aclarando (oscureciendo) que la negociación podría ser por “otro juez de la Corte, hay muchas cosas que se pueden hablar, leyes para la gente. Están abiertas las puertas”, dijo Recalde al periodista Ari Lijalad en El Destape, como si desconociera el prontuario y la gravedad de la votación en curso.

De esta manera, Recalde dejó en claro que negocian con la derecha, pero que además están dispuestos a levantar la mano para dotar de un inmenso poder a uno los paradigmas de la “casta”, el juez Ariel Lijo, quién carga con todo tipo de denuncias en su contra por repartir favores a distintos sectores políticos. Un juez de la mafia de Comodoro Py que lleva adelante causas que van desde Correo Argentino a Ciccone (por la que metió preso a Amado Bodou en su momento) hasta la voladura de la AMIA.

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Con este gesto, el peronismo en crisis declara abiertamente no sólo que puede llegar a votar a este oscuro personaje, sino que en última instancia implica un punto de apoyo central para la gobernabilidad y los planes libertarios. Con un pie firme en la Corte Suprema se reduce al mínimo la posibilidad de que esta le ponga algún límite en materia judicial (por ejemplo alrededor de los amparos al mega DNU, entre otros).

Un desbarranque abierto por negociaciones a espaldas de las grandes mayorías populares, donde el propio senador ni siquiera puede aclarar en la entrevista cuales podrías ser esos “beneficios” de negociar con la derecha. La debacle, sin embargo, ya no sorprende. La posibilidad de levantar las manos en favor de Lijo se suma a la votación a favor de la ley Bases que llevaron adelante distintos diputados peronistas. Eso por no ir más atrás y recordar directamente el aporte al armado de las listas de La Libertad Avanza durante las elecciones del año pasado. Un peronismo sin brújula y ante una crisis profunda arrastrado a los pies de la ultraderecha.